miércoles, 11 de octubre de 2023

OPINIÓN Y LA IGLESIA




La menemización de Milei por otros medios
Luciana VázquezJavier Milei
La vorágine en la que entró ayer el dólar blue fue el termómetro de una sensibilidad social que empieza a recalentarse a medida que se acortan los tiempos electorales. El cierre del debate presidencial del domingo inauguró el último tramo hasta la elección del 22 de octubre. Hubo un cambio de percepción en la noche del domingo. Benefició a alguno de los candidatos. Tuvo impacto negativo en otros. No está claro cuánto va a durar ese reajuste, pero empezó a condicionar los pasos de los candidatos, y también a los argentinos. Lo sucedido en el debate con Javier Milei aportó también, al día siguiente, a esa inquietud cambiaria. Milei le echó leña al fuego.
El debate no benefició a Javier Milei, que quedó desdibujado ante los embates de Patricia Bullrich. Ayer se dedicó a corregir esa percepción y volvió a sus hits para ir por todo: la promesa, o amenaza, de dolarización, elevada ahora a la enésima potencia. Una menemización recargada, pero en versión Carlos Menem del 89, el del caos antes del orden que llegaría con la convertibilidad. “El peso no vale un excremento”, dijo Milei en Radio Mitre, en plena corrida del dólar blue. “Jamás en pesos, jamás en pesos”, aconsejó a los ahorristas que enfrentan la renovación de plazos fijos.
Ayer, la reacción del mundo de los economistas de la oposición y del oficialismo, además del mismo Massa, fue tajante y marcó la gravedad de las declaraciones de Milei: “irresponsabilidad”, “busca generar el caos”.
La memoria de varias generaciones de argentinos viajó, veloz, hasta 1989 y las declaraciones de un hombre clave de Menem, el entonces diputado peronista Guido Di Tella, que luego sería su canciller, cuando habló del “dólar recontraalto” que se vendría, a lo que le siguió una corrida que contribuyó a la debacle del gobierno de Raúl Alfonsín.
Aquellos días de hiperinflación fijaron el primer paso de un patrón de conducta que se repetiría varias veces en transiciones de un gobierno a otro, para complicarlo: declaraciones de figuras de la oposición con chances de asumir el poder que lanzan afirmaciones críticas para la estabilidad económica. En aquel 1989, además de Di Tella, Domingo Cavallo fue acusado de fogonear la crisis en Estados Unidos, pero el economista lo negó.
En 2019, reapareció el patrón. A fines de julio, el candidato por el Frente de Todos, Alberto Fernández, planteó: “Este precio del dólar es una ficción” y “todos sabemos que el dólar está subvaluado”. Fue Bullrich, entonces ministra de Seguridad, una de las dirigentes de Cambiemos que lo cuestionaron, y recordó el dólar “recontraalto” del 89 y sus consecuencias. En esos días, el kirchnerismo discutía si Fernández no debía ir todavía más lejos con ese tipo de declaraciones. Nadie se animó a ir por tanto: la condena social y política todavía tenía cierta vigencia.
Ahora llegó el turno de Milei, que desde las PASO se mueve como presidente electo. En esta coyuntura, en la que el libertario está demoliendo acuerdos básicos de sociabilidad política, sus declaraciones parecen no quitarle chances electorales. A los economistas que lo cuestionaron por alentar una corrida los trató de hipócritas: ¿o ellos ahorran en pesos? Esa es su estrategia: quitar el velo de un manotazo como si fuera un Robin Hood de la política. Deschavar los privilegios de la casta para dárselos a los comunes. Milei ha logrado correr los límites de lo decible hasta extremos llamativos: ni el riesgo de ser corresponsable de una corrida cambiaria que termine en un híper logran condenarlo como el malo de la película y dejarlo fuera de carrera. Es dueño de un aura que expande los límites de lo posible hasta lo imposible y lo riesgoso.
Por eso el debate del domingo, donde Bullrich lo expuso con astucia política como socio de Barrionuevo y de Massa, fue un golpe duro para el libertario. “Vos, Milei, con Barrionuevo al lado, no vas a hacer nada. Ya te metiste dentro de la casta”, lo desafió Bullrich. “Tenés a todos los chorros de Massa en tus liscarga ¿Vas a poder cambiar algo con esos chorros?”, le dijo también. El deschavador de castas también se vio deschavado.
Más que sensación de triunfo, hubo sensación de alivio en las filas de Bullrich después del debate. El sabor a victoria de Bullrich fue la contracara de un sabor a irrelevancia, si no derrota, de Milei en el debate.
