LOS PERSONAJES DE LA PANDEMIA

A FONDO
Covid. Infectólogos, padres enojados y empresarios farmacéuticos¿En qué andan los personajes de la cuarentena?
Texto de Diego Cabot
Cuando la Argentina se sumó a la tendencia global que venía desde Europa y decidió cerrar todo lo posible como prevención para el Covid, el país se convirtió en una escenografía nueva y, quizás, irrepetible. Calles vacías, oficinas desiertas, negocios cerrados y casas llenas. Ese impensado escenario trajo consigo actores nuevos que ocuparon, y coparon la escena. Ministros de Salud, de Educación e infectólogos se llevaron la audiencia al inicio de la cuarentena. Luego, varios personajes se fueron sumando a la coreografía de aquellos días tan disruptivos. Con el tiempo, los que negociaban las vacunas o quienes las fabricaban empezaron a concentrar la atención. Finalmente, la tozudez del gobierno nacional para retrasar la salida ordenada del encierro fue la causante de nuevas caras. Con el tiempo, aquel elenco fue perdiendo minutos de aire. Todos siguieron su camino, con los cachetazos o las palmadas que les impuso aquel protagonismo impensado. Machucones, óxido o brillo; con perfil alto o más bajo que antes. Todos tuvieron que retomar la vida ordinaria después de aquellos momentos extraordinarios. Ninguno salió igual a como entró al primer día de una de las cuarentenas más largas del mundo.

LOS PERSONAJES
CIENTÍFICOS
FUNCIONARIOS
EMPRESARIOS
SALTARON A LA FAMA

Ginés González García
EXMINISTRO DE SALUD

Pedro Cahn
MÉDICO INFECTÓLOGO

Sara Oyuela
LA MUJER QUE SOLO QUERÍA TOMAR SOL

Cecilia Nicolini
EXASESORA PRESIDENCIAL

Hugo Sigman
FUNDADOR Y CEO DEL GRUPO INSUD

Daniél Gollán
EXMINISTRO DE SALUD BONAERENSE

María José Navajas
COFUNDADORA DE PADRES ORGANIZADOS

Fernán Quirós
MINISTRO DE SALUD PORTEÑO

Marcelo Figueiras
CEO DE LABORATORIOS RICHMOND

Nicolás Trotta
EXMINISTRO DE EDUCACIÓNSUBIR

SUS HISTORIAS
Ginés González García, exministro de Salud
“Salud es ministerio”Asumió con festejo y se fue rodeado de escándalos
Asumió casi en medio de una fanfarría. Sonriente y rodeado de sus colaboradores, subió a una pequeña tarima. “Salud es ministerio, Salud es ministerio, Salud es ministerio”, tronaba la poco original canción. El hombre asumió en medio de una euforia casi religiosa que victoreaba la recomposición de la cartera que había descendido a la categoría de Secretaría en la gestión de Mauricio Macri. Pocos días después de aquella entrada de epopeya, la pandemia de Covid se desató en el mundo. “No hay ninguna posibilidad de que el coronavirus llegue a la Argentina", había dicho aquel 23 de enero de 2020. "Estoy mucho más preocupado por el dengue que por el coronavirus", agregó diez días después. Ese despreocupado médico sanitarista terminó siendo uno de los responsables de la cuarentena más larga del mundo. Desde aquellos días pasaron 130.472 muertos por coronavirus y un vacunatorio VIP que usó el propio despacho del ministro para inmunizar amigos y poderosos. El 19 de febrero de 2021, después que trascendiera el escándalo, presentó la renuncia por pedido del Presidente. Jamás se le escuchó una palabra de autocrítica y desligó las culpas a una “confusión involuntaria en su secretaría”. Es uno de los exfuncionarios que le cuesta salir a la calle por el repudio que cosecha cada vez que alguien lo identifica. Pese a eso, el Presidente lo homenajeó en la Casa Rosada el 29 de noviembre de 2022. Pasó casi desapercibido, afectado por la poca importancia que reviste la agenda pública de Alberto Fernández. Actualmente, se mantiene al frente de Isalud, la universidad que creó en 1991. De hecho, el martes pasado fue el anfitrión del ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, en una conferencia que se realizó en esa casa de estudios y donde se trató el tema de las recetas digitales. Mantiene varios emprendimientos como Carpor, un criadero de cerdos en Baradero, y su bodega, Tierra de Huachanache, en San Juan. Además, escribe una novela que no tiene fecha de publicación.


