lunes, 22 de abril de 2024

LAS DIETAS, UNA GRIETA ENEL SENADO Y EL PATRIMONIO DE LOS LEGISLADORES


El aumento de dietas. Engaños, traiciones y una nueva grieta que se abrió en el Senado
Surgen nuevos detalles de cómo se gestó la polémica resolución; crece el malestar interno con los senadores que se diferenciaron en público cuando habían apoyado en privado
Gustavo Ybarra José Mayans, en el centro de los conciliábulos
“Usted no tiene que decir nada porque no tiene nada que ver con esto; este es un tema nuestro, de los senadores”. Era el mediodía del último miércoles y, palabras más, palabras menos, la voz de la senadora Juliana Di Tullio (Unión por la Patria-buenos Aires) buscó calmar a Victoria Villarruel y quitarle dramatismo al paso que iba a dar el Senado. Y fue una forma de hacerse cargo de una medida que todos los presentes en la reunión de Labor Parlamentaria apoyaron y que sabían el impacto mediático que iba a tener.
Como en las mejores producciones de Hollywood, la del aumento de las dietas en el Senado se convirtió en una historia cargada de tensión y dramatismo en la que no faltan las dosis de traición y engaño propios de la hoguera de vanidades que se desató tras la polémica votación a mano alzada del último jueves.
La saga promete continuar esta semana, luego de la avalancha de notas que empezaron a llegar al despacho de la vicepresidenta de parte de senadores que quieren salvarse en medio del escándalo y piden no cobrar el aumento, y de la presentación de algunos proyectos que pretenden dar marcha atrás con la medida o modificar el reglamento del Senado para que todas las votaciones sean nominales.
El de los arrepentidos es un tema que promete romper, incluso, algunas relaciones personales entre los legisladores. Al menos eso desnuda el malestar de una senadora con una colega de otra bancada que firmó un proyecto para revocar el aumento. “Aclaró que no podía hablar por su bloque, pero estuvo de acuerdo en lo personal. En la reunión del miércoles reclamó cohesión y lealtad. ‘Que después no salgan a matarnos’, dijo”, recordó ante la nacion la legisladora, molesta con el giro de su colega.
Aunque en cercanías de la vicepresidenta insisten en que el acuerdo definitivo se alcanzó el jueves, a minutos del inicio de la sesión y con Villarruel ausente; la mayoría de las fuentes consultadas por este diario coinciden en que la decisión de aumentarse las dietas fue adoptada en la reunión del mediodía del miércoles; la misma en la que Di Tullio le dijo a la vicepresidenta que el tema era responsabilidad de los senadores.
No solo eso. Al menos uno de los presentes dijo que en el encuentro se acordó pedir el tratamiento del proyecto una vez agotados todos los temas y evitar, así, que su abordaje quedara reflejado en el plan de labor, la hoja de ruta de cada sesión. Para evitar cualquier suspicacia ulterior o pregunta incómoda acerca de por qué la iniciativa no había figurado en el acta entre los temas a pedir sobre tablas, se decidió presentarla el mismo jueves antes de la sesión.
“Todos lo sabían y casi todos estaban de acuerdo”, contó uno de los presentes el miércoles. Ese “casi” remite a Luis Juez (Córdoba), que estuvo ausente en esa reunión porque se encontraba en el Consejo de la Magistratura. “Más allá de que me gustaría saber de qué vive y de que me tiene harto que haga esto para diferenciarse y buscar prensa, él fue el único que se opuso siempre al aumento de dietas”, admitió, entre dientes, una senadora de la oposición. El cordobés y presidente del bloque de Pro fue el primero en criticar el aumento de dietas de fines de febrero, incluso antes de que lo hiciera Javier Milei y desatara la polémica que terminó con Villarruel y Martín Menem, presidente de Diputados, dejando sin efecto aquella medida.
