Quizá la razón por la que los historiadores siguen examinando una y otra las distintas caras del Holocausto sea que aún hoy, cuando no falta tanto para que se cumpla un siglo de su primera germinación, el horror continúe siendo insoportable y, sobre todo, inexplicable. Tema abordado por infinidad de autores (desde Martin Borszat y Robert Gellately hasta Hanna Arendt, autora del clásico Los orígenes del totalitarismo), ahora es observado por Frank McDonough en La Gestapo. Mito y realidad de la policía secreta de Hitler (Paidós).
La mirada del autor es abarcadora y se centra en los hechos que ocurrieron en Alemania (no en los territorios ocupados) entre 1933 y 1945. Describe desde las razones que promovieron la creación de esa máquina del terror hasta los métodos utilizados, el impacto en diferentes grupos de víctimas (disidentes religiosos, comunistas, judíos) y las complicidades (conscientes o no) que el régimen encontró en distintos actores de la vida política y social de la época. Algo así como un estudio del horror y la perversión humana.
V. H. G.
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