Pedro Cahn, médico
El comité de infectólogosSu figura era de prestigio, pero quedó desgastada
El director de la Fundación Huésped fue uno de los integrantes de la mesa de infectólogos que asesoró al presidente Alberto Fernández. En aquellos primeros días de 2020, el profesional, mediático y conocido por su enorme trabajo de décadas en la fundación, llegó a su pico de popularidad. Era el primero que venía a la mente a las mesas de producción de cientos de programas diarios. “Llamá al doctor Cahn”, se escuchaba. Pasó el tiempo y fue el que más sufrió las consecuencias del desgaste que significó estar a diario en decenas de pantallas. Su rostro quedó asociado a la “infectadura”, aquel neologismo utilizado por un grupo de intelectuales para oponerse a la permanencia de medidas restrictivas. Actualmente volvió a trabajar en su fundación, algo menos demandada por la retracción del VIH. Justamente, esa especialidad, y no el Covid, fue la que lo llevó a ser condecorado con la Legión de Honor, una de las más altas distinciones que otorga Francia por su aporte a la lucha contra ese virus. Se ha recostado en sus dos hijos. Leandro, sociólogo, maneja la Fundación Huésped. Florencia, su otra hija, es presidenta de la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE), una entidad cercana a Carla Vizzotti (fue presidenta antes de asumir como funcionaria de Ginés González García). A diferencia de Cahn, otros infectólogos, como Eduardo López o Roberto Debbag, que tuvieron mucha presencia mediática, pero fueron más críticos de la gestión de la pandemia, lograron sortear aquella ola de figuración. Hoy, ambos regresaron a sus consultorios y lugares académicos. Conrado Estol, en cambio, eligió otro camino. Después de hacer docencia en radio y televisión, anunció en la semana que se incorporó a los equipos técnicos que trabajan para que Patricia Bullrich sea presidente.

Sara Oyuela, la mujer que solo quería broncearse
“Voy a tomar sol media hora y me voy”Su gesto fue uno de los primeros que desafío la cuarentena
Su figura al sol en Palermo quedó como una de las imágenes más contundentes de la pandemia. Espigada y recostada, aquella foto del 20 de abril de 2020 en su reposera se convirtió en un ícono. Detrás, dos policías sin demasiada convicción intentaban convencer a la jubilada sobre los peligros para ella y la salud pública de estar sola en una plaza. “Yo voy a tomar sol media hora y me voy”, dijo entonces. Y se quedó. A principios de enero se supo que había fallecido. Entonces, las redes sociales la despidieron como una mujer que defendió su libertad y que, sin más atributo que una reposera, desafió las restricciones que la mayoría aceptó sin demasiados cuestionamientos.

