Pasado mañana se conocerá el veredicto por la masacre de pingüinos en Punta Tombo
CHUBUT. Ayer las partes realizaron los alegatos finales en el juicio oral por la muerte de 105 ejemplares y la destrucción de 175 nidos
Ana TronfiLos animales murieron por el paso de maquinaria para abrir un camino
COMODORO RIVADAVIA.– En el contexto de los alegatos finales del juicio por la masacre de pingüinos en Punta Tombo, la fiscal general Florencia Gómez afirmó que quedaron acreditadas la materialidad y la autoría por parte del imputado en cada uno de los hechos acontecidos entre el 10 de agosto y el 4 de diciembre de 2021. “La defensa técnica no ha logrado desvirtuar la prueba, ni traer prueba contra la aportada por el Ministerio Público Fiscal”, dijo.
De este modo, la fiscal confirmó la acusación contra Ricardo Adolfo La Regina, imputado por ecocidio a raíz de la muerte de 105 pingüinos y la destrucción de 175 nidos. El veredicto se conocerá pasado mañana a las 11 en la ciudad de Rawson.
Durante la jornada, también se desarrollaron los alegatos finales de los querellantes: Martín Castro, en representación del Estado provincial, y el abogado Eduardo Hualpa, en representación de las fundaciones Patagonia Natural, National Geographic y la Asociación de Abogados Ambientalistas de la República Argentina.
Gómez explicó que se trata de un delito que es “daño porque acá se destruyó, se hizo desaparecer el hábitat del pingüino de Magallanes, se desmontaron 2049 m² con toda la flora y fauna nativa. No era de su propiedad, acá nunca se debatió el derecho a la propiedad, la flora y la fauna no le pertenecen al imputado, sino al Estado y la sociedad toda”.
Y agregó: “Es agravado porque se han desmontado 2049 m² de zona de reserva de biosfera, con protección internacional por la fragilidad del sistema. Se destruyó vegetación nativa y se levantaron 40cm de la capa del suelo, hay zonas que son irrecuperables”.
La fiscal puso en debate durante el juicio la crueldad hacia los animales y sostuvo que “quedó acreditado por lo manifestado en especialistas en pingüinos que hubo arrastre, compactación y derrumbe de nidos. Quedó acreditado por imágenes satelitales que había pingüinos en el lugar. Fue entre el 26 de noviembre y el 4 de diciembre en plena zona de alta densidad de nidos, en época reproductiva de pingüinos de Magallanes”.
En tanto, desarrolló, “se actuó con dolo directo porque el imputado conoce el ciclo reproductivo del pingüino, no desconocía el ciclo biológico, conoce cuando llega el pingüino a su nido en septiembre. Tuvo un desprecio total sobre la biodiversidad porque había otras especies conviviendo con los pingüinos”.
Además, acusó al imputado de realizar “caminos, desmontes y tajamares” por un fin económico, antes que la protección ambiental. “Hubo siempre un plan económico del imputado, compró una retroexcavadora para abrir caminos y tajamares”, sostuvo.
Al finalizar, advirtió que “se le imputan tres hechos porque, gracias a las imágenes satelitales, se pudo determinar que entre el 10 y el 14 de agosto hizo el camino A, entre el 10 y el 14 de septiembre volvió a pasar la máquina por el camino A, y entre el 26 noviembre y el 4 de diciembre se produjo el daño mayor con el camino B y el desmonte”.
Las palabras de La Regina
Ricardo La Regina, único imputado en la causa, volvió a señalar que su intención “con todo esto es que se use la tierra de manera correcta, proteger a los pingüinos y que me dejen trabajar tranquilo”.
Martín Castro, en representación del Estado provincial, destacó algunas pruebas testimoniales que se escucharon en el debate, como los dichos del denunciante Luis La Regina (tío del imputado y con un campo lindante al establecimiento donde se produjeron los daños); de algunos especialistas, como Pablo Borboroglu “por sus altos conocimientos científicos”, y de los fotógrafos Maximiliano Jonas y Daniel Feldman sobre el relevamiento con imágenes que efectuaron.
