NICARAGUA

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Polémica contratación de Firmenich como asesor a sueldo de la dictadura de Ortega
Mientras persigue opositores, designó al exguerrillero por US$3735
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y el exmontonero Mario Firmenich
Mario Firmenich, quien encabezó la guerrilla peronista Montoneros, fue contratado en Nicaragua por el régimen de Daniel Ortega, que en los últimos días profundizó la persecución de dirigentes opositores, a quienes les quitó la ciudadanía y los declaró “traidores a la patria”. Firmenich, de 74 años, vive en un barrio cerrado de Managua y cobra un sueldo de US$3735 por mes como asesor presidencial. En la Argentina, la oposición repudió la designación, mientras el oficialismo hizo silencio.
Mario Eduardo Firmenich, exjefe de Montoneros, alineado ideológicamente con el sandinismo desde los años setenta, cobraba al menos hasta septiembre de 2022 un salario mensual de la presidencia de la República de Nicaragua. Como empleado del dictador Daniel Ortega, por lo menos hasta ese mes del año pasado, percibía un sueldo neto de 133.710,59 córdobas (3735,63 dólares).
La noticia fue revelada en una investigación de Nicaragua Investiga (un medio de noticias, reportajes y producciones históricas sobre Nicaragua) y Connectas (una plataforma periodística de investigación latinoamericana). Tras su difusión, varios exponentes de la oposición argentina rechazaron la contratación de Firmenich y vincularon ideológicamente al gobierno nacional con el régimen que gobierna Nicaragua.
La información sobre Firmenich fue obtenida a través de una filtración de la base de datos del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), que contiene datos públicos de toda la planta de personal del Estado de Nicaragua y del sueldo neto que recibe cada empleado.
Aunque su cargo no ha sido oficializado en La Gaceta (diario oficial de Nicaragua), los medios oficialistas La Voz del Sandinismo y Radio Uraccan Siuna publicaron una información en septiembre de 2020 en la que el exguerrillero figura como “asesor de la presidencia para la Planificación”, se resaltó en la investigación, de la cual la nacion reproduce los fragmentos centrales.
Según la ley nicaragüense, Firmenich estaría inhabilitado para ser empleado contratado en el país gobernado por la dictadura sandinista. Viola el artículo 12 de la ley de migración y extranjería, al no poseer cédula de identidad, lo que le impide trabajar en el país y cobrar un salario.
Según la base de datos del INSS, el exmontonero (que tiene 74 años) tiene domicilio en una zona exclusiva de Managua: Residencial Villa San Ángel, Casa 0302. Allí, las propiedades cuestan alrededor de 105.000 dólares. Su último paradero conocido era España, donde estaba radicado desde 1999. Nicaragua parece ser su nueva casa.
Antes de instalarse en Managua, el exjefe montonero se desempeñaba como docente de Economía en la Universidad Rovira i Virgil, en Tarragona, España. En esa casa de altos estudios se jubiló, por lo que en la investigación de Nicaragua Investiga y Connectas se infiere que Firmenich tiene actualmente al menos dos ingresos: el jubilatorio y el que percibe como empleado de la presidencia nicaragüense.
En la misma investigación que reveló el empleo de Firmenich en Nicaragua también se puntualizó que hay otros extranjeros con antecedentes que fueron acogidos por el gobierno de ese país. Se menciona a los expresidentes de El Salvador Carlos Mauricio Funes Cartagena (prófugo de la Justicia de su país y asilado en Nicaragua desde septiembre de 2016) y Salvador Sánchez Cerén (acusado penalmente por casos de corrupción y también prófugo de la Justicia de su país); a los ciudadanos libios Ebtisam Ahmed Elmashi (una mujer nacionalizada en 1997, que ha ocupado varios cargos diplomáticos) y Mohamed Lasthar (sobrino del fallecido dictador Muammar Khadafi y actual embajador de Nicaragua en Kuwait). También al mexicano Ramón Antonio Fregoso Toledo (que recibe un salario del Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria y fue partícipe del documental La ofensiva final, que retrató los últimos 63 días de la dictadura somocista, en 1979).
