Cinco razones para ver Merlina, la ficción de Netflix que recupera el oscuro encanto de Los locos Addams
Jenna Ortega en una escena de Merlina...Netflix
La ficción de ocho episodios se transformó en el nuevo fenómeno de audiencia de la plataforma de streaming, gracias a la fantástica actuación de Jenna Ortega como la hija mayor del sombrío clan
Natalia Trzenko
Dos chasquidos de dedos, una paleta monocromática de estilo funeral chic y más excentricidades de las que se puedan contar. Los locos Addams, título con el que se conoció localmente a la serie de 64 episodios estrenada en 1964 -más cábala que casualidad, teniendo en cuenta el tema-, fue un fenómeno global cuando los fenómenos globales eran tracción a sangre, generados boca a boca y se regaban por el mundo de maneras casi misteriosas. Pero en el caso de los personajes creados por el dibujante Charles Addams para la revista The New Yorker, el amor fue inmediato y tan apasionado como el que comparten Morticia y Homero. Después vinieron las películas en los años 90, con Anjelica Huston y Raul Julia y las versiones animadas más recientes hasta llegar a Merlina, la serie dedicada a la primogénita de la familia que lleva algo más de una semana como la ficción más vista de Netflix en todo el mundo.
Según las cifras difundidas por la plataforma, la serie fue vista en más de 50 millones de hogares alrededor del mundo y en una semana consiguió romper el récord establecido en mayo por la cuarta temporada de Stranger Things: la mayor cantidad de horas vistas de un programa por los suscriptores de Netflix. Los números oficiales de esa plataforma dicen que en siete días los espectadores le dedicaron 341 millones de horas a Merlina, un logro que demuestra la vigencia de una historia que lleva más de medio siglo fascinando a la mayoría. Que ahora, además, consiguió al mejor socio para volver a la pantalla: Tim Burton. Una de las muchas razones para no perderse las aventuras de la oscura heredera de los Addams.
1. La dirección de Tim Burton. Para sorpresa de nadie, cuando la revista Empire le consultó al director de El gran pez por su interés en La familia Addams en general y en el personaje de Merlina en particular su respuesta no dejó lugar a dudas: “Compartimos la misma visión de mundo”. Esa visión del mundo que Burton lleva más de 35 años exorcizando en la pantalla grande, poblada monstruos tan temibles como tiernos y gente “normal” torturando a los diferentes, ahora aparece desplegada en toda su sombría gloria en la serie. Y personificada en Merlina, un personaje que bien podría haber sido pariente cercana y malhumorada de El joven manos de tijera o tal vez una compañera de purgatorio de la novia cadáver en El cadáver de la novia. Burton dirige los primeros cuatro episodios de la serie poniendo el énfasis en los costados más tenebrosos del mundo, allí donde su protagonista -alérgica al color y al sentimentalismo- se siente más cómoda. La creación del suspenso a través de los sonidos y la ambientación y lo que no se muestra son mecanismos habituales del director, que utiliza cerrados primeros planos para retratar a los personajes más sospechosos y siempre que puede enfoca a Merlina como quien admira a una musa tan oscura como evocativa.
Jenna Ortega como Wednesday "Merlina" AddamsWednesday_S1_E2_00_42_32_17
2. El carisma sombrío de Jenna Ortega. La idea de tener un personaje central que ve el mundo a través de un prisma oscuro como la noche es divertida pero también tiene el potencial de agotarse rápidamente en términos narrativos. Sin embargo, los creadores y guionistas de la serie, Alfred Gough y Miles Millar, evitaron ese potencial empacho al elegir a Jenna Ortega para interpretar a Merlina. La carismática actriz, de 20 años recién cumplidos, trabaja en televisión y cine desde los 10. Ya sea que le toque interpretar a la hija rebelde de Jennifer Garner y Edgar Ramírez en la película ¡Hoy, sí! (disponible en Netflix) o a la nueva protagonista de la saga de terror meta Scream, cada vez que aparece en escena Ortega obliga a seguirle los pasos y a prestar atención a cada uno de sus movimientos y parlamentos. En su boca, la peculiar cosmovisión de Merlina resulta cómica: su interpretación le suma una vulnerabilidad y soledad que aparece muy de vez en cuando, siempre en el momento indicado. Si después del éxito de Scream 5 y el anuncio de que será la protagonista de la próxima entrega de la saga estaba claro que la joven actriz se encaminaba al estrellato, su encarnación de la sarcástica Merlina terminó de confirmar la sospecha.
