FORREST GUMP....VELA...ES MUY BUENA...

Forrest Gump está disponible en Netflix, Paramount+ y Movistar Play.


Forrest Gump: la traición que hizo posible un clásico del cine y la política que hizo correr a su protagonista
Tom Hanks en el papel que le dio su segundo Oscar
Éxito de taquilla, premiada con el Oscar y repleta de diálogos memorables –que no están en la novela original–, la película de Robert Zemeckis cumple tres décadas y lo reúne con Tom Hanks y Robin Wright para un nuevo proyecto
Pablo Planovsky
¿Es algo más la vida que un infinito juego de azares, o es el azar una manera de llamar desde nuestra ignorancia a la compleja maquinaria de la causalidad? Forrest Gump, la película que cumple 30 años, llenó las salas de cine cuando se estrenó. Se convirtió en un fenómeno: la gente citaba las frases de la película, los políticos se querían apropiar de la película, y terminó ganando varios premios Oscar. Hoy nadie duda de su calidad como exponente de lo mejor de Hollywood. Pero la realidad es que nadie quería hacerla ¿Fue el azar, como la brisa que lleva la icónica pluma por el aire, lo que determinó su destino de clásico?
Para empezar, la novela original es bastante diferente a la película. “El libro es una farsa, pero los únicos que pueden adaptar farsas son los franceses, en el teatro. Es una novela picaresca, episódica, y para Hollywood lo episódico es una mala palabra”, admitía su autor, Winston Groom.
Warner Bros. tenía los derechos para adaptar la novela al cine, pero no encontraban el guion adecuado. Después de nueve años y varios libretos, el proyecto parecía imposible de adaptar a la pantalla grande. Hacer un guion no es escribir una novela. Eric Roth lo sabía. “No hay guiones que sean grandes obras de literatura, salvo El Padrino II y Barrio chino”. Así que empezó a escribir el guion de Forrest Gump haciendo cambios sustanciales.
En la novela, Forrest trabaja en un cine y tiene un orangután que lo acompaña a todos lados. Nunca se casa con Jenny y ella nunca muere. Ni siquiera hace la mítica maratón con la que recorre todos los Estados Unidos. “Esa idea, la de correr, fue porque necesitábamos algo catártico para el personaje. Nos dimos cuenta en ese momento que corrió toda su vida, entonces pensamos que sería una buena idea hacerlo correr”.
Roth se inspiró en el cine de los hermanos Coen para uno de los motivos centrales de la película: que nadie sabe qué puede pasar en la vida, que siempre es impredecible y te puede llevar a donde sea. De allí surgió una de las frases más citadas hasta el día de hoy: “La vida es como una caja de chocolates: nunca sabés lo que te va a tocar”.
Tom Hanks y Robin Wright en Forrest Gump
“Esa frase no es mía –dice el autor de la novela–. Nunca escribiría algo así”. La frase de la novela es: “Ser un idiota es como una caja de chocolates”. El cambio explica, entre otras cosas, una sensibilidad distinta para la película. “En el libro Forrest no es simpático, pero en el cine tenía que serlo”, explica Roth. “Esto prueba que no sé nada de cine”, confirma Groom, que nunca se quejó de la adaptación que hizo Hollywood de su escritura.
Pero resolver el guion era apenas el primer paso de una maquinaria mucho más compleja. En Hollywood siempre buscan minimizar riesgos económicos y nadie quería hacer una película cuyo high concept (es decir, la frase que se usa para vender una idea a los productores) literalmente era: “Un hombre con discapacidad mental se encuentra en situaciones extraordinarias”.
Mientras nadie se animaba a producirla, Rain Main, el clásico con Tom Cruise y Dustin Hoffman, ganó el Oscar. Pero ni siquiera aceptaron un guion de Forrest Gump escrito por el guionista de esa película. La lógica, como cuenta una de las productoras de Forrest Gump, era que “no se podían hacer dos películas sobre discapacitados”.
El guión de Eric Roth llegó a manos de Tom Hanks, quien fue uno de los pocos en ver el potencial que tenía la historia. Después de que Warner tirara la toalla, Hanks se reunió con los jefes de Paramount. Durante la cena, les relató la escena de la pluma y las anécdotas que había vivido Forrest como si fueran propias. En cinco minutos, los popes del estudio estaban fascinados.
Pero luego comenzó otro gran problema: el relato requería de la pericia técnica de un maestro del cine. Había que incorporar al personaje en material de archivo, quitarle las piernas al teniente Dan y mostrar explosiones típicas del cine de acción.
Llamaron a Robert Zemeckis, un cineasta con experiencia en películas con efectos visuales, como Volver al futuro y ¿Quién engañó a Roger Rabbit? En el guion de Roth, el teniente Dan siempre tenía una nube negra sobre su cabeza y Jenny tenía alas de ángel. “Creo que me llamaron porque pensaron que la película iba a ser una mezcla de humanos con dibujitos”, admite Zemeckis, que también confiesa que esa idea fue una de las primeras en ser descartadas.
Forrest Gump fue una película pionera en los efectos visuales, de esas que marcan un antes y después en la historia del cine. En la película trabajaron técnicos como Ken Ralston, cuyo currículum incluye La guerra de las galaxias, y John Knoll (uno de los creadores de Photoshop y responsables de Davy Jones en Piratas del Caribe: el cofre de la muerte).