Cecilia Nicolini, exasesora presidencial
La negociadora de la SputnikJunto con Vizzoti, estuvo a cargo de negociar las vacunas
De perfil bajo pero creciente influencia en los inicios del gobierno de Alberto Fernández, fue una de las más activas a la hora de comprar la vacuna rusa Sputnik. De hecho, su conocimiento del idioma inglés la posicionaron como la gran negociadora con los rusos. Cuando los problemas con la Sputnik fueron manifiestos, su nombre quedó pegado a un mail que envió a Moscú en el que decía que el gobierno argentino había hecho todo lo posible para que la vacuna sea un éxito. Sin embargo, advirtió: “Nos están dejando muy pocas opciones para seguir luchando por ustedes y por este proyecto”. En febrero de 2022 renunció al cargo de asesora presidencial y recaló en el ministerio de Ambiente. El mes pasado, a un año de haber asumido la secretaría de Cambio Climático, Desarrollo Sostenible e Innovación ya había realizado más de ocho viajes al exterior. Fue a Chile, Suecia, Estados Unidos, República Dominicana, Colombia, República de Corea, Egipto y Perú, y reportó gastos por más de $3,4 millones. Nicolini no escapa a la lógica del ministerio al que pertenece: es parte de una gestión mediocre en una cartera que no logró tener una agenda de relevancia.

Hugo Sigman, fundador y CEO del grupo Insud
De las vacunas a NetflixEl encuentro en España entre Sigman y Ginés González García generó polémica

En épocas de apuro por las vacunas, el médico y empresario Hugo Sigman fue el primero que firmó un contrato para producir en el país uno de los componentes de la Oxford–Astra Zéneca. Ese contrato pasó por algunas inestabilidades cuando el proceso no se podía completar por falencias en la fabricación en México, el destino del químico argentino. Pasó el tiempo y el laboratorio mAbxience, del Grupo Insud, terminó el contrato después de producir 250 millones de dosis del principio activo de la vacuna Astra Zéneca que se distribuyeron en América latina, con excepción de Brasil. Ya el año pasado, esa planta regresó a la actividad que tenía antes de la pandemia: producir anticuerpos monoclonales para medicamentos oncológicos. Hugo Sigman permanece cada vez más tiempo en España al punto que el año pasado vino al país no más de 90 días. Dicen que mantiene un proceso de transición generacional -dos de sus hijos trabajan en la compañía- y sigue con su actividad de producción de cine y series. De hecho, sus últimas creaciones son El Reino y División Palermo, para Netflix, y El Fin del Amor, para Amazon.

Daniél Gollán, exministro de Salud de la provincia de Buenos Aires
El médico militanteGollán fue de los más duros a la hora de defender las restricciones

Será recordado por ser uno de los principales defensores de la cuarentena estricta, especialmente para criticar algunas libertades que tenían los porteños. En 2021 se convirtió en diputado nacional por el Frente de Todos. A sus 67 años, se ha convertido en camporista de una generación tardía. “Ha comprado el paquete entero que le vendió La Cámpora”, dice un médico que lo conoce desde sus épocas de gestión. “Se la pasa enviando Whatsapps de militancia, de la facción más cristinista que se pueda imaginar”, contó otro que suele tener acceso a esos mensajes. Se ha manifestó a favor de que Axel Kicillof tenga cuatro años más de mandato y es defensor de la postulación de Cristina Kirchner como candidata a presidenta en este 2023. El 24 de marzo, en la marcha organizada por la agrupación que dirige Máximo Kirchner, el exministro caminó bajo el lema “Luche y Vuelve”. Envuelto en una chomba verde y gorra, estaba en la primera fila de una columna que portaba el cartel Instituto Patria. Caminaba junto al médico Jorge Rachid, otro militante del Frente de Todos. Gollán sostenía la tela a la altura de la “I”.

María José Navajas, cofundadora de Padres Organizados
“Mi hija cree que trabajo de abrir escuelas”Padres Organizados fue un emergente de la cuarentena

Aquellos días Zoom escolar y de porfía para no abrir las escuelas generaron un emergente: Padres organizados. De la mano de las redes sociales y empujados por la posición cerrada de varios gobiernos, aquellos activistas encontraron un camino para hacer sonar la voz de padres que reclamaban educación. María José Navajas fue una de las hacedoras de aquella organización informal. “Padres Organizados se mantiene en base a redes sociales. Y más allá de ocuparnos de cosas del día a día, como problemas de infraestructura, intentamos tener un espacio para pensar a largo plazo con una agenda educativa. Se armó una alianza estratégica con académicos que se llama Coalición por la Educación con temas como los aprendizajes y la formación periódica” dice Navajas. Se reúnen cada 15 días por Zoom y uno de los debates pendientes es armar una fundación o mantenerse en esta iniciativa informal. María José mantiene su cargo como Investigadora del Conicet en el Instituto Ravignani. “Mi hijo más grande ya entiende, pero a mi hija más pequeña le tengo que explicar que no trabajo de abrir escuelas”, se ríe.