Además, valoró el relevamiento efectuado por Borboroglu respecto de la cantidad de nidos y ejemplares afectados. También destacó los testimonios de testigos que refirieron a la ausencia de autorización para ejecutar los dos caminos y a otros que dieron cuenta de las imágenes satelitales para probar las fechas de realización de los caminos. En este sentido, contrastó testimonios de especialistas con los dichos de dos testigos maquinistas que fueron aportados por el defensor Federico Ruffa.
“No tengo dudas de que el señor La Regina ha cometido un ecocidio y por ello la calificación legal escogida es la correcta”, indicó Castro.
Castro concluyó que el imputado La Regina “a sabiendas de que no podía hacer lo que hizo, actuó de manera consciente afectando a la flora y la fauna, sin importarle el interés colectivo. Por eso tuvo una actitud dolosa”.
Por su parte, Eduardo Hualpa, que representa a las entidades ambientales, reiteró los efectos del delito investigado y el carácter público “que significa el bien afectado: el medio ambiente”.
Hualpa destacó el aporte científico para probar el caso, como el de los especialistas en imágenes satelitales y espaciales que brindaron su testimonio, especialmente Samuel Guilford. Para el querellante, quedó demostrado la ejecución de un camino y alambrado electrificado que dividió en dos a la colonia, así como el estrés causado en los pingüinos por la tarea de esa máquina, además de efectos más graves como la muerte de animales adultos y pichones.
Aseguró que el imputado tenía conocimiento de que, en el momento de hacer el camino y la colocación de los alambres, existía una actividad creciente de presencia de pingüinos en plena época de reproducción. Para Hualpa, el daño causado se produjo en un momento de alta densidad de ejemplares, quedando demostrada la crueldad de los medios utilizados. Concluyó con el pedido de que se declare culpable a La Regina, indicando que “el ambiente necesita protección porque ya no resiste más agresión”
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
Premio Herralde para dos novelas “descolocadoras” escritas por mujeres
Cynthia Rimsky, escritora chilena residente en la Argentina, ganó con “Clara y confusa”, y la catalana Xita Rupert, con “Los hechos de Key Biscayne”; ambas tendrán que repartirse los 30.000 euros que concede el prestigioso galardón
Daniel Gigena
Cynthia Rimsky y Xita Rubert, ganadoras del 42º Premio Herralde de NovelaMaría Aramburú y María Fonti/Anagrama
Como todos los primeros lunes de noviembre desde 1983, hoy se dio a conocer el fallo del 42° Premio Herralde de Novela, que ganaron ex aequo la escritora chilena residente en la Argentina Cynthia Rimsky (Santiago, 1962) y la catalana Xita Rubert (Barcelona, 1982), con Clara y confusa y Los hechos de Key Biscayne, respectivamente. Las obras premiadas llegarán a las librerías locales en diciembre; ambas autoras deberán repartirse los 30.000 euros del premio. “Al ser ex aequo, se suma al premio de 25.000 euros la dotación del finalista, de otros 5000, y la suma total se reparte entre ambas ganadoras”, explicaron desde la editorial Anagrama.
Este año, el jurado estuvo integrado por el librero Aldo García (de la librería Antonio Machado, en Madrid), el catedrático español Gonzalo Pontón Gijón, la escritora española Marta Sanz y el escritor mexicano Juan Pablo Villalobos (ambos ganadores del Herralde), y la editora española Silvia Sesé, de Anagrama, que habían seleccionado siete novelas finalistas (entre ellas, Los fieles, del escritor argentino Fernando Chulak) de un total de 1149 inéditos.
“Liviana y profunda, esquiva y sólida, hilarante y seria”, sostuvo el jurado sobre la novela de Rimsky, que calificó de “singularísima”. De Rupert, afirmó que había escrito “a la vez una novela de misterio y un libro sobre las ambivalencias del afecto y la memoria”. En 1994 también se había concedido el Herralde a dos autores: los españoles Pedro Zarraluki y Carlos Perellón.