Todos los bloques
Pero hay más datos que confirman que la decisión de ir por una actualización contó con el conocimiento de todas las bancadas, lo que hace más ominoso el silencio que siguió a la votación de la resolución. Según pudo saber este diario de, al menos, dos fuentes de bloques diferentes, el miércoles el oficialista Bruno Olivera Lucero (San Juan) dio su aval al aumento y, al día siguiente, antes de bajar al recinto, el jefe del bloque libertario, Ezequiel Atauche (Jujuy), anticipó que iba a pedir la palabra para manifestar la oposición de su bancada a la medida.
Como se sabe, entre valientes y claros brazos en alto y manos tímidas que apenas se alzaron unos segundos, se alcanzaron las dos mayorías requeridas (dos tercios para el sobre tablas y simple para el proyecto), pero nadie habló en el recinto. Eso sí, Atauche fue el primero en concurrir a la sala de periodistas para criticar la resolución.
La historia del aumento de las dietas tuvo todos los ingredientes de una serie televisiva. Como en Juego de tronos, no faltaron el engaño y la traición. Al menos eso es lo que sospecha la radical Carolina Losada, que había puesto su rúbrica en el texto que le pusieron adelante mientras almorzaba con la diputada Sabrina Ajmechet (Pro).
Como informó este diario, el proyecto comenzó a circular en el comedor del Senado el mediodía del miércoles y allí juntó sus primeras adhesiones en casi todos los bloques. Losada sostiene que puso su firma porque le dijeron que había acuerdo entre todos los bloques. Pero que cuando se enteró de que no era así, Pro no acompañó la iniciativa, y vio con detenimiento el nivel del incremento de las dietas, que saltarán de $1,7 millones a más de $4 millones, decidió no acompañar la medida, negándose a poner su sello personal y completar, sostiene, la rúbrica.
Los que trabajaron en la elaboración del proyecto acusan a Losada de haberse arrepentido cuando vio la magnitud del paso que estaba por dar la Cámara alta, lo que habría ocurrido tras retirarse del comedor y luego de escuchar las opiniones de algunos compañeros del bloque radical, y que por eso pidió sacar su firma. “A Caro la engañaron, le dijeron que había acuerdo”, avaló un compañero de bancada la versión de la senadora por Santa Fe.
Otro que también firmó fue el libertario Olivera Lucero. La rúbrica del joven senador por San Juan quedó plasmada en el proyecto presentado en la mesa de entradas. “Se equivocó, pensó que estaba acordado con todos los bloques”, lo justificaron sus compañeros de bancada. Desde el otro lado de la nueva grieta que divide al Senado desde el jueves aseguran que la bancada oficialista supo y apoyó desde el inicio la movida para aumentar las dietas, pero que, para evitar un nuevo reto presidencial, anticipó que iban a manifestarse en contra.
“La Bedia estaba chocha con el aumento”, afirmó un legislador con relación a la senadora por Jujuy y pastora evangelista Vilma Bedia, que unas semanas atrás había quedado en el centro de otro escándalo cuando se supo que había nombrado a varios familiares en su despacho, una práctica propia de la casta que tanto critica Milei. Tal vez al caso de la jujeña y a la firma de Olivera Lucero en el proyecto de aumento de las dietas se refirió un senador libertario cuando criticó, en una charla privada, la falta de cintura política de varios de sus compañeros de bloque. “Algunos viven en una fiesta de egresados”, remató

