viernes, 28 de junio de 2024

MIRADAS Y EN 1ª PERSONA


El presidente de la UIA no ve brotes verdes
Funes de Rioja dijo que apoya la aprobación de la Ley Bases y que el empresariado está ansioso
Martín Boerr
ASUNCIÓN, Paraguay.– El presidente de la Unión Industrial Argentina, Daniel Funes de Rioja, afirmó que los empresarios industriales están ansiosos, aguantando la recesión y tratando de no despedir empleados, a la espera de la “reversión” del ciclo económico. “Del lado nuestro hay ansiedad”, reconoció, al tiempo que negó que por ahora se vean “brotes verdes” o sectores que se estén recuperando.
El dirigente empresario estuvo anteayer en Asunción, en el centro de convenciones de la Conmebol, participando del XIV Foro del Sector Privado de las Américas, que se realiza como evento colateral a la 54ª asamblea general de la Organización de Estados Americanos (OEA), que empezó ayer y terminará mañana.
Funes de Rioja recibió todo tipo de consultas de sus colegas de otros países sobre el proceso político y económico que vive el país. “Hay mucha expectativa afuera”, explicó 
Otros empresarios argentinos que participaron del evento fueron Martín Eurnekian, titular de Aeropuertos Argentina y director ejecutivo de Corporación América; Mario Grinman (CAC), y Marcos Pereda (vice de la Sociedad Rural). También estuvo el ministro de la Corte Suprema de Justicia Ricardo Lorenzetti, quien al ser consultado sobre el fallo de la Cámara de Casación sobre la causa cuadernos se limitó a decir: “Lo vamos a tener que resolver nosotros”, en referencia a la Corte.
En todo momento, Funes de Rioja dejó en claro que la UIA quiere apoyar el proceso de cambio y “que se sancione la Ley Bases”, aunque “con observaciones”, sobre todo respecto de las facilidades que otorga el régimen de inversiones RIGI a los grandes proyectos para importar componentes que pueden ser fabricados en el país.
También comentó que la central fabril dialogó sobre sus objeciones con legisladores de todos los partidos y dijo que el martes recibirán en la sede de Avenida de Mayo a Juan Pazo, enviado del ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, para escuchar sus puntos de vista sobre el impacto en el sector de la Ley Bases.
“Como empresarios tenemos que tomar un rol de no interferir, sino interrelacionarnos para que entiendan que necesitamos a la industria para crecer, no solo recibir cuando ‘te tiran algo’, que está mal, sino que el beneficio sea conjunto”, explicó el directivo.
“Tenemos la vocación y la voluntad de colaborar, siendo objetivos, y cuando hay una situación dramática hay que ponerla sobre la mesa con el debido tacto para no generar pánico”, indicó. “Primero que quede en claro que la posición de la UIA es que la Ley Bases tiene que aprobarse”, sostuvo.
“Hay algunas cuestiones que hemos planteado y otras que esperamos que sean contempladas en la reglamentación o en un instrumento por separado”, explicó. La central fabril objeta que se eliminen aranceles para que en los grandes proyectos de inversión en minería o energía las empresas estén habilitadas para importar componentes que se puedan fabricar en el país, dejando a los productores locales en desventaja.
Tras la divulgación esta semana de la cifra de caída de la actividad económica en el primer trimestre y de la suba del desempleo, Funes de Rioja trató de mirar la mitad de la botella llena. “Algo positivo es que subió el empleo, pero es un análisis de cirujano”, señaló, en referencia a que es un dato muy secundario y preliminar. “Si se extiende en el tiempo será positivo”, completó.
Consultado sobre los brotes verdes, Funes dejó en claro que no los ve por ahora. “Esto es heterogéneo. Hay sectores como el energético, el minero, donde [la recesión] les ha golpeado más bien poco; hay otros que siguen sufriendo [la caída de la actividad] en rangos del 20 o 25 hasta el 40 o 50 por ciento”, dijo.

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PBI y desocupación: prehistoria y lo que está pasando hoy
Juan Carlos de Pablo
Según el Indec, ajustado por estacionalidad, el PBI real cayó 2,6% entre el cuarto trimestre de 2023 y el primero de 2024, declinando 5,1% entre los primeros trimestres del año pasado y del presente. También, según la estimación oficial, en el primer trimestre de 2024 la tasa de desocupación fue de 7,7% de la población económicamente activa, aumentando 0,8 puntos porcentuales con respecto al primer trimestre de 2023.
A días de terminar el segundo trimestre, en un país vertiginoso como la Argentina, todo esto pertenece a la “prehistoria”, pero sirve para dimensionar todos los calificativos y pronósticos apocalípticos que se lanzaron en aquel período.
¿Esta fue finalmente “la crisis económica más grande de nuestra historia”? La realidad siempre es más compleja. Ejemplo: también desestacionalizado, el PBI cayó 2,5% entre el tercer y el cuarto trimestre de 2023. De manera que se contrajo igual, cuando el anterior gobierno aplicó políticas de estímulo de la demanda, que cuando el actual equilibró las cuentas fiscales de la noche a la mañana. Si algún estudiante está buscando tema de tesis…
¿Qué sabemos de lo que ocurrió y está ocurriendo en el segundo trimestre? Como lo que interesa es averiguar cuándo pasamos de caída a recuperación, hay que concentrar la atención en las estimaciones desestacionalizadas de los últimos meses.
Pues bien, tanto las estimaciones públicas como las privadas apuntan a que abril fue mejor que marzo y que mayo fue mejor que abril. Lo cual no sorprende cuando se agotan los stocks, disminuyen los miedos, comienzan a recuperarse los salarios ajustados por la inflación pasada y reaparece el crédito. Por sobre todo, ¡porque la vida sigue! a pesar de lo que dicen los sociólogos amateurs.
¿Usted conoce empresas que todavía no experimentan la recuperación? Yo también, porque la realidad es heterogénea. Pero más que generalizar habría que preguntarles a los respectivos empresarios por qué creen que les pasa lo que se les ocurre. No sea cosa que “su microeconomía” tenga que ser revisada.
Por favor, léame bien. Mi punto es que bastantes problemas tenemos con los problemas para que en las descripciones nos dejemos llevar por el entusiasmo. No les robemos el trabajo a los futuros historiadores, pero registremos lo que verdaderamente pasó, y lo que está ocurriendo, para no ser parte del problema.
Tanto las estimaciones públicas como las privadas apuntan a que abril fue mejor que marzo y que mayo fue mejor que abril; no sorprende

http://indecquetrabajaiii.blogspot.com.ar/. INDECQUETRABAJA

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