domingo, 25 de agosto de 2024

DESCONTENTO y COMPETENCIA...HOY...NO TE LA PIERDAS....


Quiet vacationing. El fenómeno laboral que marca el descontento de los más jóvenes
Ante la demanda constante de los empleadores, muchos deciden tomarse tiempo libre sin hacer un pedido formal a la empresa, mientras siguen conectados a través de correos o mensajes
Texto Luján Berardi | Ilustración Ariel Escalante

Las discusiones en torno al empleo son variadas: desde la cantidad de horas y días por semana que se deberían trabajar hasta la conexión constante, el estrés y su consiguiente burnout. Ahora, los jóvenes que ganan terreno en el ambiente laboral –los millennials, nacidos entre 1982 y 1998, y los “gen Z”, entre 1999 y 2009– ponen de moda una práctica para descansar en secreto llamada quiet vacationing .
El término puede traducirse como “vacaciones silenciosas”. Se trata de tomar tiempo libre de manera discreta, al emplear diversas estrategias para no hacer uso de las vacaciones ni hacer un pedido formal a los jefes, en parte debido a la valoración que estos tienen de la constante disponibilidad de sus empleados.
La tendencia se acrecentó tras la pandemia, sobre todo en el caso de quienes empezaron a trabajar cerca de la fecha de cuarentena (la “gen Z”). Sobre este fenómeno, Andrés Hatum, profesor de Management y Organización de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella, dijo: “Ese proceso, asfixiante para muchos [el encierro], para otros terminó en un proceso opuesto: la búsqueda de libertad laboral. Esto no significa dejar de trabajar, sino hacerlo con otras condiciones que, por supuesto, muchas empresas no soportan”.
Así, tras la pandemia se creó una especie de nuevo código de trabajo, con el home office a la cabeza, aunque después volvió la presencialidad. Para el especialista, el problema es la dispersión entre lo que los empleados quieren y lo que las empresas están dispuestas a hacer: “Hay compañías que usan tecnología para saber cuántas horas están [los empleados] frente al teclado. Una estupidez. Hay que cambiar el concepto del ‘delivery’ del trabajo: pasar de sumar horas en una silla a evaluar los entregables y resultados”.
Un ejemplo de quien practica el quiet vacationing es Lucía, de 23 años, que trabaja como social media y digital manager. Hace unas semanas se fue a Brasil por nueve días sin avisarles a sus jefes. “Me iba a la playa y cada dos horas, más o menos, volvía a la computadora. Tenía que hacer que trabajaba, más que nada muy temprano o a la noche”, contó.
Como no quería gastar sus vacaciones, llegó a conectarse a la red wifi de un barco para responder mensajes y correos en medio de una expedición. Su trabajo suele ser a distancia, por eso no fue difícil llevar este método a cabo: “Hubiera disfrutado más el viaje si realmente me tomaba vacaciones, sí, pero no las quería gastar, y de todas formas pude descansar de mi rutina”.
El psicoanalista Jorge Catelli planteó un análisis etimológico para abordar la problemática actual. Explicó que la palabra “trabajo” deriva del latín tripalium, un elemento de tortura parecido a un cepo y compuesto de tres palos. “Es decir que eso de que el trabajo dignifica es muy discutible, es la versión que les conviene a los núcleos de explotación en general. Lo que dignifica es el pago del trabajo, porque los esclavos también trabajaban y, sin embargo, no era una actividad digna. Ahora las nuevas generaciones se empiezan a animar a un nuevo desafío”.
También Martín se sumó a la práctica. Tiene 28 años y trabaja como diseñador gráfico. En junio pasado, viajó a Bariloche. Juntó tres días laborales con los dos del fin de semana. Y no avisó a sus empleadores que iba a estar fuera de la ciudad. “No quería que pensaran que no iba a ser productivo, así que no dije nada y me conectaba desde allá todos los días para responder consultas o contar cómo venían los distintos proyectos en los que tenía que trabajar”, detalló.
Respecto de la concepción de productividad, Hatum expuso: “Hay que borrar esa idea. La pandemia nos enseñó que pudimos trabajar a distancia sin problemas. Mi pregunta es, entonces, ¿por qué tenemos que seguir trabajando de la misma manera como lo hacíamos antes del Covid? Pareciera que no aprendimos nada. La gente asimiló esto antes que las organizaciones, que se quedaron en la prehistoria y, cual paquidermos, están pensando lentamente cómo amortizar la inversión en las oficinas corporativas que ya pocos usan”.
Algunos de los métodos más comunes para esconder que se está trabajando en medio de un descanso incluyen programar correos en horario laboral o, en los casos en donde se controlan a distancia los movimientos del mouse o monitores, mantener ambos activos con frecuencia.
Las nuevas generaciones
Los puntos a considerar respecto de la interacción entre ambos aspectos de la vida son varios. Mariela Mociulsky, CEO de Trendsity y consultora de investigación y tendencias, detalló, las concepciones del empleo que tiene cada generación.
La “gen Z” no está dispuesta a “hipotecar” su vida en el presente por un futuro mejor, porque no sabe si lo habrá. Incorporaron la frase “vamos viendo” para demostrar que nada está totalmente definido o planificado. Valoran la libertad, incluso si esto implica postergar responsabilidades, por eso eligen proyectos más pequeños que les den flexibilidad y autonomía. Los millennials se caracterizan por la adaptabilidad y también buscan la independencia y el equilibrio entre la vida personal y sus carreras.
Ambos ponen de relieve el tiempo libre, los viajes y el bienestar ante las exigencias laborales de hoy. “El balance se vuelve cada vez más complejo. Por tanto, se observa a nivel mundial el fenómeno de quiet vacationing. Se manifiesta trabajando menos, pero sin que se note, para evitar despidos, tomando vacaciones solapadas sin informarlas o asumiendo puestos de menor responsabilidad para evitar el estrés y las presiones”, explicó Mociulsky.
Catelli lo tomó, a su vez, como el “nuevo desafío” de las generaciones más jóvenes, que tiene que ver con la posibilidad de no “responder a pies juntillas” lo que se demanda de ellos en cuanto a la exigencia laboral de la historia moderna. Así, el fenómeno de las vacaciones silenciosas serían, en realidad, una ruptura cultural y simbólica intergeneracional: “Esto es una situación absolutamente disruptiva para quienes crecimos y nos criamos en lo que antiguamente llamábamos ‘cultura del trabajo’. Pero la cultura del trabajo también está marcada, sobre todo en nuestra sociedad, la argentina, por lo que fue herencia de la cultura inmigrante, que implicaba la cultura de la valoración del esfuerzo”.
También Mociulsky remarcó que hoy se está “cambiando el paradigma” del ámbito laboral: mientras que hasta hace 10 años era prácticamente inaudito tomar días libres por salud mental, hoy existe la “renuncia en silencio” o quiet quitting, que implica realizar las tareas estrictamente necesarias y no más.
Al referirse a los factores principales que impulsan a tomar vacaciones silenciosas destacó la ansiedad de solicitar días de descanso, la presión por estar siempre disponibles y el sentimiento de culpa y preocupación por la percepción de sus jefes. “Esto obedece a diversas causas y factores: no ven necesario seguir el patrón tradicional de vacaciones, sienten culpa por descansar, preocupación por impresionar a sus jefes, reciben mensajes a toda hora todos los días y esto les genera agotamiento y ansiedad”, sostuvo.
Integración
Hatum enfatizó que, además, esta actitud es un grito o pedido de liberación: “¿Equilibrio trabajo y vida? Olvidate, no se consigue. Mi generación, la X (nacidos entre 1964 y 1980) buscó ese equilibrio, no lo encontró, se perdió debajo de la alfombra corporativa. Pero las nuevas generaciones no buscan equilibrio, saben que no lo van a encontrar. Las nuevas generaciones buscan integrar el trabajo a sus vidas, para que la vida tenga sentido”.
Por otro lado, Mociulsky se refirió a otra reacción que suelen compartir los millennials respecto del trabajo: “Estas generaciones informan un incremento en los niveles de agotamiento debido a las tensiones laborales. Las redes sociales también tienen un impacto en su salud mental”. Sus principales factores de estrés son el futuro financiero, tanto diario como a mediano y largo plazo, y la salud y bienestar de sus familias.
Básicamente, la tendencia del quiet vacationing se relaciona con las nuevas prioridades: la autoconciencia y el cuidado personal, que hoy son más importantes que el éxito profesional. “Hoy, los jóvenes están dispuestos a sacrificar la estabilidad laboral en busca de una vida más equilibrada y satisfactoria”, concluyó Mociulsky.
Finalmente, Catelli también expresó que, desde el punto del psicoanálisis, el nuevo fenómeno actúa como si fuera una “vía para sortear lo que antes se consideraba una responsabilidad ejemplar y una autoexigencia dañina, porque implica estar sometidos a la demanda externa, que se acrecienta por la demanda interior y puede generar enfermedades psicosomáticas”.