Fernán Quirós, ministro de Salud porteño
El (no) corte de pelo más famoso de la pandemiaLos pelos de Quirós fueron uno de los temas de la pandemia

Como Soledad Acuña, su par de Educación, se hicieron conocidos en la pandemia. El primero, en un momento con un corte de pelo típico de pandemia, era la voz diaria de la política sanitaria porteña de Horacio Rodríguez Larreta, mucho más aperturista y moderada que la bonaerense que encabezaba Axel Kicillof. Acuña, se posicionó en un lugar similar en el plano de la educación. Ese camino paralelo los tiene a los dos como precandidatos a la Jefatura de Gobierno porteño. Todo parece indicar que, en otro capítulo de esas carreras de espejo, sus candidaturas tienen los días contados después de la reunión de Larreta con Mauricio Macri. Allí, el expresidente le pidió cerrar filas detrás de un solo. Y el elegido sería Jorge Macri.

Marcelo Figueiras, CEO de Laboratorios Richmond
La “epopeya” de las vacunasLos acuerdos por las vacunas generaron polémicas

En medio de la pandemia, firmó un acuerdo con el laboratorio ruso Gamaleia, que, según cuenta, le generó una pérdida de un millón de dólares. Al igual que Sigman, y productos de los yerros del Gobierno a la hora de elegir proveedores, atravesó una tormenta en la opinión pública. También, como su colega, salió indemne. “Nos daban unos pocos centavos por cada vacuna que se terminaba de producir acá. Pero aprendimos muchísimo y trabajamos muy bien. Lo volvería a hacer. Pudimos producir 10 millones de dosis”, dice. Actualmente tiene un contrato con Cansino, otra productora de vacunas contra el Covid. De aquel momento que hoy recuerda casi como una “epopeya” no sólo le quedó conocimiento sino una planta de producción en la que se podrían canalizar 500 millones de dosis de vacunas. Según contó, este será un año para poner a punto la planta industrial ubicada en Pilar y lograr todas las autorizaciones y certificaciones, nacionales e internacionales, para poder funcionar el año que viene.

Nicolás Trotta, exministro de Educación
El ministro de las aulas cerradasLa gestión de Trotta quedó ligada al largo período con los colegios cerrados

Fue uno de los más fervientes “albertistas” de aquella primera hora. De andar prolijo, supo ser uno de esos funcionarios que apenas asumió, empezó a recorrer con algo más de soltura los círculos de poder. A poco de andar se convirtió en uno de los difusores más eficientes de la primera época del Gobierno. En la pandemia, le tocó ser la cara del cierre de las escuelas. Finalmente, después de las elecciones de 2021, fue uno de los ministros que dejó el cargo. Hoy está enfocado en la vida académica y la generación de una agenda de políticas públicas. El equipo que lo acompañó en la gestión pública trabaja en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET), entidad en la que Trotta preside un Consejo Académico, integrado por empresarios, sindicatos e investigadores. Desde que dejó de ser ministro impulsó la creación del Centro para la Concertación y el Desarrollo. Cuentan en su entorno que es asesor de organizaciones “en la formación y capacitación de sus trabajadores frente a los desafíos tecnológicos”. Entre ellos, el sindicato de la Bancaria. Y el bonus track del exministro. Más allá de su histórica especialidad por los temas educativos, ahora despunta un vicio nuevo en el mundo de los medios: es gerente de Relaciones Institucionales de Canal 9.

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