Aumentarán las jubilaciones por decreto y en mayo van a equiparar la inflación
El mes próximo tendrán una suba acorde al índice de precios, más un porcentaje adicional de entre el 12% y el 15%; a partir de mayo se actualizarían por el IPC; la decisión llegó luego de los pedidos de la oposición
Maia Jastreblansky
De Koning presidió ayer la Comisión de Previsión
En medio de la presión del Congreso, que está avanzando con el debate de una nueva ley de movilidad previsional para compensar la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados, el Gobierno avanza para promulgar por decreto de necesidad y urgencia (DNU) una nueva fórmula de actualización de las jubilaciones.
Según pudo saber el Poder Ejecutivo trabaja para determinar por decreto que las jubilaciones en abril se actualicen por el Índice de Precios al Consumidor (IPC) mensual más una compensación que estaría entre el 12 y el 15% por la inflación de enero. Hecho este empalme, a partir de mayo, el Gobierno pretende que las jubilaciones se actualicen por el IPC mensual.
De esta manera, la Casa Rosada quiere adelantarse a la discusión que pretende dar la oposición en el Congreso. En un principio, la gestión de Javier Milei pretendía que la nueva fórmula jubilatoria se tratara como un capítulo dentro de la nueva “Ley de bases”. De acuerdo con los tiempos que quiere manejar la Casa Rosada, ese proyecto se trataría en Diputados recién a mediados o fines de abril.
Si bien la nueva ley ómnibus viene cosechando consensos en buena parte de su contenido, tanto el bloque Pro como el radicalismo y Hacemos Coalición Federal –los bloques más amigables para el oficialismo– le plantearon al Gobierno que era imperioso cambiar cuanto antes la fórmula previsional, luego de la fuerte pérdida del poder adquisitivo que tuvieron los haberes jubilatorios en los primeros dos meses del año.
Alta presión
La presión que hay en el Congreso por este tema es tal que en las últimas horas, tal como contó, los diputados opositores de la Comisión de Previsión y Seguridad Social se decidieron a impulsar una ley de movilidad jubilatoria por su cuenta.
Ante la falta de acuerdos por este tema, el Poder Ejecutivo busca anticiparse y avanzar por decreto con la fórmula que diseñó el equipo del ministro de Economía, Luis Caputo. La utilización de este instrumento jurídico fue una alternativa que se debatió mucho en el seno del Gobierno en los últimos días, porque la primera intención era que este tema tuviera fuerza de ley. Pero finalmente primó la idea de avanzar de forma unilateral, sin llevarlo al Congreso.
“Nos urge el tiempo por una cuestión de empalme. Es cierto que los jubilados están siendo perjudicados con la fórmula de Alberto Fernández y si se vota a fines de abril el empalme se muda al segundo trimestre del año”, dijo a una alta fuente de la Casa Rosada. Y aclaró que el Gobierno no se puede “estirar más” con la compensación por la inflación que hubo en el verano.
En el borrador de la nueva “Ley de bases”, el Gobierno había propuesto una fórmula jubilatoria que indexe por inflación a partir de abril con una compensación adicional del 10% por la inflación de enero.
Los bloques dialoguistas de Diputados exigían una compensación mayor, que contemple enteramente lo que los jubilados y pensionados perdieron por la inflación del primer mes del año, que fue de 20,6%.
La Casa Rosada no quería ceder terreno con esos números, que cuida celosamente Caputo por el peso que tienen las jubilaciones en la ecuación fiscal. Finalmente, según trascendió, la compensación estaría “unos puntos más arriba” que el 10% de la propuesta original.
El Gobierno pretende que la nueva “Ley de bases” se comience a tratar en la Cámara de Diputados recién a mediados de abril y con “los acuerdos cerrados” de antemano. A diferencia de enero, Milei pretende llegar al Congreso con un proyecto nuevo de unos 200 artículos y con un “poroteo” sólido con los bloques amigables y con los gobernadores.
La idea es separar la suba de la “Ley de bases” que impulsará el Gobierno
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En abril se cobrará el mismo bono que en marzo: $70.000
Los haberes de los jubilados perdieron un 18% de su poder de compra en el último trimestre
En medio de la presión del Congreso, que está avanzando con el debate de una nueva ley de movilidad previsional para compensar la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados, el Gobierno avanza para promulgar por decreto de necesidad y urgencia (DNU) una nueva fórmula de actualización de las jubilaciones.
Según pudo saber el Poder Ejecutivo trabaja para determinar por decreto que las jubilaciones en abril se actualicen por el Índice de Precios al Consumidor (IPC) mensual más una compensación que estaría entre el 12 y el 15% por la inflación de enero. Hecho este empalme, a partir de mayo, el Gobierno pretende que las jubilaciones se actualicen por el IPC mensual.