La relación política del exguerrillero argentino con Nicaragua se remonta a los años setenta. Montoneros llevó adelante, en 1978, acciones para apoyar económicamente a los sandinistas en la ofensiva final contra la dictadura de Anastasio Somoza Debayle. Así lo relató Humberto Ortega, exguerrillero y hermano del presidente nicaragüense, en su libro La epopeya de la insurrección. Tras el triunfo de la revolución sandinista, que puso fin a más de 40 años de dictadura somocista, los líderes montoneros estuvieron en Nicaragua en 1979.
La reacción de la oposición
El vínculo laboral que une a Firmenich con la dictadura de Ortega generó críticas de la oposición en la Argentina. Dirigentes de Juntos por el Cambio rechazaron el nombramiento y vincularon al gobierno argentino con el régimen nicaragüense.
“No me extraña que una persona que ha sido terrorista en la Argentina esté colaborando con una tiranía sangrienta como la de Ortega”, dijo a la nacion el diputado nacional Ricardo López Murphy (Republicanos Unidos).
El diputado nacional Fernando Iglesias (Pro) indicó que “la locura es total”, en un mensaje en su cuenta de la red social Twitter en el que comentó la noticia.
Laura Alonso, extitular de la Oficina Anticorrupción (OA) durante el gobierno de Mauricio Macri, escribió, también en la red social Twitter: “Ortega, el dictador que contrata al montonero asesino”. Y añadió: “Esta lacra es toda de ustedes” (junto a una imagen de dedos en “V”).
“Está claro que son socios de la izquierda que ha causado muchas muertes en Latinoamérica. Ortega muestra eso”, planteó el senador bonaerense Joaquín de la Torre (alineado con Patricia Bullrich), en diálogo con la nacion. “Otra prueba más de que la dictadura de Ortega en Nicaragua es violenta y asesina. Contrataron de asesor a Mario Firmenich, exlíder de Montoneros. ¿Será por eso que la cancillería argentina hace la vista gorda a las violaciones de derechos humanos en Nicaragua?”, se preguntó el diputado Mario Negri, de la UCR.
A su vez, Cristian Ritondo, de Pro, aseveró: “El fundador de Montoneros, Mario Firmenich, contratado por el gobierno tirano de Nicaragua. Los mismos que se llenan la boca hablando de democracia terminan cobrando de dictaduras. No falla”. “No me extraña que Firmenich apoye un régimen autoritario como Nicaragua, porque él lo es”, agregó Graciela Fernández Meijide, que formó parte de la Conadep en el regreso de la democracia.
Veedor y defensor del régimen
En noviembre de 2021, Firmenich mostró su alineamiento con la dictadura de Ortega al ejercer el rol de veedor en las elecciones que ganó el presidente, en las que accedió a su cuarto mandato consecutivo. El exlíder montonero no encontró objeciones para ese proceso electoral, a pesar de haberse desarrollado con siete de los principales candidatos opositores excluidos de la carrera, ya sea porque fueron encarcelados durante los meses anteriores a la elección o porque debieron exiliarse.
Según un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA), los comicios del 27 de noviembre en Nicaragua “no cumplieron ninguno de los elementos esenciales de la democracia”. El régimen “optó por el camino del autoritarismo”, concluyó la OEA.
Ortega no convocó a veedores de la OEA, ni de la Unión Europea (UE), ni del Centro Carter, que habían cuestionado sus reelecciones en 2011 y 2016. Pero sí acreditó a 232 “acompañantes electorales”, en su mayoría enviados por gobiernos y partidos de izquierda, entre los cuales estaba Firmenich.