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Media maratón de Buenos Aires: qué calles estarán cortadas
Ezequiel Brahim
La Media Maratón de Buenos Aires del año pasado
En la provincia de Buenos Aires, para que una localidad sea declarada por ley como una ciudad, debe tener al menos 5000 habitantes. ¿Se pueden imaginar cinco ciudades completas, todas juntas, corriendo? Eso será esta edición de la media maratón de Buenos Aires, 25.000 personas inscriptas para hacer temblar el asfalto al ritmo de sus zancadas. Un récord total. La mayor convocatoria en las casi cuatro décadas de existencia de esta carrera.
Hoy, domingo el sol saldrá puntual por el este a las 7.19 y, junto con él, 50.000 zapatillas despertarán la mañana para dar inicio a la carrera más convocante de América del Sur.
La participación ha sido prácticamente equilibrada en ambos sexos. Un 43% de mujeres será parte de la multitud que ocupará la avenida Figueroa Alcorta previo a la largada. Entre ellos habrá más de 4000 extranjeros, provenientes de una treintena de países, que le darán color internacional a la competencia. También se sumarán unos 13.500 corredores provenientes de las diferentes provincias argentinas. Un aporte no solo de diversidad, sino también de turismo deportivo a la ciudad de Buenos Aires, que preparó un circuito donde se lucen sus principales atractivos.

