EL MISERABLE PLAN PLATITA

El bono llega solo a un grupo de jubilados, en un año de ajuste y bolsillos golpeados
El refuerzo solo será para quienes cobran el haber mínimo, y habrá otro beneficio que también sería limitado; cómo quedan las cifras
Silvia StangANSES..Fernanda Raverta, directora de la Anses
En el contexto de un ajuste del gasto en prestaciones sociales que se dio en el último año por efecto de la inflación –un problema creciente, sobre todo tras la devaluación post-PASO–, el ministro de Economía y candidato a presidente por el oficialismo, Sergio Massa, anunció en claro tono electoral modificaciones en una serie de medidas que ya habían sido dispuestas para jubilados y pensionados.
Días antes de las PASO se comunicó que, en septiembre, la recomposición de los haberes del sistema general de la Anses será, por el índice de movilidad de ley, de 23,29%. Las subas definidas por la fórmula van quedando muy por debajo de la inflación en los últimos tiempos. La aplicación del 23,29% lleva a que, desde el inicio de este año, el aumento de haberes acumule un 74,5%, en tanto se estima que, a septiembre, los precios medidos por el Indec tendrán un avance no menor del 90% y que a noviembre (mes en el que seguirán vigentes los mismos haberes) la inflación podría superar el 120%.
Para quienes no reciben bonos mensuales de refuerzo (que son una política continua desde hace un año, surgida de la insuficiencia de la fórmula de movilidad), la caída del valor de los haberes en términos reales llegó en siete meses (a julio) a 11,7%. Ese es, también, el nivel de pérdida del poder de compra que sufrieron en igual período otras prestaciones, como la AUH o las asignaciones por hijo de un grupo de trabajadores formales y monotributistas (en este último grupo hay quienes tuvieron caídas mucho mayores, porque dejaron de recibir bonos que cobraban en 2022).
En los siete primeros meses del año, incluso los jubilados de la mínima, que perciben refuerzos, tuvieron una caída de sus ingresos en términos reales, ya que la inflación acumuló un 60,2% y la suba de los ingresos (considerando los bonos de cada momento) fue de 46,3%. Eso se traduce en que, con lo percibido en cada caso, en julio se pudo comprar un 8,7% menos que a fines de 2022.
Con el anuncio inicial del reajuste para septiembre, se había dicho que se pagaría un refuerzo de $27.000 a quienes cobran hasta el equivalente a una vez el ingreso mínimo (esa condición es por titular y no por beneficio, por lo cual, a quien percibe dos prestaciones básicas no se le asigna ese bono). Ahora se decidió que el importe será de $37.000. De esta manera, quienes tienen ese haber básico, de $87.460 desde septiembre, recibirán el mes próximo y también en octubre y en noviembre un total de $124.460, en bruto (neto del aporte al PAMI, el monto es de $121.836). En diciembre deberá haber un nuevo reajuste por movilidad.
Según puede interpretarse del anuncio, y en función de cómo se instrumentaron los bonos en meses anteriores, habría un refuerzo de $37.000 para quienes ganen la jubilación mínima o menos (hay quienes cobran menos, porque el bono alcanza a beneficiarios de pensiones no contributivas), y un extra inferior a ese valor para quienes tienen un haber de hasta $124.460.
No se comunicó nada, ni en el momento del anuncio inicial ni este domingo, respecto de quienes cobran más de esa cifra, de lo cual se desprende que no tendrían bono. Hasta este mes, y por disposiciones previas, los refuerzos alcanzan a quienes ganan hasta el equivalente al haber mínimo multiplicado por dos. Tal como se interpreta del nuevo anuncio, hay jubilados que dejarían de cobrar bonos. De todas maneras, resta conocer detalles de la medida, sobre los que no hubo precisiones pese a las consultas hechas por la nacion. Lo anunciado deberá formalizarse con normativas publicadas en el Boletín Oficial.
Devolución de montos
Massa también dijo que se incrementará el monto de la devolución que se les hace a los jubilados por las compras de alimentos y otros productos de consumo masivo, que se paguen con tarjetas de débito vinculadas a las cuentas bancarias en las que se cobran las prestaciones mensuales. El importe, que hasta ahora era de $4056, subirá a $18.000. No se aclaró cuál será el alcance de la medida, pero hasta ahora el régimen de devolución de importes, tal como lo explica la AFIP en su página web, es solo para quienes cobran el haber mínimo y está vigente hasta el 31 de diciembre de este año. Si se confirma que el beneficio se mantiene solo para este grupo, se agravará la desigualdad en el trato por parte del Gobierno a los jubilados, en desmedro de los que más aportaron, quienes, en la mayoría de los casos, tienen ingresos que no son altos en función del costo de vida.
Massa también recordó una medida que había sido puesta en marcha antes de las elecciones primarias: la suba a $400.000 del tope de los créditos a tasa subsidiada (el interés es del 29% anual) que otorga la Anses. Esa ampliación de montos había sido informada en julio por el ministro y por la directora ejecutiva del organismo de seguridad social, Fernanda Raverta. Según el candidato a presidente, el total disponible para este plan es de $400.000 millones.
El ajuste del último año
Según un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), en el período de enero a julio el gasto real (corregido por inflación) en prestaciones sociales hecho por la administración pública nacional tuvo una reducción interanual de 8,7%. La mayor caída se dio en las asignaciones familiares cobradas por los trabajadores de la economía formal, con un ajuste de 35,2%, mientras que en la Asignación Universal por Hijo la disminución del gasto estatal, siempre en términos reales, fue de 9,4%, y en el plan Alimentar (cobrado por los hogares con AUH donde hay chicos de hasta 14 años), de 9,9%.
Los números consignados por el informe dan cuenta de que la inflación le permite a la actual gestión hacer un ajuste silencioso, que también afecta a las jubilaciones y pensiones. En este caso, la reducción de lo pagado por el Estado para atender a una cantidad más alta de prestaciones fue, en términos reales, de 3,8% entre enero y julio de este año en comparación con igual período de 2022. Sin embargo, dado el peso que tiene este ítem (casi cuatro de cada diez pesos del gasto corriente van al sistema previsional), es mucho más significativa, en comparación con otros conceptos, la “ayuda” dada por la inflación –y por la insuficiencia de la fórmula de movilidad– para concretar un ajuste. La contrapartida es la pérdida de poder adquisitivo, que difiere según el nivel de ingresos de las personas.

