Aunque bajó en el ranking, la UBA se ubica entre las 100 mejores del mundo
Así lo revela QS, que difunde cada año la clasificación; para esta edición, modificó su metodología de análisis; la UCA aparece como la mejor de gestión privada entre las argentinas
Delfina CelichiniPor cambios metodológicos, la UBA pasó del puesto 67 al 95
A pesar de presentar un marcado retroceso respecto de rankings anteriores, la Universidad de Buenos Aires (UBA) conserva su lugar entre las 100 instituciones líderes del mundo, según la última edición del Ranking QS 2024, que tiene en los tres primeros puestos al Massachusetts Institute of Technology (MIT), de Estados Unidos, y a las universidades de Cambridge y de Oxford, ambas del Reino Unido, en segundo y tercer lugar, respectivamente. La Universidad Católica Argentina (UCA) se ubicó como la mejor entre las de gestión privada del país.
Este año, QS hizo un cambio metodológico. Sumó tres variables: sostenibilidad, resultados laborales y red internacional de investigación, además de ajustar la ponderación de algunos indicadores anteriores.
Entre los indicadores evaluados, la UBA es la institución con mayor proyección internacional del país, según los criterios de reputación académica y empresarial de QS. A nivel mundial, ocupa una posición entre las 20 mejores universidades de renombre, según los empleadores internacionales. Sin embargo, la UBA se enfrenta a algunos retos en esta clasificación. Descendió varios escalones con respecto a la última medición: fue del puesto 67 al 95. Dado que ha mejorado su puntuación en la capacidad docente durante el último año, “solo su bajo desempeño en el área que mide el impacto de la investigación es lo que le impide avanzar hacia el top 50 global”, explicaron desde QS.
La variación fue, para muchas instituciones, muy abrupta, como el Instituto Tecnológico de California (Caltech), que pasó del puesto 6 al 15, o el de la Universidad de Pekín, del 12 al 17. En contraste, la Universidad de Nueva Gales del Sur trepó 26 escalones (del 45 al 19).
“Hubo un cambio en las ponderaciones y se sumaron indicadores. Este giro metodológico derivó en un nuevo ranking, y no una continuidad de los anteriores. Hubo un salto muy fuerte respecto de cómo se mide, que constituye una nueva clasificación mundial”, subrayaron fuentes de la UBA a y destacaron que “todas las universidades comenzaron muy rezagados de su posición anterior”.
Sobre el bajo desempeño en investigación, la UBA señaló que las circunstancias macroeconómicas son determinantes para sobresalir en este punto: “Los insumos, las maquinarias y los sistemas de software que se usan en los equipos están atados al dólar, así como los aranceles obligatorios para poder publicar en revistas internacionales”.
El vicepresidente sénior de QS, Ben Sowter, comentó al respecto: “Si bien el increíble respeto que los empleadores mundiales tienen por la UBA es sin duda un testimonio de la preparación laboral de sus graduados, la Argentina en su conjunto tiene mucho por delante si quiere afirmarse como un destino de estudios de primer orden”.
Y concluyó: “La Argentina debe mejorar su agenda de investigación, sus colaboraciones académicas y sus esfuerzos en sostenibilidad. La mejora de la producción académica centrada en los retos contemporáneos pertinentes, el fomento de las asociaciones mundiales y con la industria, y las medidas específicas para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible ayudarán a elevar su educación superior”.
Si se analizan los resultados en función de la presencia de la Argentina a nivel global, son 11 las universidades que aparecen en la última edición del ranking QS. De ese total, solo la Universidad Nacional de La Plata subió de posición; seis bajaron y cuatro permanecieron iguales.
Entre las 500 mejores casas de altos estudios del mundo, solo hay una argentina: la UBA. La Universidad Católica Argentina (UCA), que desciende varias posiciones, se sitúa en el puesto 514. Pero, apuntaron desde QS, la UCA “disfruta de la puntuación más alta de la Argentina en la ratio profesorado/alumno, situándose en el puesto 22, lo que sugiere que tiene clases reducidas y recursos significativos dedicados a la enseñanza”.
“El valioso aporte de nuestros docentes contribuyó a que la universidad se haya consolidado en un puesto tan relevante en nuestro país. El plus que le damos a la educación, centrada en el desarrollo de habilidades técnicas y profesionales, son los valores y competencias emocionales que distinguen a nuestros alumnos en el mercado laboral”, señaló a Miguel Ángel Schiavone, rector de la UCA.
La Universidad Austral (UA) es la tercera institución local mejor clasificada (520). Le sigue la Universidad de Palermo (530), aunque se la destaca como “líder nacional en el ratio de estudiantes internacionales, que pretende evaluar el atractivo global de las instituciones para los estudiantes extranjeros y la diversidad que pueden esperar en el campus”. Ocupa el puesto 79 en ese indicador y la convierte en la latinoamericana con mejor puntuación.
El secretario académico de la UA, Julio Durand, indicó: “El ranking QS muestra este año una marcada volatilidad para el subconjunto de instituciones de nuestro país. No es la primera vez que sucede, pero la magnitud de los cambios no contribuye al análisis y su proyección en el tiempo. Sobre todo, si se toma en cuenta la introducción de cambios en la metodología”. El rector de esa casa de estudios, Julián Rodríguez, considera un logro significativo que, año tras año, sea distinguida como una de las mejor posicionadas en la región: “Es joven, y ya se le reconoce una destacada reputación”.
Las argentinas que están entre las 1000 mejores del mundo son: UBA (95), UCA (514), Austral (520), Palermo (530), Nacional de La Plata (540), Belgrano (761-770), Instituto Tecnológico de Buenos Aires (791800), San Andrés (801-850), Torcuato Di Tella (851-900), Nacional de Córdoba (951-1000) y Nacional de Rosario (951-1000).
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