Los efectos por computadora avanzaron muchísimo desde Forrest Gump. “Hoy puede hacerse todo, pero no significa que deba hacerse todo con efectos visuales –advierte Hanks–. Hoy se espera que las imágenes sean perfectas y esa una carga demasiado pesada para el cine. Los efectos de Forrest Gump, como cuando se encuentra con Kennedy, hoy son moneda corriente: los pueden hacer los estudiantes de cine en la escuela”, explica Zemeckis. “Hoy se espera que cada plano sea magnífico, como un cuadro. No pienso en eso como espectáculo, porque ese no debería ser el motivo para ver una película. El motivo debería ser el poder de la historia”.
La historia de Forrest Gump es un mix que combina comedia y drama con una precisión quirúrgica. Zemeckis nunca leyó la novela, pero sabía hacia dónde quería dirigir esta historia. “Es un milagro que hayamos hecho la película. Se hizo porque Tom quiso hacerla. Ningún ejecutivo la entendía. El estudio no nos tenía fe. Ni siquiera nos dieron el presupuesto para las camisetas del equipo técnico. Hoy no se podría hacer una película como esta. Costaría tres veces más, para empezar”, dice Gary Sinise, que interpreta al teniente Dan en la ficción.
Aunque puede ser interpretada como una historia regional, donde un estadounidense puede cumplir “el sueño americano” si se dedica por seguir órdenes sin cuestionarlas, Forrest Gump es una película mucho más rica y compleja en su narrativa. Eso no impidió que los políticos se hayan querido apropiar del éxito.
Michael Conner Humphries, el niño que interpretó a Forrest y del que Hanks tomó su acento de Mississippi para dárselo a su personaje
Newt Gingrich, entre otros políticos republicanos, elogió a Forrest Gump como “uno de los grandes héroes conservadores”. “Nunca entendí por qué los conservadores amaron a Forrest –dice Roth–. La intención de Bob Zemeckis siempre era ofender a todo el mundo”.
“Mi teoría es que la gente como Newt Gingrich odia el cine. Son personas que piensan que las películas destruyen el tejido social. Pero cuando ven una película que les gusta, dicen cosas como esas. A mí me llamaron de The Wall Street Journal cuando se estrenó Forrest Gump, asombrados, para preguntarme por qué estaban cambiando las cosas en Hollywood”, dice Zemeckis sobre la politización de la película.
¿Es Forrest Gump una metáfora de la presidencia de George Bush? ¿O es una fábula sobre la presidencia de Bill Clinton? No faltaron lecturas que lleven a la película para el lado conservador o el costado más liberal, como suele suceder con algunos de los grandes clásicos del cine.
El libro, por ejemplo, es más crítico con la guerra de Vietnam. Roth no sabía cómo hacer la escena del discurso contra la guerra más cómica. Llamó a Billy Crystal, que le dijo que era imposible de hacer algo gracioso con eso. Hasta que a Zemeckis se le ocurrió una idea: que el discurso no se escuchara y que, al finalizar, solo se escucharan las felicitaciones del hippie que lo acompaña en el escenario.
Hubo otros cambios radicales. En la versión original, Jenny mata a su padre. Fue una escena que llegó a filmarse y se sacó a último momento. Se la veía a ella, pequeña, accionar el tractor que lo terminaría arrollando. Todos vieron la escena y comprendieron que el público jamás le perdonaría haber asesinado al padre de esa manera, sin importar lo que el padre le hubiera hecho.
El banco de plaza en el que Forrest tiene sus revelaciones a lo largo de su vida..PARAMOUNT
Otro de los elementos esenciales fue la música. Alan Silvestri compuso la banda sonora original. “Pero decidimos poner en la película música pop y rock de Estados Unidos. Música propia de la época en la que transcurren los eventos. La música de Alan describe las emociones de los personajes. La música bajo licencia describe el paisaje”, explica Zemeckis.
Tom Hanks encontró la voz del personaje por el que ganó el Oscar en Michael Conner Humphreys, el actor que interpretaba su versión joven. Imitó la cadencia en el habla y los gestos corporales de un chico. Todos quedaron asombrados. “Pero no teníamos idea qué estábamos haciendo cuando empezamos a filmar. Nadie sabía cómo iban a salir las cosas”.
Otra de las grandes frases de Forrest Gump dice: “Estúpido es lo que un estúpido hace” ¿Tiene algún significado particular? Eric Roth se inspiró en una enseñanza que recibió cuando era chico: “Mi mamá decía que lindo es el que hace cosas lindas. Es decir, lo que hacemos con elegancia es recordado. Pero no tengo idea por qué todas las frases de esta película resonaron tanto con el público que todavía las recuerda”.
“Cuando la gente me pregunta si me divertí haciendo la película, les digo que sí”, dice Zemeckis. La complejidad técnica y narrativa de una película como Forrest Gump es digna de estudio. “Pero la verdad es que la sufrí todos los días. No sabía cómo iba a quedar. La única constante era el trabajo duro. Trabajar, trabajar y trabajar”.
La película costó 55 millones de dólares y recaudó más de 678 millones. Tuvo críticas excelentes. Conmovió al público más allá de los límites de Estados Unidos. Le ganó el Oscar a Tiempos violentos y Sueños de libertad. Eric Roth se convirtió en uno de los mejores guionistas de Hollywood. Este año, tanto el guionista como el director volverán a juntarse para estrenar Here, una película protagonizada por Tom Hanks y Robin Wright, las estrellas que protagonizaron uno de los mayores sucesos de 1994 ¿Tendrá la nueva película el mismo destino?
¿Fue el azar lo que hizo que Forrest Gump se convirtiera en un éxito? “Me gusta la filosofía que tiene Forrest al final de la película, cuando habla frente a la tumba de Jenny ¿La vida es siempre azar? Nadie sabe cómo es la vida. Así nos sentimos con esta película”.

Forrest Gump está disponible en Netflix, Paramount+ y Movistar Play.

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