miércoles, 29 de abril de 2020

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Daño Colateral por COVID-19
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DAÑO COLATERAL POR COVID–19
Por Mg. Stella Maimone
Los CDC (Centers for Disease Control and Prevention EE.UU.) reportaron un aumento en el número de envenenamientos en su país. Han informado que los envenenamientos están relacionados con el inadecuado uso de los productos de limpieza, por quienes tienen temor a contagiarse de COVID–19.
Los CDC también informaron 45.550 llamadas de personas intoxicadas con productos de limpieza utilizados en altas concentraciones, de las cuales 28.158 corresponden a exposiciones relacionadas a productos de limpieza, y 17.392 a la exposición a desinfectantes.
En Argentina, los medios de comunicación han informado en varias oportunidades (y me refiero a programas de primer nivel periodístico, con profesionales matriculados), la necesidad de limpiar con clorados las verduras, los paquetes del supermercado, zapatos, patas de mascotas, etc. La gente está tan preocupada de no contraer el coronavirus que ha llegado al grado de no usar el sentido común y no piensa claramente. Los CDC comentan: “Hemos escuchado que la gente también está usando productos para desinfectar la comida, y eso es una mala idea”.
Los productos de limpieza fueron creados justamente para limpiar las superficies y no son comestibles. No sabemos si los empaques de alimentos son permeables a éstos productos.
Les cuento algo curioso, fui a una empresa que tomó la decisión de vaporizar un desinfectante en su única entrada al edificio (no se especificaba cuál era el producto y nadie me lo supo informar). Este vapor se supone que por obra de magia desinfectaba las partes del cuerpo. En dicha situación me di cuenta de que me estaban encerrando en una carpa, sin ventilación, que nadie limpia y que puede albergar tanto éste como otros virus o bacterias (además de la intoxicación con el desinfectante).
En su informe, los CDC dieron a conocer el caso de una mujer adulta que escuchó en las noticias que debía limpiar todos los alimentos comprados recientemente antes de consumirlos. Ella llenó una pileta con una mezcla de solución de cloro al 10% vinagre y agua caliente, y empapó sus productos. Con mucho sentido, un olor fuerte emanaba de los alimentos contenidos.
En nuestro país, ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos y Tecnología) a través del INAL (Instituto Nacional de Alimentos) consideró importante informar que el COVID–19 no tiene relación con los alimentos, y cita a la OPS, en su texto: “Es muy poco probable que las personas puedan contagiarse con COVID-19 por alimentos o envases de alimentos”. COVID-19 es una enfermedad respiratoria y la ruta de transmisión primaria es a través del contacto de persona a persona y a través del contacto directo con las gotas respiratorias generadas, cuando una persona infectada tose o estornuda. Hasta la fecha no hay evidencia de que los virus que causan enfermedades respiratorias se transmitan a través de alimentos o envases de alimentos.
Los coronavirus no pueden multiplicarse en los alimentos: necesitan un huésped animal o humano para multiplicarse. El virus puede propagarse directamente de persona a persona cuando un infectado por la COVID-19 tose o estornuda, produciendo gotas que alcanzan la nariz, la boca o los ojos de otra persona”.
Por otra parte ANMAT publicó en su sitio web las siguientes recomendaciones en las diferentes etapas de manipulación de un desinfectante:
En la compra: leer el rótulo del producto para saber si se ajusta a las necesidades. Constatar si en el rótulo aparecen los siguientes datos: RNE Nº (correspondiente al Registro Nacional de Establecimiento ante la ANMAT) y RNPUD Nº o T.I. Nº (correspondiente a Registro Nacional de Producto de Uso Doméstico o a Trámite Interno, según haya sido la modalidad de registro). Verificar que consten en el producto su número de lote y su fecha de vencimiento. En este sentido, advierten no comprar productos que en su rótulo contengan la leyenda “prohibida su venta libre” o “venta y uso profesional/industrial”.
Durante el uso: Sostienen que hay que respetar la dosis de uso indicada en el rótulo. Si el producto es para diluir, no preparar más de lo necesario para limpiar o desinfectar las superficies a tratar.
En la aplicación: no usar insecticidas por pulverización, en aerosol o fumígenos en presencia de personas o animale



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