"Estoy escribiendo en 'argenchileno'", dice Cynthia Rimsky
“Lo del premio ha sido muy gratificante porque este año se premiaron dos novelas que son más disruptivas, que se juegan más en la escritura, novelas más ‘descolocadoras’, y esto no lo digo yo sino el fallo del jurado -dice Rimsky en diálogo La noticia me llegó mientras estaba en Azcuénaga, en la provincia de Buenos Aires, y como no tenía señal telefónica me tuvieron que mandar un mail para avisarme. El Herralde es un buen premio, un premio literario, de prestigio, y estoy muy contenta”. Después de Roberto Bolaño, que lo obtuvo en 1998 con Los detectives salvajes, es la segunda escritora chilena en ganarlo (el medallero del Anagrama está copado por autores españoles).
La editorial iba a organizar un festejo, pero debido a las catastróficas inundaciones en España, con cientos de miles de damnificados, se suspendió para otra oportunidad. “No hay ánimo para fiestas”, señala Rimsky, que hará una pequeña celebración con la fotógrafa María Aramburú y Rupert.
Clara y confusa cuenta la historia de un plomero que se enamora de una artista visual poco reconocida. “La mayor parte de la historia transcurre durante la Fiesta del Pastelito, en un lugar indeterminado, cuando él empieza a dudar de que ella lo ama. Hay una mirada narrativa que equipara el mundo de los artistas visuales con el de los plomeros. Es una novela de amor y también sobre las debilidades humanas, la corrupción, entre ellas. Él es un plomero, metido en el gremio de los plomeros, que se dedica detectar ‘filtraciones fantasmas’ y ella, una artista muy aproblemada porque no tiene el reconocimiento que merece”, cuenta la autora.
“Estoy escribiendo en ‘argenchileno’, mezclando paisajes, dichos y vocabulario chileno y argentino”, agrega Rimsky que es profesora en la Universidad Nacional de las Artes y del Diplomado de Escritura de la Universidad Católica Valparaíso. Ha recibido el Premio Juegos Literarios Gabriela Mistral en 1994, el Premio Municipal de Santiago en 2001 por Poste restante, en 2017 por El futuro es un lugar extraño y en 2021 por La revolución a dedo, el Premio Mejor Obra Literaria del Consejo Nacional de la Cultura en Chile en 2017 por El futuro es un lugar extraño y el Premio a Mejor Obra Literaria del Consejo Nacional de la Cultura en 2023 por la novela Yomurí.
“A caballo entre el oficio del amor y el amor al oficio, Clara y confusa pone en pie un mundo de provincias tan extravagante como las tuberías de que se cuida su protagonista, fiel y sufrido enamorado de una artista conceptual que es una heroína de la negación, y no menos fiel integrante de un sindicato profesional plagado de conspiradores y de filósofos cínicos. Cynthia Rimsky nos condena a sonrisa perpetua en una narración ingeniosa y de una sencillez muy elaborada”, destacó Gonzalo Pontón Gijón.
Y Sanz dijo: “El arte y el enamoramiento como experiencias que sintetizan la máxima claridad y la máxima confusión. Belleza, inteligencia y humor en este libro de Cynthia Rimsky. En este libro de Ovidios y plomeros, de poesía y oficio, la crítica más elitista ensalza los festivales de pastelillos criollos. Hacía mucho tiempo que no me divertía tanto con una reflexión sobre el trágico y risible estado de la literatura. Ay y ja. Fenomenal”.
Xita Rupert ganó el Herralde con su segunda novela. “Es un honor enorme y una sorpresa también -dice Rupert a LA NACION-. Y también me alienta para continuar escribiendo en la vía de lo que hice con mi primera novela, que es retratar conjuntos de personas, a veces de una familia, a veces de un barrio, a veces de una sociedad, y ver qué hay detrás de lo que dicen sobre sí mismos”.