Cortes previstos por la media maratón

Fuente: Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires 
Saliendo desde av. Figueroa Alcorta y av. Dorrego, se dirigirán al Bajo para pasar entre El Rosedal y el Planetario. Toda la extensión de Alcorta entre av. Valentín Alsina y av. Sarmiento, estará cortada al tránsito desde las 5.00 hs. Los corredores seguirán por Alcorta hasta av. 9 de Julio donde avanzarán hacia el Obelisco. Todas las calles que irán atravesando, desde Sarmiento en adelante, se cortarán a partir de las 6.15 hs. Al llegar al Obelisco bajarán por av. Corrientes hasta av. Leandro N. Alem donde girarán para dirigirse a la Casa Rosada. La bordearán al igual que la Plaza de Mayo, para pasar frente a la Catedral y subir por diagonal norte nuevamente al Obelisco. Desde ahí retomarán por av. 9 de Julio hasta av. Belgrano donde volverán a bajar hasta diagonal sur donde enfilarán hasta el Cabildo. Luego por av. Paseo Colón irán hasta av. Independencia donde regresarán a av. 9 de Julio.

La llegada hasta el punto de partida es similar., excepto que lo harán por av. Del Libertador, pasando por el museo de Bellas Artes y recién en av. Sarmiento retomarán hacia av. Alcorta. Son 21.097 metros que completan la mitad exacta de la distancia de la maratón. Un tercio de los 25.000 corredores tiene entre los 40 y los 49 años. Los que lucharán por la punta, en una de las carreras más veloces del mundo, suelen ser un poco más jóvenes.
La más veloz de América Latina
Desde hace unos años la media maratón de Buenos Aires se ha posicionado como la más veloz de América Latina en todo concepto: desde el récord del circuito hasta la clasificación global de top 10 o top 50. Es, a su vez, una de las diez carreras más veloces del mundo. Así fue que en la edición anterior hubo cinco primeros hombres por debajo de una hora. Esto implica correr a más de 21 km/h, o menos de 3 minutos por kilómetro, de forma sostenida, durante una hora. También hubo nueve mujeres debajo de 1 hora 10 minutos, además de que se quebraron numerosos récords, que incluyeron el sudamericano femenino de Florencia Borelli.
Para esta nueva edición, además de figuras del país y de América Latina, ahora se encuentran inscriptos 19 corredores de las principales potencias del atletismo de fondo, Kenia y Etiopía. Entre ellos, cinco atletas con antecedentes debajo de una hora y, en damas, brillará una de las mejores corredoras del circuito, la keniata Ruth Chepngetich, campeona mundial 2019 en maratón.
El principal argentino sería Ignacio Erario (su registro de 1h01m58s es el segundo del historial de nuestro país, detrás del récord de Antonio Silio) y el sudamericano más destacado, el peruano René Champi, quien fijó la mejor marca de su país con 1h02m16s. Estará en juego el título nacional de la distancia, y en damas Antonella Guerrero y la olímpica Marcela Gómez, serán algunas de las candidatas. La media maratón de Buenos Aires se destaca en cantidad y calidad de corredores. Para estar a la altura de esa convocatoria, el equipo de emergencias y el plan que despliegan es de lo mejor del país.
Contarán con 14 ambulancias, ocho motos de primera respuesta con desfibriladores externos automáticos (DEA), 3 motos paramédicas con DEA, un mini bus sanitario, 6 puestos de primeros auxilios, un puesto médico avanzado, un shock room, un centro de coordinación, 70 socorristas, 20 médicos voluntarios especialistas (deportólogos, emergentólogos, cardiólogos, traumatólogos, etc.) pertenecientes al Programa de Actividad Física y Deporte de la Facultad de Medicina de la UBA, 10 voluntarios de apoyo sanitario para el área de llegada. Y a todo este equipo se le suma un enlace directo con el Centro de Monitoreo Urbano de la policía de la Ciudad. Un nuevo código QR que incluye localización GPS del lugar del incidente. 23 DEA se suman a los 14 desfibriladores manuales de las ambulancias y la coordinación directa con la guardia y unidad coronaria del Hospital Fernández y el Hospital Argerich a disposición para casos graves. Todo previsto así, a la espera de que no sean necesarios.
Los corredores de elite y los amateurs, la asociación atlética Ñandú a cargo de la organización y todo el equipo de profesionales, una multitud lista para que otra multitud corra. La carrera más convocante de América del Sur está a punto de largar

http://indecquetrabajaiii.blogspot.com.ar/. INDECQUETRABAJA

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