RADICALES Y LOS KKK

Los radicales pidieron un “tiempo prudencial” para analizar los textos
Los senadores mantuvieron una tensa reunión con el emisario del Gobierno; presión de sus mandatarios
Gustavo Ybarra y Delfina Celichini
Durante una reunión con emisarios delaCasaRosada,elbloquedelaUCR del Senado manifestó ayer sus objeciones a la Ley Bases y el paquete fiscal y le exigió al Gobierno un “tiempo prudencial” para discutir las iniciativas de Javier Milei. Este planteo pone en riesgo la intención del oficialismo de firmar los dictámenes sin modificaciones esta misma semana.
Del encuentro, que se inició pasadas las 10 y terminó alrededor del mediodía, participaron el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, y la secretaria de Planeamiento Estratégico Normativo, María Ibarzábal Murphy, protagonistas indiscutidos de la negociación con los bloques dialoguistas de Diputados. Por el radicalismo, en tanto, no solo estuvieron los 13 integrantes del bloque, sino que también intervino la chubutense Edith Terenzi, de la bancada Cambio Federal.
Según pudo saber parte de la UCR cuestionó la premura del Gobierno en avanzar en tan solo dos semanas con el trabajo en comisiones y la sanción. “En Diputados lo discutieron por más de cinco meses, queremos tener un tiempo prudencial para analizar ambas iniciativas”, comentó a uno de los legisladores. “El Senado no va a ser una escribanía”, dictaminó.
Desde la bancada que preside el correntino Eduardo Vischi, donde conviven radicales que exhiben una gran sintonía con el Gobierno y otros que se muestran refractarios a cualquier medida libertaria, pusieron sobre la mesa los puntos de los proyectos con los que todavía tienen diferencias. De hecho, dos de los participantes confiaron a
que el encuentro con Rolandi se desarrolló en un clima bastante tenso, con reproches y críticas a las iniciativas. “No le está yendo bien”, graficó un senador. “Es una reunión nada amigable”, agregó otro.
Los patagónicos, con Chubut a la cabeza, están en contra de la restitución de la cuarta categoría de Ganancias por el fuerte impacto que tendrá en los trabajadores petroleros. También se plantearon objeciones al régimen de incentivos para grandes inversiones (RGI), principalmente respecto del alcance de la propuesta, que contempla una inversión base de US$200 millones y deja fuera de juego a las pymes.
Por último, hay resistencias en la delegación de facultades. Son varios los senadores que, por el momento y en charlas en privado, manifiestan su negativa a otorgarle tan amplios poderes al Poder Ejecutivo. Para subsanar estas atribuciones, le pidieron garantías al oficialismo de que el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, informará mensualmente al Congreso sobre el curso de la administración, tal como dicta la Constitución. Desde el desembarco libertario en la Casa Rosada, es una obligación incumplida por parte del funcionario.
Con solo siete representantes, el bloque de La Libertad Avanza (LLA) está en franca minoría y necesita del radicalismo para evitar un nuevo traspié. Si bien trabaja a la par de sus aliados de Pro, con los que suman 13 voluntades, todavía están muy lejos de los 37 que suponen la mitad más uno de los integrantes de la Cámara. Las dos bancadas kirchneristas suman 33 senadores, razón por la cual los libertarios pescan avales en un universo de 26 legisladores en el que se encuentra la UCR así como referentes del peronismo no kirchnerista o partidos provinciales. Esta mayoría circunstancial de 39 fue la que logró Victoria Villarruel en su debut como titular de la Cámara, a través de la que le arrebató a UP la hegemonía en las comisiones.
Sin embargo, los 26 senadores que podrían determinar la suerte de las iniciativas no están garantizados. Si bien un sector del radicalismo se mostró dispuesto a acompañar el paquete de herramientas del Gobierno, dentro de este espacio conviven referentes que ya han votado diferente de sus pares de bancada, como el fueguino Pablo Blanco o el porteño Martín Lousteau.
Gobernadores radicales
Al caer la noche, los gobernadores radicales se reunieron con el bloque de senadores de la UCR para discutir la postura del partido ante la Ley Bases y del proyecto de reforma fiscal. De la partida fueron Alfredo Cornejo (Mendoza), Gustavo Valdés (Corrientes), Leandro Zdero (Chaco), Carlos Sadir (Jujuy) y Maximiliano Pullaro (Santa Fe).
El encuentro fue pedido la semana pasada por el senador Maximiliano Abad (Buenos Aires), en el marco de los enfrentamientos internos que provoca en el radicalismo el alineamiento de sus gobernadores con el gobierno de Javier Milei y el rechazo de varios legisladores a las iniciativas impulsadas por la Casa Rosada, como quedó demostrado en el voto dividido en la Cámara de Diputados, la semana pasada.