Gwendoline Christie, de Game of Thrones, es la directora de la Academia Nevermore, Larissa WeemsPP_VC_101_092921_0130
3. Gwendoline Christie, ahora una misteriosa rubia de Hitchcock. Por casualidad o decisión, cada vez que la actriz aparece en pantalla nada, salvo su inocultable altura, recuerda a Brienne de Tarth, el personaje que interpretó en Game of Thrones. Una favorita del público desde que se sumó a la ficción de HBO, en Merlina la intérprete británica aparece con los colores y los modos de las heroínas de Alfred Hitchcock: pelo platinado, trajecitos de tweed ceñidos al cuerpo y un rouge rojo fuego que contrasta con su piel de alabastro. Como la directora Weems, máxima autoridad del colegio de élite al que concurre la protagonista, Christie sonríe sin dejar de transmitir un aire de misterio que roza lo siniestro, el tono ideal para el relato que lidia con adolescentes con características monstruosas (que se suman a aquellas que generan sus propias hormonas). Una dama misteriosa y con más de un secreto oculto, Weems aparece como una admirable adversaria de la imposiblemente terca alumna Addams.
Ortega junto a Luis Guzmán en el papel de Homero AddamsPP_VC_101_102121_0209
4. Christina Ricci, una aparición estelar que une pasado con futuro. En el punto exacto en el que se encuentra la obra de Burton y el legado de La familia Addams está Christina Ricci. La actriz, que encabezó el film El jinete sin cabeza, de Burton, también fue la joven Merlina en las dos entregas cinematográficas de Los locos Addams que dirigió Barry Sonnenfeld. Ahora, 29 años después de interpretar ese papel, Ricci aparece en la serie de Netflix como la intrigante profesora Thornhill, una de las pocas personas que parecen entender y aceptar a Merlina tal y como es. Claro que como todos en la serie, ella oculta mucho más de lo que muestra: el desarrollo del personaje justifica la presencia de la actriz. Para los curiosos, Merlina aún no fue confirmada para una segunda temporada pero dado su éxito es muy probable que la tenga. Y aunque no conviene revelar qué personajes podrían ser de la partida, sí se puede decir que será la oportunidad ideal para darle más escenas con las que divertirse a Catherine Zeta Jones y Luis Guzmán, que se lucen como los legendarios Morticia y Homero, más cercanos a los modelos originales de la década del 30 que a sus encarnaciones más recientes.
Jenna Ortega incluso coreografió el baile que interpreta su personaje en uno de las escenas centrales de la primera temporada de Merlina, que ya es un fenómeno en Tik TokWednesday_S1_E1_00_48_45_08
5. Una historia llena de guiños y homenajes para descubrir. La acción de Merlina transcurre mayormente en la Academia Evermore, a la que ingresa la protagonista luego de ser expulsada de una escuela pública. El internado fue el lugar en el que se conocieron y enamoraron sus padres: es una institución educativa fundada para acoger a los vástagos de freaks, monstruos y otros marginados. En ese escenario, los productores repartieron unas cuantas referencias y homenajes tanto a la historia original como a la filmografía de Burton. Por ahí aparece un retrato de Ignatius Itt, el peludo personaje de la serie de los 60 que en el doblaje al castellano era mencionado como “el tío Cosa”. Además, el pabellón en el que se instala Merlina se llama Ofelia, nombre de la hermana de Morticia que aparecía en algunos episodios de la sitcom de entonces. Los espectadores atentos encontrarán también referencias a la obra de Burton en la oficina de la directora Weems, que tiene una cabeza jibarizada a modo de decoración que recuerda a una de las escenas de Beetlejuice; los ojos saltones del monstruo principal se parecen a los de los extraterrestres de ¡Marcianos al ataque! Un homenaje a sus películas El jinete sin cabeza y Charlie y la fábrica de chocolate cuelga a simple vista de las paredes del café del pueblo. Y para darle el último empujón hacia lo macabro, en la tienda de antigüedades repleta de roedores embalsamados, aparecen unos cuantos caracterizados como personajes de sus films.
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