RESPUESTAS A LA CUMBRE DE TUCUMÁN

Pacto de Mayo: Macri irá, pero la Corte toma distancia
Hay tensión con el tribunal por la postulación de Lijo

Gabriela Origlia
La convocatoria de Javier Milei en San Miguel de Tucumán para firmar el Pacto de Mayo tendrá, finalmente, al expresidente Mauricio Macri entre sus asistentes. Sin embargo, desde la Corte Suprema anunciaron que sus miembros no participarán. La relación con el máximo tribunal se tensó luego de la controvertida postulación del juez Ariel Lijo y las especulaciones del Gobierno a favor de ampliar su número de integrantes.
CÓRDOBA.– La convocatoria de Javier Milei en San Miguel de Tucumán para firmar el Pacto de Mayo tendrá finalmente al expresidente Mauricio Macri entre sus asistentes.
Sin embargo, desde la Corte Suprema anunciaron que no participarán.La respuesta judicial puede leerse como un rechazo a las jugadas para modificar el máximo tribunal que impulsa el gobierno y la controvertida postulación de Ariel Lijo.
Entre los gobernadores hay 17 asistencias y seis ausencias confirmadas. La incógnita sigue siendo el santiagueño Gerardo Zamora.
Los diputados nacionales del bloque Hacemos Coalición Federal tampoco estarán. En los últimos días hubo dudas en torno a la participación de Mauricio Macri, quien viajó a ver el torneo de tenis de Wimbledon.
La semana pasada pidió en sus redes sociales a Milei que pagara la deuda de coparticipación que mantiene con la ciudad de Buenos Aires y marcó una inédita diferenciación con el Gobierno.
“El sacrificio que están haciendo todos los argentinos requiere de un gobierno ejemplar, que cumpla la ley de la misma manera que la exige. Vamos en el camino correcto, no podemos desviarnos”, escribió Macri, y después no hubo más comentarios.
Desde su entorno primero se había asegurado que no iba a ir. Luego hubo negociaciones.
Ayer, finalmente, se confirmó su presencia. De todas formas, sus colaboradores pedían dejar un leve margen para la duda.
La interna de Pro está muy complicada. La semana pasada, la Fundación Pensar, comandada por María Eugenia Vidal, emitió un comunicado que plantea que hay “más interrogantes que certezas” en los primeros seis meses de la administración libertaria. Se dio a conocer en medio de días de tensión en los mercados.
En las últimas horas hubo algunos intercambios y líneas de diálogo entre Macri y el libertario –después de varias semanas sin contactos– y, en un gesto “institucional”, el expresidente se sumaría al acto del 9 de Julio.
Ese era el clima que imperaba anoche y que dejaba a Macri en la lista de asistentes al acto.
Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti, integrantes de la Corte Suprema de Justicia, comunicaron al área de Protocolo de la Casa Rosada que no estarán en la firma del “acta de mayo”.
El máximo tribunal mantiene una relación tensa con el Ejecutivo, que, además de promover el ingreso del controvertido juez federal Ariel Lijo en reemplazo de Elena Highton de Nolasco, y de Manuel García-Mansilla para ocupar la silla de Maqueda, que debe jubilarse en diciembre, está analizando enviar un proyecto para ampliar el número de cortesanos
El sábado, el bloque Hacemos Coalición Federal, liderado por Miguel Ángel Pichetto, adelantó que sus integrantes no asistirán a la ceremonia en Tucumán y pidió “acciones concretas” y “una relación institucional razonable”.
También el titular de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, anticipó ayer que no se sumará a la velada.
Ambos sectores sostuvieron que están abiertos al diálogo, pero entienden que el mecanismo para avanzar no pasa por “la foto”.
Las confirmaciones
De acuerdo con las confirmaciones que hay hasta el momento, Milei estaría rodeado de 17 gobernadores.
Los mandatarios provinciales que hasta ahora dijeron explícitamente que no van son el núcleo duro del peronismo opositor, encabezado por Axel Kicillof y que incluye también a Gildo Insfrán (Formosa), Sergio Ziliotto (La Pampa), Ricardo Quintela (La Rioja) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego).
La asistencia de los gobernadores es básicamente “un gesto” hacia el Presidente, pero insisten en que no se trata de la firma de una “carta en blanco” hacia adelante, ya que entienden que también debe reconducirse el vínculo con la Casa Rosada.
Las cámaras del G6 empresarial sí tendrán sus representantes; los presidentes de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja; de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Adelmo Gabbi; de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino; de la Cámara Argentina de Comercio, Mario Grinman; de la Asociación de Bancos Argentinos, Javier Bolzico, y de la Cámara de la Construcción, Gustavo Weiss, dirán presente en el acto.