De hecho, fue la primera vez que Lousteau se vio cara a cara en un ámbito institucional con Cornejo, Valdés, Zdero y Sadir desde que, el 15 de marzo, los gobernadores firmaron un comunicado para criticar el apoyo del presidente del partido al rechazo de decreto desregulador impulsado por el kirchnerismo.
El lunes último y casi con los mismos argumentos, Cornejo volvió a cuestionar a sus correligionarios enfrentados con la gestión de Milei.

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La CGT exhortó a los bloques peronistas a que “volteen” las leyes que pide el Gobierno
El paro general de mañana será el argumento para exigir en la Cámara alta la postergación del debate en las comisiones
Delfina CelichiniHéctor Daer, uno de los triunviros de la CGT, ayer, en el ingreso al Congreso
La CGT apuró ayer una reunión con referentes del bloque kirchnerista del Senado para insistir en el rechazo de la Ley Bases y el paquete fiscal. La cumbre fue en el Palacio Legislativo, en paralelo al inicio de la discusión de las iniciativas de Javier Milei en el plenario de comisiones de la Cámara alta, donde el oficialismo buscará dictaminar sin modificaciones los proyectos para llevarlos al recinto la semana próxima. La central sindical, que quiere evitar principalmente la reimposición del impuesto a las ganancias, apunta a encolumnar a los 33 legisladores de Unión por la Patria, una misión que no tiene garantizada.
“Hay compromiso del bloque de UP de voltear las dos leyes. No llega el Gobierno al 25 de mayo con la ley aprobada. Les faltan solo cuatro votos”, dijo uno de los sindicalistas que integraron la comitiva. Su intención es doblegar al Gobierno, que pretende exhibir la gesta parlamentaria en la fecha patria.
No obstante, el objetivo de la CGT se vio esmerilado ante la sospecha de que más de un senador peronista podría avalar los proyectos del Poder Ejecutivo. Por eso, activó un segundo encuentro –el primero fue hace dos semanas en la histórica sede de Azopardo– para reforzar su mensaje y disciplinar a los “díscolos” que podrían despegarse de la decisión del bloque.
La cumbre, que se extendió por poco más de una hora, apuntó también a delinear la estrategia para dilatar el debate en la Cámara alta. La adhesión de la Asociación del Personal Legislativo (APL), el gremio que conduce Norberto Di Próspero, será la excusa para postergar una semana la discusión e incomodar a la Casa Rosada.
Del encuentro participaron Carlos Acuña y Héctor Daer, representantes del triunvirato de mando, y los dirigentes Gerardo
Martínez, José Luis Lingeri y Cristian Jerónimo. Se sumaron Hugo Yasky y Hugo Godoy, referentes de las dos vertientes de la CTA.
Los sindicalistas fueron recibidos por los titulares de los bloques peronistas, José Mayans y Juliana Di Tullio, así como por los senadores Eduardo “Wado” de Pedro, Juan Manzur y Sergio Uñac.
Los gremios encendieron sus alarmas después de los guiños que algunos mandatarios provinciales hicieron a la Casa Rosada, tras los encuentros celebrados con el ministro del Interior, Guillermo Francos. Uno de ellos fue el santiagueño Gerardo Zamora, al que el funcionario nacional calificó de un gobernador “que maneja su provincia con los mismos argumentos que Javier Milei plantea para la Nación”. “La tiene ordenada, tiene déficit cero, es muy cuidadoso con sus números”, afirmó Francos.
El peso de Zamora en el Senado es considerable. Los tres senadores de su provincia –Claudia Ledesma Abdala de Zamora (esposa del mandatario), Gerardo Montenegro y José Emilio Neder–, que integran el bloque Frente Nacional y Popular, que dirige Mayans, le responden directamente.
Además del santiagueño, en el norte del país el Gobierno también mantiene vínculos con los peronistas Raúl Jalil (Catamarca) y Osvaldo Jaldo (Tucumán), que ya demostraron gestos de buena voluntad con la gestión libertaria.
El segundo, que armó un bloque propio en Diputados, dijo días atrás: “De no mediar un imprevisto, la Ley Bases se va a sancionar”.
En tanto, Jalil también mostró indicios de querer colaborar con el Gobierno, aunque solo tiene influencia sobre el senador Guillermo Andrada, ya que su compañera de bancada la exgobernadora Lucía Corpacci ya anticipó que votará en contra.ß
La CGT apunta a encolumnar a los 33 senadores de los bloques peronistas
Al Senado fueron Daer, Martínez, Lingeri, Yasky, Godoy y Jerónimo