La autora cuenta que Los hechos de Key Biscayne comienza cuando, en una familia de padres separados, el padre recibe por primera vez la custodia de sus dos hijos. “Los niños tienen doce y catorce años, y se los lleva a una isla en el sur del Florida, cerca de Miami, y las cosas progresivamente comienzan a irse al garete”, agrega.
“Un relato prodigioso sobre violencia vicaria en los tiempos en los que aún no se sabía nombrar -dijo Sanz-. Xita Rubert lo hace con un estilo perturbador que alumbra el reverso de los padres más simpáticos, cultos y amorosos: la luz oscura que alimentaría incluso a Atticus Finch. Memoria, desubicación, los desórdenes de la pubertad, qué nombres le ponemos al amor, los límites que separan la figura del padre, del maestro, del amante, el cuerpo sexualizado de las púberes… La ambigüedad y la capacidad de sugerencia de Los hechos de Key Biscayne se transforman en un corte preciso en la piel y la conciencia de quienes leemos esta historia de vampiros”.
Para Juan Pablo Villalobos, la de Rupert es una “novela pegajosa en muchos sentidos: por el calor de una Florida poblada de personajes excéntricos, tan pronto entrañables como exasperantes; por la atmósfera húmeda en la que debe aprender a respirar la protagonista, una adolescente fascinada con su padre, un hombre estrafalario y encantador incapaz de bajar de la luna para ejercer la paternidad; por el ritmo, la mirada y el humor con los que son narrados estos hechos, pegadizos como una canción que no podemos dejar de bailar”.
Rupert estudió filosofía y literatura en Inglaterra. Su primera novela, Mis días con los Kopp, fue seleccionada entre los mejores libros del año por varios medios españoles y resultó finalista del premio Premier Roman de Chambéry. Ha recibido galardones de teatro y cuento en español y sus relatos han aparecido en medios como El País, El Cultural o Cuadernos Hispanoamericanos y en revistas en Estados Unidos y Brasil. Actualmente es investigadora doctoral y docente en la Universidad de Princeton y escribe una columna literaria en el diario La Vanguardia.
COMODORO RIVADAVIA.– En el contexto de los alegatos finales del juicio por la masacre de pingüinos en Punta Tombo, la fiscal general Florencia Gómez afirmó que quedaron acreditadas la materialidad y la autoría por parte del imputado en cada uno de los hechos acontecidos entre el 10 de agosto y el 4 de diciembre de 2021. “La defensa técnica no ha logrado desvirtuar la prueba, ni traer prueba contra la aportada por el Ministerio Público Fiscal”, dijo.
De este modo, la fiscal confirmó la acusación contra Ricardo Adolfo La Regina, imputado por ecocidio a raíz de la muerte de 105 pingüinos y la destrucción de 175 nidos. El veredicto se conocerá pasado mañana a las 11 en la ciudad de Rawson.
Durante la jornada, también se desarrollaron los alegatos finales de los querellantes: Martín Castro, en representación del Estado provincial, y el abogado Eduardo Hualpa, en representación de las fundaciones Patagonia Natural, National Geographic y la Asociación de Abogados Ambientalistas de la República Argentina.
Gómez explicó que se trata de un delito que es “daño porque acá se destruyó, se hizo desaparecer el hábitat del pingüino de Magallanes, se desmontaron 2049 m² con toda la flora y fauna nativa. No era de su propiedad, acá nunca se debatió el derecho a la propiedad, la flora y la fauna no le pertenecen al imputado, sino al Estado y la sociedad toda”.
Y agregó: “Es agravado porque se han desmontado 2049 m² de zona de reserva de biosfera, con protección internacional por la fragilidad del sistema. Se destruyó vegetación nativa y se levantaron 40cm de la capa del suelo, hay zonas que son irrecuperables”.