En ese contexto, lo de Milei y sus comentarios sobre la pérdida del valor del peso no es un exceso. Es más bien un plan, y en dos sentidos. Por un lado, una preparación de las condiciones materiales que habilitaría, en caso de ganar, la dolarización tan mentada. Lo dejó claro la semana pasada en Mar del Plata: “Cuanto más alto esté el precio del dólar, más fácil es dolarizar”.
El sábado, luego de las declaraciones de Mar del Plata, el economista Guillermo Mondino, hermano de Diana Mondino, pero que no milita en las filas libertarias, más bien estuvo cerca de Patricia Bullrich en los inicios de su campaña, fue gráfico para señalar los riesgos que Milei le está haciendo correr a la Argentina. Mondino dijo en X (ex-Twitter): “Llama la atención la especulación sobre una hiperinflación como un ‘objetivo’ de política o, en su defecto, un instrumento a ser manejado. ¿Qué se creen? ¿Neurocirujanos con bisturí láser? La híper es una caja de Pandora, política, económica y socialmente”.
Hace una semana, en el primer debate, Milei ni siquiera pronunció la palabra “dolarización”. Hace semanas, también había dejado de hablar de los 30.000 o 60.000 millones de dólares, porque cambia la cifra con frecuencia, necesarios para dolarizar y de los supuestos fondos que se los prestarían. Pero ayer a la mañana también volvió a la con esos dos temas. Por otro lado, tiene que ver con la decisión de volver al Milei león que le resta la estatura presidencial con la que se mueve.
En el tono, también quedó golpeado en el debate: Bullrich le quitó el tono vital y arrollador que es parte de su identidad y se quedó con la actuación de leona combativa y puso a Milei a la defensiva. Milei acusó recibo.
Milei está en un brete. Si se vuelve racional, está obligado a perder algo de la identidad que lo trajo hasta acá. En el debate, pisó varios palitos y terminó defendiendo temas, casi como error autoinfligido, que minan su imagen de racionalidad y que en los últimos meses había decidido correr a un costado, hasta retas. ducirlos a reformas de tercera generación, o a “discusiones filosóficas”. La negación del cambio climático y el impacto negativo de la actividad humana, la venta de órganos y la portación de armas lo reafirman en su núcleo duro, pero no está claro cuánto lo benefician, o perjudican, en la batalla de la opinión pública en el camino hacia las elecciones. La dolarización, en cambio, es un territorio más fructífero para su estrategia: es un tema racional, aunque discutible y polémico.
A la incertidumbre argentina, ahora se suma una inestabilidad global cada vez más inquietante. Ya no solo la guerra de Ucrania, cuyos costos globales, al menos por ahora, el mundo parece haber descontado. Ahora también se instala dramáticamente la guerra entre Israel y el terrorismo de Hamas, que sobrevoló el debate presidencial del domingo. Gobernar la Argentina siempre ha sido difícil. El presente muestra que cada vez lo es más. El rol de Irán, con los antecedentes de los dos atentados terroristas en la Argentina, extrema esa inquietud. Se acelera la velocidad con la que el mundo toma partido, empujado por el efecto contagio de las redes sociales, y con la que encuentra nuevas polarizaciones .
En medio de las dudas electorales de todo este 2023, se imponen nuevas dudas. Ya estaba instalada una duda: el riesgo de que ninguno de los candidatos sea capaz de desbloquear la Argentina, empantanada en una alternancia de gobiernos que no logra la salida del laberinto por arriba. La complejidad agrega nuevas capas con Hamas, Israel e Irán.
Milei se muestra otra vez riesgosamente sobregirado en ese punto: la idea de mudar la embajada argentina de Tel Aviv a Jerusalén toca unos de los puntos más delicados en Medio Oriente, que es el estatus de la ciudad santa.
En el mismo sentido, va la promesa de quebrar la sociabilidad internacional con China o el Brasil de Lula. En el horizonte, se recorta cada vez más un Milei que se confunde con Menem y sus matices o con Donald Trump, pero sin un Estados Unidos que lo respalde.
El debate no benefició a Javier Milei, que quedó desdibujado
Ayer se dedicó a corregir esa percepción y volvió a sus hits para ir por todo: la promesa, o amenaza, de dolarización, elevada ahora a la enésima potencia