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El patrimonio de los legisladores, entre casas, campos y cuentas abultadas
Los bienes figuran en las declaraciones juradas de los senadores que el último jueves votaron duplicarse las dietas
Camila Dolabjian
Martín Lousteau explicó su apoyo al aumento de las dietas de los senadores porque, entre otros motivos, algunos de ellos no tienen profesiones por fuera de la función pública. En los pasillos de la Cámara alta, algunos alegaron que no llegaban a fin de mes. Tal vez sea el caso para un puñado de ellos, pero no de la mayoría –particularmente los que impulsaron la resolución que elevó su salario neto a $4,3 millones–, en función de un análisis que hizo la nacion entre las 72 declaraciones juradas de los representantes de las provincias.
Los documentos fueron presentados en vísperas de la elección general del año pasado, luego de que se oficializaran las listas de candidatos. Reflejan el cierre del período de 2022, por lo que algunos números deben ser actualizados estimativamente por inflación. Una primera conclusión es que hay una notoria subdeclaración del valor de las propiedades inmuebles y muebles, con cifras que parecen irrisorias.
Es el caso, por ejemplo, del tucumano Juan Manzur, quien tenía un 60,68% de participación en la empresa Agro Aceitunera SA por un valor de $22.396.243,58. Llama la atención la cifra, siendo que es la principal compañía olivícola de la Argentina, con marcas como Nucete y Caucete.
El patrimonio promedio de los senadores fue de $63.878.601 a fines de 2022. Considerando una inflación acumulada a marzo de 396%, significa unos $252.320.474 por legislador. La media de la cantidad de vehículos asciende a 1,5, y aunque cuatro de ellos reportan no tener un auto a su nombre, sus patrimonios dejan intuir que no utilizan el transporte público. Un caso es el de la senadora Juliana Di Tullio, que refiere no ser titular de ningún auto, pero tenía tres casas y un plazo fijo de US$75.223,04 en ese entonces.
El promedio de posesión de propiedades entre los senadores es de cinco. Curiosamente, ese el número de senadores que aseguran no tener inmuebles a su nombre.
Juan Carlos Romero es el senador salteño, del bloque Cambio Federal, que introdujo la resolución de aumento de las dietas al recinto para que fuera tratada sobre tablas. Es también el senador con mayor patrimonio de la Cámara alta. A fines de 2022, reportó bienes y posesiones por $444.076.234,13, ubicándose en el primer puesto. Refirió, además, tener un departamento de 596 metros cuadrados en CABA, una casa de 354 metros cuadrados en Salta y el 50% de una vivienda de 4417 metros cuadrados en Punta del Este, Uruguay, valuada en $203.504.000.
Lousteau, senador por la ciudad de Buenos Aires, representando a la UCR, declaró tener US$781.348,54, de los cuales solamente US$33.597,12 se encontraban en el país. El resto están en una caja de ahorro en Estados Unidos. Además, refirió tener 15 inversiones por cerca de $16millones en plazos fijos, acciones de YPF, BYMA, Banco Galicia, Banco Supervielle y Pampa Energía, entre otras. El senador tiene dos departamentos, una casa, una cochera y un terreno de 1200 metros cuadrados en Entre Ríos a su nombre.
En términos de propiedades, Carlos Espínola, de Unidad Federal, es el que mayor cantidad de inmuebles reporta. Declaró ser propietario del 33,33% de 36, al tiempo que 32 de ellas son terrenos de entre 303 y 506 metros cuadrados en Corrientes, adquiridos con ingresos propios en 2015. Lo llamativo es que una gran parte de ellos valdrían, según su declaración jurada, apenas $17.487. Sin embargo, la senadora con más cantidad de tierras a su nombre es Edith Elizabeth Terenzi, de Cambio Federal. Heredó una parte de un campo de 13.887 hectáreas en Las Plumas, Chubut.
El más rico es el salteño Romero; tiene una casa en Punta del Este
Lousteau declaró una nutrida cuenta en dólares en los Estados Unidos
Alta gama
Tres senadores empatan en la mayor cantidad de vehículos, con cuatro de ellos bajo su titularidad. Se trata de Enrique Goerling, de Pro, que tiene una BMW, una camioneta Ford, una Santana y un barco; Bartolomé Abdala, de La Libertad Avanza, que declaró una Mercedes-benz GLK3000, una BMW, una Hilux y un cuatriciclo Yamaha. Y Flavio Fama, el senador que levantó la mano en señal de afirmación luego de cerrada la votación, que aseguró tener dos vehículos Toyota, una Geely y una moto.
De los 72 senadores, dos presentaron una declaración jurada vacía (sin rellenar los casilleros) y no fueron contabilizados en los promedios. Se trata de Antonio José Rodas, del Frente Nacional y Popular, y Vilma Vedia, de La Libertad Avanza. Por otra parte, directamente no fueron cargados los documentos de Mónica Esther Silva (Juntos Somos Río Negro), José Carambia (Santa Cruz), Natalia Gadano (Santa Cruz), Fernando Salino (Unidad Ciudadana) y Edgardo Kueider (Unidad Federal).
Las declaraciones de Nora del Valle Giménez y María Celeste Giménez Navarro, ambas de Unidad Ciudadana, no pudieron ser halladas, aunque el error puede deberse a que el sistema no permite poner en el buscador las tildes de sus apellidos y las senadoras podrían haberlas cargado con estas.

http://indecquetrabajaiii.blogspot.com.ar/. INDECQUETRABAJA

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