La fiscal puso en debate durante el juicio la crueldad hacia los animales y sostuvo que “quedó acreditado por lo manifestado en especialistas en pingüinos que hubo arrastre, compactación y derrumbe de nidos. Quedó acreditado por imágenes satelitales que había pingüinos en el lugar. Fue entre el 26 de noviembre y el 4 de diciembre en plena zona de alta densidad de nidos, en época reproductiva de pingüinos de Magallanes”.
En tanto, desarrolló, “se actuó con dolo directo porque el imputado conoce el ciclo reproductivo del pingüino, no desconocía el ciclo biológico, conoce cuando llega el pingüino a su nido en septiembre. Tuvo un desprecio total sobre la biodiversidad porque había otras especies conviviendo con los pingüinos”.
Además, acusó al imputado de realizar “caminos, desmontes y tajamares” por un fin económico, antes que la protección ambiental. “Hubo siempre un plan económico del imputado, compró una retroexcavadora para abrir caminos y tajamares”, sostuvo.
Al finalizar, advirtió que “se le imputan tres hechos porque, gracias a las imágenes satelitales, se pudo determinar que entre el 10 y el 14 de agosto hizo el camino A, entre el 10 y el 14 de septiembre volvió a pasar la máquina por el camino A, y entre el 26 noviembre y el 4 de diciembre se produjo el daño mayor con el camino B y el desmonte”.
Las palabras de La Regina
Ricardo La Regina, único imputado en la causa, volvió a señalar que su intención “con todo esto es que se use la tierra de manera correcta, proteger a los pingüinos y que me dejen trabajar tranquilo”.
Martín Castro, en representación del Estado provincial, destacó algunas pruebas testimoniales que se escucharon en el debate, como los dichos del denunciante Luis La Regina (tío del imputado y con un campo lindante al establecimiento donde se produjeron los daños); de algunos especialistas, como Pablo Borboroglu “por sus altos conocimientos científicos”, y de los fotógrafos Maximiliano Jonas y Daniel Feldman sobre el relevamiento con imágenes que efectuaron.
Además, valoró el relevamiento efectuado por Borboroglu respecto de la cantidad de nidos y ejemplares afectados. También destacó los testimonios de testigos que refirieron a la ausencia de autorización para ejecutar los dos caminos y a otros que dieron cuenta de las imágenes satelitales para probar las fechas de realización de los caminos. En este sentido, contrastó testimonios de especialistas con los dichos de dos testigos maquinistas que fueron aportados por el defensor Federico Ruffa.
“No tengo dudas de que el señor La Regina ha cometido un ecocidio y por ello la calificación legal escogida es la correcta”, indicó Castro.
Castro concluyó que el imputado La Regina “a sabiendas de que no podía hacer lo que hizo, actuó de manera consciente afectando a la flora y la fauna, sin importarle el interés colectivo. Por eso tuvo una actitud dolosa”.
Por su parte, Eduardo Hualpa, que representa a las entidades ambientales, reiteró los efectos del delito investigado y el carácter público “que significa el bien afectado: el medio ambiente”.
Hualpa destacó el aporte científico para probar el caso, como el de los especialistas en imágenes satelitales y espaciales que brindaron su testimonio, especialmente Samuel Guilford. Para el querellante, quedó demostrado la ejecución de un camino y alambrado electrificado que dividió en dos a la colonia, así como el estrés causado en los pingüinos por la tarea de esa máquina, además de efectos más graves como la muerte de animales adultos y pichones.
