FIJATE BIEN A QUIÉN VOTÁS.....LA POBREZA NO SIRVE A NADIE....SÓLO MÁS POBRES Y ELLOS MÁS RICOS...

La pobreza inclusiva como modelo económico
El modelo Argento, tiene dos fuentes principales de inestabilidad, la falta de exportaciones y la carencia de una moneda sana, sin tener ahorro en pesos, el país financia su desequilibrio fiscal crónico con una combinación de inflación y controles cambiarios, con tasas reales negativas, que castiga a los inversores en pesos que necesita; en un cortoplacismo endémico, que termina apoyando ideas anti exportadoras en la ilusión de maximizar y redistribuir rentas que no son propias.

Argentina ha desarrollado un modelo de pobreza inclusiva que piensa la política social como una indemnización, donde los hogares socialmente excluidos por el fracaso del Estado para proveer bienes públicos y movilidad ascendente son "compensados" con un sistema ineficiente de transferencias monetarias indiscriminadas, donde los que necesitan y los que no las reciben por igual, algo muy demente, pero muy K, recordemos que Néstor comenzó con la tendencia y si él lo hizo esta bien.
Debido a la ausencia de financiamiento externo para Argentina, cualquier estrategia secuencial se encuentra condenada al fracaso, porque simplemente sin un programa de estabilización económica, no es posible llevar adelante cualquier política de inclusión laboral y sin ella no hay ajuste fiscal ni programa del FMI fiscalmente sostenible. Un círculo virtuoso de estancamiento y pobreza sostenida desde hace más 15 años.
Argentina es un país sobre diagnosticado y sub ejecutado, después de tantos fracasos, existe un consenso considerable sobre qué hacer para salir de esta dinámica implosiva y nuevamente enfrentamos la simplificación en el pensamiento de funcionarios con poder de decisión.
Un plan de estabilización debería incluir, como mínimo, una reforma previsional, que separe las jubilaciones que fueron obtenidas de acuerdo a las normativas con 30 años de aportes y 65 de edad como base y las que fueron obtenidas de otra manera que no son jubilaciones, sino un subsidio a la vejez, de esta forma se depuraría el sistema, porque no todo es lo mismo e incrementar en 5 años como mínimo la edad de jubilación, una opción que debería ser voluntaria, quien desee continuar trabajado lo pueda hacer y que se quiera jubilar que lo haga.
Los regímenes especiales deberían eliminarse gradualmente, tanto en el nivel nacional como en el provincial que hoy son el núcleo del problema.
Cualquier programa de estabilización requiere de un compromiso con las provincias, en la idea estas pueden quebrar sino administran bien sus recursos, el Estado nacional debe dejar de ser el prestamista del último recurso de ellas y no hablo de modificar la ley de coparticipación, que es casi imposible hacer, porque es la única ley que requiere el acuerdo del 100 x 100 de las provincias, algo que nunca se logrará, porque ninguna quiere perder, como ejemplo pongo el retiro de los fondos que recibía CABA, que “todas” las provincias votaron en con la Nación para sacarle los fondos y por ultimo lograr una reforma tributaria posible y real que se encuentre basada en un esquema progresivo de impuestos a los ingresos que reemplace la absurda cantidad de impuestos distorsivos y duplicados, con la prohibición a las provincias y municipios de crear impuestos vía tasas municipales.
Si logramos estas tres cosas tendremos un futuro posible, sino continuaremos en el ciclo de la pobreza inclusiva, donde la lógica de los funcionarios del Estado es luchar en contra de la Ley de Gravedad


D. M. 

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