LAS MEDIDAS, UNA POR UNA

Jubilados

En septiembre, octubre y noviembre la Anses pagará un bono de $37.000 para jubilados y pensionados. Con este refuerzo, la mínima pasará a $124.000, un 147% de incremento anual. Además, en las compras con tarjeta de débito recibirán una devolución del IVA por consumos, con un tope de hasta $18.000. Además, continúa la posibilidad de acceder a créditos de hasta $400.000 en 24, 36 o 48 cuotas a una tasa menor que la que otorgan los bancos. La medida beneficiaría a 7, 5 millones de personas.

Monotributistas

Los monotributistas que integren las categorías A, B, C y D no pagarán por seis meses el componente tributario. Además, podrán solicitar un crédito de hasta 4 millones de pesos –dependiendo de su categoría– a pagar en 24 cuotas y con una tasa inferior a la que otorgan los bancos. Para aquellos trabajadores independientes que quieran incorporarse a la economía formal se lanzará el programa “monotributo productivo”.

Tarjeta Alimentar

Para los beneficiarios de la Tarjeta Alimentar se otorgará un bono de suma fija en septiembre y octubre. Para las familias con un hijo, el monto será de $10.000; para las familias con dos hijos, de $17.000, y para las familias con tres hijos, de $23.000. Además, después de los próximos dos meses se otorgará un aumento de la tarjeta del 30%. “La idea es cuidar el acceso a los alimentos de los sectores más vulnerables”, afirmó el ministro Sergio Massa durante el anuncio.

Agropecuarios

Para los productores agropecuarios que fueron declarados en emergencia se promete financiar hasta cinco toneladas de fertilizante para llevar adelante el proceso de siembra de la próxima campaña. Además, se implementará el programa de retención 0% para economías regionales con valor agregado industrial, como el vino, el mosto, el arroz y el tabaco, entre otras. Se pondrá en marcha el programa Incremento Exportador, con la posibilidad de acceder al 25% de disponibilidad de divisas para comprar poroto de soja para procesar y mantener los puestos de trabajo de las plantas industriales. Se continuará con el programa Puente al Empleo, que transforma los planes sociales en empleo registrado para quienes tomen trabajo en el sector rural.

Exportadores

Se implementará un programa de 770 millones de dólares para

prefinanciar exportaciones. Unos 550 millones de dólares serán otorgados por el Banco Nación y los restantes 220 millones serán financiados por el Banco de Inversiones y Comercio Exterior (BICE). “Para que las empresas que venden trabajo argentino al mundo tengan todas las herramientas para seguir aumentando el volumen de exportación y acumular reservas”, detalló el ministro de Economía y candidato presidencial en el video que difundió a través de sus redes sociales.

Potenciar Trabajo

Para los beneficiarios del programa Potenciar Trabajo se abonará un bono de $20.000, que se pagará de manera escalonada: $10.000 en septiembre y los otros $10.000 en octubre. La medida alcanzaría a 1.300.000 personas.

Precios

Massa anunció un acuerdo de precios con más de 400 empresas que representan unos 50.000 productos de higiene y alimentos de primera necesidad de la canasta de los argentinos, en el que se prevé “un sendero de aumento del 5%” mensual”. Además, se congelará el precio de los combustibles y de los medicamentos –ya registraron aumentos– hasta el 1° de noviembre. “Para este programa ponemos un beneficio del 6% del total de impuestos que pagan las empresas en descuento del IVA y del impuesto a las ganancias”, dijo el ministro. Se suspenderá por decreto el incremento de la medicina prepaga para grupos familiares con ingresos no superiores a $2 millones mensuales.

Trabajadores

Para los trabajadores en relación de dependencia se anunció el acceso a líneas de crédito de hasta $400.000 a pagar en 24, 36 o 48 cuotas, a una tasa menor que la que se paga por el saldo crediticio. La solicitud se podrá realizar online, con la posibilidad de ser debitado del sueldo. Para aquellos empleados del sector público y privado con salarios netos de hasta $400.000, se otorgará una suma fija de $60.000 a pagar en dos cuotas de $30.000, no remunerativa y a cuenta de las paritarias. El Estado asumirá el costo mediante el pago a cuenta de contribuciones de micro (100%) y pequeñas empresas (50%). Esto beneficiará a 5,5 millones de trabajadores. Además, habrá un refuerzo por única vez de $25.000, en dos cuotas mensuales y proporcional a las horas trabajadas para los empleados de casas particulares. Para los empleadores con ingresos de hasta $2.000.000 mensuales, el Estado reembolsará el 50% del bono.

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