Aseguró que el imputado tenía conocimiento de que, en el momento de hacer el camino y la colocación de los alambres, existía una actividad creciente de presencia de pingüinos en plena época de reproducción. Para Hualpa, el daño causado se produjo en un momento de alta densidad de ejemplares, quedando demostrada la crueldad de los medios utilizados. Concluyó con el pedido de que se declare culpable a La Regina, indicando que “el ambiente necesita protección porque ya no resiste más agresión”
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
Premio Herralde para dos novelas “descolocadoras” escritas por mujeres
Cynthia Rimsky, escritora chilena residente en la Argentina, ganó con “Clara y confusa”, y la catalana Xita Rupert, con “Los hechos de Key Biscayne”; ambas tendrán que repartirse los 30.000 euros que concede el prestigioso galardón
Daniel Gigena
Cynthia Rimsky y Xita Rubert, ganadoras del 42º Premio Herralde de NovelaMaría Aramburú y María Fonti/Anagrama
Como todos los primeros lunes de noviembre desde 1983, hoy se dio a conocer el fallo del 42° Premio Herralde de Novela, que ganaron ex aequo la escritora chilena residente en la Argentina Cynthia Rimsky (Santiago, 1962) y la catalana Xita Rubert (Barcelona, 1982), con Clara y confusa y Los hechos de Key Biscayne, respectivamente. Las obras premiadas llegarán a las librerías locales en diciembre; ambas autoras deberán repartirse los 30.000 euros del premio. “Al ser ex aequo, se suma al premio de 25.000 euros la dotación del finalista, de otros 5000, y la suma total se reparte entre ambas ganadoras”, explicaron desde la editorial Anagrama.
Este año, el jurado estuvo integrado por el librero Aldo García (de la librería Antonio Machado, en Madrid), el catedrático español Gonzalo Pontón Gijón, la escritora española Marta Sanz y el escritor mexicano Juan Pablo Villalobos (ambos ganadores del Herralde), y la editora española Silvia Sesé, de Anagrama, que habían seleccionado siete novelas finalistas (entre ellas, Los fieles, del escritor argentino Fernando Chulak) de un total de 1149 inéditos.
“Liviana y profunda, esquiva y sólida, hilarante y seria”, sostuvo el jurado sobre la novela de Rimsky, que calificó de “singularísima”. De Rupert, afirmó que había escrito “a la vez una novela de misterio y un libro sobre las ambivalencias del afecto y la memoria”. En 1994 también se había concedido el Herralde a dos autores: los españoles Pedro Zarraluki y Carlos Perellón.
"Estoy escribiendo en 'argenchileno'", dice Cynthia Rimsky
“Lo del premio ha sido muy gratificante porque este año se premiaron dos novelas que son más disruptivas, que se juegan más en la escritura, novelas más ‘descolocadoras’, y esto no lo digo yo sino el fallo del jurado -dice Rimsky en diálogo La noticia me llegó mientras estaba en Azcuénaga, en la provincia de Buenos Aires, y como no tenía señal telefónica me tuvieron que mandar un mail para avisarme. El Herralde es un buen premio, un premio literario, de prestigio, y estoy muy contenta”. Después de Roberto Bolaño, que lo obtuvo en 1998 con Los detectives salvajes, es la segunda escritora chilena en ganarlo (el medallero del Anagrama está copado por autores españoles).
La editorial iba a organizar un festejo, pero debido a las catastróficas inundaciones en España, con cientos de miles de damnificados, se suspendió para otra oportunidad. “No hay ánimo para fiestas”, señala Rimsky, que hará una pequeña celebración con la fotógrafa María Aramburú y Rupert.
Clara y confusa cuenta la historia de un plomero que se enamora de una artista visual poco reconocida. “La mayor parte de la historia transcurre durante la Fiesta del Pastelito, en un lugar indeterminado, cuando él empieza a dudar de que ella lo ama. Hay una mirada narrativa que equipara el mundo de los artistas visuales con el de los plomeros. Es una novela de amor y también sobre las debilidades humanas, la corrupción, entre ellas. Él es un plomero, metido en el gremio de los plomeros, que se dedica detectar ‘filtraciones fantasmas’ y ella, una artista muy aproblemada porque no tiene el reconocimiento que merece”, cuenta la autora.