&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&



La Iglesia alerta sobre una crisis económica y social cada vez más grave
La preocupación más urgente de los obispos es el crecimiento de la pobreza y la inflación; Milei volvió a criticar el papel político del Papa
Mariano de VediaEl arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge Ignacio García Cuerva
“Los candidatos se han dedicado a hablar del Papa, pero la Iglesia no va a llevar a Francisco al barro de la campaña. Lo que más preocupa es la grave situación económica y social”. Esa es la respuesta que se encuentra cerca de los obispos frente a lo que describen como “intentos de utilización política”. Esa definición, según fuentes del Episcopado, engloba tanto los insultos del dirigente libertario Javier Milei como el planteo del oficialista Sergio Massa, que reflotó el tema en el primer debate presidencial.
Para la Iglesia, lo que pueda pasar en diciembre con la asunción del nuevo gobierno está lejos. La inquietud principal es la crisis que ya está, con una pobreza del 40,1%, que sin las ayudas del Estado treparía entre los menores de 14 años al 59% –según un estudio del Observatorio de la Deuda Social Argentina– y una inflación que no se detiene, insistieron distintas fuentes eclesiales, ante consultas de
Algunos comedores y parroquias tienen listas de espera. “No podemos llegar con alimentos para todos. Crecen los pedidos y disminuye la donación de alimentos”, advirtió el padre Munir Bracco, responsable de la Pastoral Social de Córdoba, donde el arzobispo local, el flamante cardenal jesuita Ángel Rossi, creó el mes pasado la Vicaría de los Pobres, que pone en el centro de la atención a las “personas en riesgo social”.
También la Fundación Banco de Alimentos, que fue creada en Córdoba en 2002 y hoy asiste a más de 90.000 personas, tiene una lista de espera de 400 porque no puede “atender a todos” en los comedores y merenderos comunitarios.
La preocupación de la Iglesia por la crisis no se agota en la cuestión de los ingresos, la pobreza y el empleo precario. El crecimiento del consumo de drogas y otras adicciones, como el juego y las apuestas online, presentan datos poco auspiciantes. “Cada celular se puede convertir en un casino y eso está pasando en las escuelas”, advirtió el padre Bracco, en momentos en que las miradas sobre la industria del juego se posaron a raíz del escándalo de Martín Insaurralde.
“En una escuela, un cantinero preguntó por qué iban menos chicos a comprar merienda. El motivo era que dedicaban el tiempo y los pocos recursos que tienen a probar su suerte en apuestas online”, reveló un sacerdote. En otro colegio, comentó, varios chicos hicieron un pozo para ayudar a un compañero a pagar las deudas de juego”.
“Más que en diciembre la Iglesia está pensando en cómo acompañar a la gente hoy, que la está pasando mal”, resumió otra voz eclesial. Todo en el contexto de la permanente convocatoria al diálogo y a la tolerancia de quienes piensan distinto. Lo dijo el presidente del Episcopado, monseñor Oscar Ojea, en su último pronunciamiento: “Es imposible construir un país sin diálogo y con insultos, gritos y descalificaciones”, en sintonía con los reproches por las descalificaciones de Milei a Francisco. Lejos de desdecirse, el candidato de La Libertad Avanza ratificó sus críticas en la reciente entrevista con el periodista Tucker Carlson, de la cadena Fox News, al acusar al Pontífice de “defender las dictaduras sangrientas de Venezuela, Cuba y Nicaragua”.
La réplica más contundente llegó de la voz y las manos de los curas de villas y barrios populares, que celebraron una misa de desagravio por los ataques de Milei y defendieron las políticas de justicia social y la “presencia inteligente del Estado”, frente a las situaciones de emergencia. “Uno se termina preguntando si alguien con ese desorden emocional, que no puede encontrarse con quien piensa distinto sin gritar o insultar, puede soportar las tensiones propias del cargo público al que aspira”, dijeron los sacerdotes en un documento, al poner en duda la capacidad del dirigente libertario para conducir el país en un contexto de crisis.
Los curas villeros se reunieron sucesivamente con los candidatos Sergio Massa, Patricia Bullrich y Juan Schiaretti y no lo hicieron con Milei. Un encuentro de improbable concreción en el contexto actual.
El fuerte descontento de las filas católicas con el candidato que define la justicia social como “un robo” se expresó en la peregrinación de jóvenes a Luján, donde aparecieron carteles con leyendas explícitas en distintos tramos del camino. “El pueblo ama a Jesús. Milei lo odia”, “El pueblo ama al papa Francisco”, “El pueblo ama a la paz. Milei la odia” y “No a la venta de órganos y niños. Cuidemos la vida”, decían algunos de los carteles.
Ayer, después del segundo debate presidencial, Milei volvió a cuestionar al Papa. “Sus intenciones políticas no son las que coinciden con un mundo mejor. Tiene fotos con dictadores de todo el mundo, dándoles la mano. Y se lo ve contento. Yo a Maduro, Putin, no les doy la mano ni loco”, dijo el candidato presidencial de La Libertad Avanza en Radio Mitre.
“El Papa es para nosotros un profeta de la dignidad humana en un tiempo de violencia y exclusión. Pero, por otra parte, también es un jefe de Estado al que se le debe un respeto particular”, expresó monseñor Ojea en su último pronunciamiento. El propio arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge Ignacio García Cuerva, cuestionó la semana pasada el nivel del debate político en la Argentina y lo calificó como “tóxico, agresivo y violento, lleno de chicanas y de oportunismos”.

http://indecquetrabajaiii.blogspot.com.ar/. INDECQUETRABAJA

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.