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Dudas sobre el consejo que debe transformar en realidad las propuestas del Pacto de Mayo
En la Casa Rosada quieren sumar a diferentes sectores, pero hay imprecisiones sobre la forma de elección de sus integrantes y su funcionamiento

Cecilia DevannaLa Casa de Gobierno de Tucumán, ayer, preparada para la celebración
“La idea es intentarlo sinceramente y ponernos de acuerdo en cosas que funcionen para destrabar la economía”. La frase, de fuentes muy cercanas al presidente Javier Milei, se usó para definir el Consejo de Mayo, una propuesta del Gobierno que todavía aparece envuelta en imprecisiones y que buscará sentar en una misma mesa a representantes del Poder Ejecutivo, el Congreso, provincias, gremios y empresarios para avanzar en los nuevos 10 puntos del Pacto de Mayo.
El Consejo es parte del compromiso que suscribirán mañana en Tucumán quienes firmen el Acta. Según se explicó oficialmente, el Consejo será “para discutir el grande, augusto y sagrado objeto de la refundación de la patria”.
Para los invitados que aceptaron ir a la firma subsisten incógnitas por la falta de definiciones.
Para el Gobierno, el Consejo de Mayo es un “compromiso” de las partes “involucradas para la gobernabilidad del país”, con el que, aseguran, se buscará “sentar las bases para construir un país” y que esto se pueda “proyectar en el cambio”. “No puede ser que cada cuatro años cambie todo”, agregaron.
A pesar de la expectativa, en la Casa Rosada aún no hay demasiadas definiciones sobre cómo se implementará el Consejo a cargo de transformar en realidad los puntos del pacto. La mayor definición hasta ahora es que cada estamento elegirá a su representante, aunque es un misterio cómo harán para ponerse de acuerdo.
En el Gobierno se desligan de eso, aunque descuentan que no será fácil y, eventualmente, si frenan los avances, “quedarán al descubierto intereses y mezquindades”, argumentan.
Buena parte de la expectativa que hay en el Gobierno tiene que ver con el momento. “Creemos que el tiempo está de nuestro lado, porque la economía lo está”, dicen cerca del mandatario.
Tras una semana con reacción negativa de los mercados, las miradas en el Gobierno se dirigieron a la oposición. “Si ellos se quieren llevar puesto a Javier, no están viendo lo que la gente piensa de ellos y de las instituciones, y va a ser al revés: se los van a llevar puestos a ellos”, dicen en Balcarce 50.
En ese sentido, los principales cuestionamientos apuntan a Sergio Massa. Públicamente, la voz cantante sobre el tema la llevó el jefe de ministros, Guillermo Francos, que lo acusó de ser el responsable del “mantenimiento del ‘club del helicóptero’”. Es a Massa a quien ubican detrás de una semana compleja en materia económica.
En reserva
En la Casa Rosada creció durante los últimos días el malestar con Sergio Massa. “Massa atacó tres veces”, argumentan.
Primero lo asocian al aumento de las empresas de medicina prepaga, que tras el DNU del Gobierno subieron las cuotas a sus afiliados, lo que requirió la intervención oficial. La sospecha del Gobierno se apalanca en el vínculo entre Massa y empresarios del sector. Pero no se presentaron pruebas concretas de su supuesta intervención.
El segundo embate, interpretan en la Casa Rosada, fue la marcha por las universidades públicas en reclamo de la actualización de fondos. “Movió todo el músculo peronista”, sostienen sobre el exministro. Durante el conflicto con las universidades, el Gobierno apuntaba a la UCR.
“Con las prepagas apuntaron a nuestros votantes adultos; con las universidades, a los jóvenes”, describen el escenario.
El tercer golpe lo ubican esta semana, con los movimientos de los mercados. Allí apuntan a la “amistad” de Massa con un banco nacional, “una entidad cuyo crecimiento fue apalancado durante el kirchnerismo” y que fue la única que tras la reunión del Gobierno con los bancos, el último lunes, “sacó pesos a la calle”. “Se generó una suerte de inestabilidad sin causa, porque el Gobierno no cambió la concepción política y económica que tiene desde un principio”, lamentó Francos ayer en declaraciones radiales.
En el corazón libertario evalúan que esos “ataques” podrían repetirse en un futuro no muy lejano.
“Él va a seguir intentando”, apuestan, y en tren de análisis intuyen que la próxima jugada podría llegar a venir por el lado del sector energético, en el cual consideran que el excandidato tiene “muchos intereses”. No obstante esta predicción, se muestran optimistas: “Si nos bancamos este torpedo, nos bancamos cualquier cosa”, dicen sobre el cimbronazo de esta semana.
La acusación encierra contradicciones. En especial, la enorme cantidad de funcionarios que responden a Massa que continúan en sus puestos, en especial en áreas sensibles como la AFIP y la Aduana. Al ser consultados sobre esa contradicción, en Balcarce 50 responden, crípticos, que en breve podría haber novedades. “No se podía desarmar todo de modo instantáneo”, responden.
Los cambios de nombre podrían no ser los únicos, en un área que podría deparar otras sorpresas en los próximos días y semanas.

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