“Estoy escribiendo en ‘argenchileno’, mezclando paisajes, dichos y vocabulario chileno y argentino”, agrega Rimsky que es profesora en la Universidad Nacional de las Artes y del Diplomado de Escritura de la Universidad Católica Valparaíso. Ha recibido el Premio Juegos Literarios Gabriela Mistral en 1994, el Premio Municipal de Santiago en 2001 por Poste restante, en 2017 por El futuro es un lugar extraño y en 2021 por La revolución a dedo, el Premio Mejor Obra Literaria del Consejo Nacional de la Cultura en Chile en 2017 por El futuro es un lugar extraño y el Premio a Mejor Obra Literaria del Consejo Nacional de la Cultura en 2023 por la novela Yomurí.
“A caballo entre el oficio del amor y el amor al oficio, Clara y confusa pone en pie un mundo de provincias tan extravagante como las tuberías de que se cuida su protagonista, fiel y sufrido enamorado de una artista conceptual que es una heroína de la negación, y no menos fiel integrante de un sindicato profesional plagado de conspiradores y de filósofos cínicos. Cynthia Rimsky nos condena a sonrisa perpetua en una narración ingeniosa y de una sencillez muy elaborada”, destacó Gonzalo Pontón Gijón.
Y Sanz dijo: “El arte y el enamoramiento como experiencias que sintetizan la máxima claridad y la máxima confusión. Belleza, inteligencia y humor en este libro de Cynthia Rimsky. En este libro de Ovidios y plomeros, de poesía y oficio, la crítica más elitista ensalza los festivales de pastelillos criollos. Hacía mucho tiempo que no me divertía tanto con una reflexión sobre el trágico y risible estado de la literatura. Ay y ja. Fenomenal”.
Xita Rupert ganó el Herralde con su segunda novela. “Es un honor enorme y una sorpresa también -dice Rupert a LA NACION-. Y también me alienta para continuar escribiendo en la vía de lo que hice con mi primera novela, que es retratar conjuntos de personas, a veces de una familia, a veces de un barrio, a veces de una sociedad, y ver qué hay detrás de lo que dicen sobre sí mismos”.
La autora cuenta que Los hechos de Key Biscayne comienza cuando, en una familia de padres separados, el padre recibe por primera vez la custodia de sus dos hijos. “Los niños tienen doce y catorce años, y se los lleva a una isla en el sur del Florida, cerca de Miami, y las cosas progresivamente comienzan a irse al garete”, agrega.
“Un relato prodigioso sobre violencia vicaria en los tiempos en los que aún no se sabía nombrar -dijo Sanz-. Xita Rubert lo hace con un estilo perturbador que alumbra el reverso de los padres más simpáticos, cultos y amorosos: la luz oscura que alimentaría incluso a Atticus Finch. Memoria, desubicación, los desórdenes de la pubertad, qué nombres le ponemos al amor, los límites que separan la figura del padre, del maestro, del amante, el cuerpo sexualizado de las púberes… La ambigüedad y la capacidad de sugerencia de Los hechos de Key Biscayne se transforman en un corte preciso en la piel y la conciencia de quienes leemos esta historia de vampiros”.
Para Juan Pablo Villalobos, la de Rupert es una “novela pegajosa en muchos sentidos: por el calor de una Florida poblada de personajes excéntricos, tan pronto entrañables como exasperantes; por la atmósfera húmeda en la que debe aprender a respirar la protagonista, una adolescente fascinada con su padre, un hombre estrafalario y encantador incapaz de bajar de la luna para ejercer la paternidad; por el ritmo, la mirada y el humor con los que son narrados estos hechos, pegadizos como una canción que no podemos dejar de bailar”.
Rupert estudió filosofía y literatura en Inglaterra. Su primera novela, Mis días con los Kopp, fue seleccionada entre los mejores libros del año por varios medios españoles y resultó finalista del premio Premier Roman de Chambéry. Ha recibido galardones de teatro y cuento en español y sus relatos han aparecido en medios como El País, El Cultural o Cuadernos Hispanoamericanos y en revistas en Estados Unidos y Brasil. Actualmente es investigadora doctoral y docente en la Universidad de Princeton y escribe una columna literaria en el diario La Vanguardia.
http://indecquetrabajaiii.blogspot.com.ar/. INDECQUETRABAJA
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.