En un video que se difundió por aquellos días electorales, Ortega precisó que fueron siete los veedores argentinos que supervisaron las elecciones nicaragüenses. Según informó la nacion oportunamente, otro de los veedores argentinos fue Hipólito Irigoyen, líder de la agrupación Populismo K, que integra el ala más intransigente del kirchnerismo. En diálogo con la nacion, Irigoyen había explicado que la Argentina no contaba con una delegación oficial y dijo que fue invitado por Orlando Gómez, el representante de Ortega en Buenos Aires, en un viaje financiado en forma privada.
Firmenich, según un texto que reprodujo el medio argentino Agencia Paco Urondo, justificó las detenciones de opositores (afirmaba que eran arrestos domiciliarios) y negó violaciones de los derechos humanos. “Los que hemos vivido brutales dictaduras militares con legislación proscriptiva de la mayoría social sabemos que una prisión preventiva en arresto domiciliario está a años luz de las denuncias de ‘violaciones de los derechos humanos’ y también sabemos que la no participación electoral de precandidatos inexistentes porque ningún partido los ha proclamado como tales no es ninguna proscripción. Desgraciadamente, los peronistas combativos y revolucionarios somos expertos en esta materia y podemos exhibir las cicatrices ante cualquiera”, escribió el exmontonero en un texto publicado días antes de las elecciones.
Firmenich (detenido en 1984 en Brasil por pedido del gobierno de Raúl Alfonsín, condenado a 30 años de prisión por secuestro y homicidio, pero indultado por Carlos Menem en 1990) sostiene su apoyo a Ortega y lo expresa en columnas periodísticas.
“¿Qué otra cosa más que defenderse con sus propias leyes pueden hacer los Estados y pueblos soberanos cuando una potencia extranjera les intenta promover una guerra civil interna para derrocar al gobierno y destruir su sistema social?”, se preguntó Firmenich en el final de un extenso artículo titulado “13 realidades que explican la situación de Nicaragua”, publicado también por la Agencia Paco Urondo.
“Las leyes electorales que rigen en Nicaragua fueron hechas por el último gobierno de la derecha, que gobernó de 2001 a 2006. Como el FSLN [Frente Sandinista de Liberación Nacional] les ganó las elecciones de 2006, ahora no les convienen”, escribió Firmenich en el artículo, en el que describió a la oposición nicaragüense como una “bolsa de gatos sin gran representatividad social”.
“Esta campaña de fake news de los multimedia oligopolizados [contra Nicaragua] no es otra cosa que un bombardeo ‘de nuevo tipo’”, fue otro de los párrafos de Firmenich en ese texto.
La información sobre el empleo de Firmenich surgió de una filtración
Su designación viola el artículo 12 de la ley de migración y extranjería
Apoyo a Cristina Kirchner
El exjefe de Montoneros también se expresó a través de una columna de opinión tras el intento de magnicidio que sufrió la vicepresidenta Cristina Kirchner.
Dos días después del atentado que intentó perpetrar Fernando Sabag Montiel, Firmenich difundió un texto en el que opinó que “las políticas distributivas de Néstor y Cristina Kirchner beneficiaron a los más pobres, pero, aunque no cambiaron las estructuras de la dependencia neoliberal, fue suficiente para el odio gorila”.
En ese artículo, propuso “un nuevo contrato social”, que resumió en 13 puntos, que van desde “retirar definitivamente a la República Argentina del FMI” hasta la propuesta de “convocar a una asamblea constituyente para reformar la Constitución nacional”.
“La escalada de ‘la grieta’ lleva a la proscripción política ‘del enemigo’ disfrazada de persecución penal, la cual continúa con el discurso de un diputado nacional pidiendo fusilar a Cristina Fernández de Kirchner. Y la provocación terrorista para la guerra civil llega al repudiable intento de magnicidio contra la vicepresidenta de la Nación. No falló la bala por milagro; fue una amenaza mafiosa sobre el futuro”, escribió el actual empleado del gobierno de Nicaragua.●
“No me extraña que colabore con una tiranía sangrienta”, dijo López Murphy

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