Comienzan los alegatos en el juicio por el brutal homicidio de Marianela Rago Zapata
La joven estudiante de periodismo fue degollada y apuñalada en su departamento; su expareja es el único acusado
Marianela tenía 19 años cuando fue asesinada
El juicio por el crimen de Marianela Rago Zapata, la joven estudiante de periodismo hallada asesinada de 23 puñaladas y degollada en su departamento del barrio porteño de Balvanera en julio de 2010, entrará hoy en la etapa de los alegatos. Su expareja es el único acusado en el largo proceso.
Según informaron fuentes judiciales, está previsto que la audiencia comience a las 10 en la sala del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 29 porteño, ubicada en la planta baja del edificio judicial situado en Paraguay 1536, en Recoleta.
En el debate está siendo juzgado Francisco Amador, de 36 años, expareja de Rago Zapata, que llegó al juicio en libertad, luego de haber sido sobreseído en cinco ocasiones entre 2013 y 2018 por jueces de primera instancia, aunque finalmente terminó procesado por la Sala VI de la Cámara del Crimen.
Amador está acusado del delito de “homicidio simple”, para el cual se prevé una pena de 8 a 25 años de cárcel. Esto se debe a que la figura del “femicidio”, que se castiga con la pena única de prisión perpetua, recién fue incorporada al Código Penal argentino en 2013, tres años después del asesinato de la joven estudiante universitaria.
Fuentes judiciales informaron a la agencia de noticias Télam que está previsto que en esta jornada expongan sus alegatos el fiscal general Sandro Abraldes y los abogados de la querella, Esteban Galli y María de la Paz Herrera, del Programa de Asistencia y Patrocinio Jurídico a Víctimas de Delito de la Defensoría General de la Nación, que representan a la familia de la víctima.
En tanto, se espera que pasado mañana tome la palabra el letrado Luis Ricca, a cargo de la defensa técnica de Amador, para exponer su alegato, en el que buscará evitar que el acusado sea condenado.
Voceros judiciales señalaron a la agencia de noticias Télam que se aguarda que para mediados de diciembre los jueces del TOC Nº 29 Hugo Navarro, Juan María Ramos Padilla y Rodolfo Goerner den a conocer su veredicto en la causa por el crimen cometido hace 13 años.
Marianela Rago Zapata fue asesinada el 27 de junio de 2010. Según la autopsia, la joven estudiante de periodismo fue degollada y recibió 23 puñaladas en su departamento del barrio porteño de Balvanera, donde fue encontrado su cuerpo.
En la primera audiencia del juicio, Amador, quien conoció a la víctima cuando era preceptor de su colegio en Río Grande, provincia de Tierra del Fuego, aceptó responder preguntas de las partes y negó su responsabilidad en el crimen.
El cuerpo de Marianela fue hallado al día siguiente del homicidio, el 28 de junio de 2010, cuando su hermano Matías fue a ver qué pasaba en el departamento A del piso 7 de la calle Tucumán 2080 que la víctima alquilaba, ya que no lo atendía.
Al ingresar al inmueble, el hermano de Marianela vio que la estudiante yacía en el piso del living. Según el análisis forense, la joven murió degollada y quien la asesinó le aplicó, además, 23 puñaladas con una cuchilla que desapareció del cajón de la cocina del inmueble.
Durante el transcurso de las audiencias del juicio, que comenzó en septiembre pasado, declararon familiares, amigos y conocidos de la joven estudiante. Todos coincidieron en que la relación entre Marianela y Amador “era violenta y tóxica”, y que él “la maltrataba y le pegaba” constantemente.
En tanto, Patricia Zapata, madre de la víctima, dijo al momento de declarar ante el TOC Nº 29 que Amador “no toleraba que Marianela estuviese acompañada, ni siquiera con amigas”.
“No creo que haya sido un robo; creo que él la siguió. No hay crímenes perfectos. Yo creo que él fue, él la siguió, le molestó que tuviera una nueva vida. Marianela no se merecía esto”, sostuvo la mujer ante el tribunal, mientras su hijo Matías y su marido, Eduardo, rompieron en llanto, por lo que debieron ser abrazados y contenidos por allegados.
En una de las audiencias, a puertas cerradas, también declaró la exmujer de Amador, con quien tiene un hijo y sobre quien se le impuso a él una orden de restricción de acercamiento tras haber sido acusado de violencia de género, según señalaron voceros judiciales.
En una de las últimas jornadas del debate, desarrolladas a mediados de este mes, declararon cuatro forenses que formaron parte de la junta médica que evaluó las hipótesis del homicidio que sostienen la fiscalía y la querella.
Héctor Di Salvo, médico legista que practicó la autopsia y que integra el Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, recordó que el cuerpo de Marianela “tenía muchas lesiones, fundamentalmente punzocortantes, traumáticas, tipo contusas”.
“Predominantemente, la causa de la muerte fue un degüello. También tenía un desgarro en el hígado, que también puede ser una lesión idónea para provocar la muerte”, manifestó el médico legista ante los magistrados.
Con respecto a los golpes recibidos por la víctima, Di Salvo fue contundente al expresar que fueron realizados “con mucha saña, o de una manera vulgar, diría que con muchas ganas”. Agregó que la joven estudiante de periodismo tenía “lesiones de defensa, como si hubiera querido parar el arma o los golpes”.
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Condenan a un policía por manejar ebrio y matar a un joven
Recibió una pena de cuatro años y dos meses, pero seguirá libre ¿?¿?¿?¿?
Un sargento de la policía bonaerense fue condenado a cuatro años y dos meses de prisión por la muerte de un joven de 23 años en un choque de motos en la ciudad de Lincoln cuando el suboficial conducía en estado de ebriedad.
Según informaron fuentes judiciales, el Juzgado en lo Correccional N° 2 de Junín encontró a Juan Manuel Odermatt, de 31 años, culpable del “homicidio culposo agravado por ser funcionario policial” de Eduardo Guerrero y de “lesiones culposas” en perjuicio de Priscila Amado, pareja del joven fallecido.
La noche del 15 de noviembre del 2020, dos motos chocaron en la intersección de Belgrano y Laprida, en Lincoln; producto del impacto, Amado agonizó durante 60 días y falleció en el Hospital de Junín.
Odermatt, que entonces era cabo de la Policía Montada, conducía la otra moto. Según quedó acreditado en la causa, no estaba en funciones en el momento del siniestro. Circulaba alcoholizado y a contramano.
“En esta línea de interpretación de los hechos y de la prueba producida que emana de la normativa procesal, surge, en forma indubitada, que el imputado conducía la motocicleta descripta previamente con un índice de alcohol en sangre de 1,02 g/l, es decir, más del doble del límite que se permitía a la fecha del hecho”, señaló en el veredicto el juez Jorge Ariel Coppola.
El magistrado consideró como atenuantes que “el imputado no registraba antecedentes penales y que las víctimas se desplazaban en un motovehículo sin utilizar el casco reglamentario”.
Además de la pena, el juez impuso al suboficial una inhabilitación especial de diez años para conducir automotores y motos. Dispuso también que Odermatt siga en libertad hasta que la sentencia sea revisada. Para eso, deberá mantener su domicilio actual, del cual no podrá ausentarse por más de 48 horas, mientras que se le prohibió la salida del territorio argentino, indicaron los voceros.
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