De esta manera, la Casa Rosada quiere adelantarse a la discusión que pretende dar la oposición en el Congreso. En un principio, la gestión de Javier Milei pretendía que la nueva fórmula jubilatoria se tratara como un capítulo dentro de la nueva “Ley de bases”. De acuerdo con los tiempos que quiere manejar la Casa Rosada, ese proyecto se trataría en Diputados recién a mediados o fines de abril.
Si bien la nueva ley ómnibus viene cosechando consensos en buena parte de su contenido, tanto el bloque Pro como el radicalismo y Hacemos Coalición Federal –los bloques más amigables para el oficialismo– le plantearon al Gobierno que era imperioso cambiar cuanto antes la fórmula previsional, luego de la fuerte pérdida del poder adquisitivo que tuvieron los haberes jubilatorios en los primeros dos meses del año.
Alta presión
La presión que hay en el Congreso por este tema es tal que en las últimas horas, tal como contó, los diputados opositores de la Comisión de Previsión y Seguridad Social se decidieron a impulsar una ley de movilidad jubilatoria por su cuenta.
Ante la falta de acuerdos por este tema, el Poder Ejecutivo busca anticiparse y avanzar por decreto con la fórmula que diseñó el equipo del ministro de Economía, Luis Caputo. La utilización de este instrumento jurídico fue una alternativa que se debatió mucho en el seno del Gobierno en los últimos días, porque la primera intención era que este tema tuviera fuerza de ley. Pero finalmente primó la idea de avanzar de forma unilateral, sin llevarlo al Congreso.
“Nos urge el tiempo por una cuestión de empalme. Es cierto que los jubilados están siendo perjudicados con la fórmula de Alberto Fernández y si se vota a fines de abril el empalme se muda al segundo trimestre del año”, dijo a una alta fuente de la Casa Rosada. Y aclaró que el Gobierno no se puede “estirar más” con la compensación por la inflación que hubo en el verano.
En el borrador de la nueva “Ley de bases”, el Gobierno había propuesto una fórmula jubilatoria que indexe por inflación a partir de abril con una compensación adicional del 10% por la inflación de enero.
Los bloques dialoguistas de Diputados exigían una compensación mayor, que contemple enteramente lo que los jubilados y pensionados perdieron por la inflación del primer mes del año, que fue de 20,6%.
La Casa Rosada no quería ceder terreno con esos números, que cuida celosamente Caputo por el peso que tienen las jubilaciones en la ecuación fiscal. Finalmente, según trascendió, la compensación estaría “unos puntos más arriba” que el 10% de la propuesta original.
El Gobierno pretende que la nueva “Ley de bases” se comience a tratar en la Cámara de Diputados recién a mediados de abril y con “los acuerdos cerrados” de antemano. A diferencia de enero, Milei pretende llegar al Congreso con un proyecto nuevo de unos 200 artículos y con un “poroteo” sólido con los bloques amigables y con los gobernadores.
La idea es separar la suba de la “Ley de bases” que impulsará el Gobierno
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En abril se cobrará el mismo bono que en marzo: $70.000
Los haberes de los jubilados perdieron un 18% de su poder de compra en el último trimestre
Silvia Stang
El mismo día en que se conoció que se modificará por decreto la manera en que se reajustan las jubilaciones, el gobierno de Javier Milei publicó en el Boletín Oficial el decreto 268, que establece que los jubilados y pensionados que cobran el haber mínimo, de $134.445,30 desde este mes, y también los beneficiarios de prestaciones no contributivas con un ingreso de hasta la cifra mencionada, percibirán en abril un bono de $70.000. Se trata de la misma cifra que cobraron en marzo.
Así, mientras se debate el sistema de actualizaciones, se previó que la cifra correspondiente a la “ayuda económica previsional” sería igual a la cobrada este mes.
Ello, pese a la alta inflación, que en febrero fue de 13,2% y que para marzo sería de un porcentaje similar, según las estimaciones de varios economistas reflejadas en el Relevamiento de Expectativas de Mercado del Banco Central.
Así, de no disponerse otras medidas, en el cuarto mes del año se profundizaría la pérdida de poder adquisitivo para jubilados y pensionados, cobren o no cobren refuerzo. Con los cambios que se aprobarán ahora, no se conoce qué ocurrirá con el decreto del bono.
Mientras que el decreto del bono se publicó oficialmente en la medianoche, ayer fuentes de la Casa Rosada indicaron que finalmente un DNU determinará que las jubilaciones se actualizarán en abril según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de febrero, y que se agregará una compensación por la inflación pasada, que estaría entre el 12 y el 14%. Y desde mayo las jubilaciones se actualizarán por el IPC mensual; ese mes, por ejemplo, se aplicaría la inflación de marzo.
Según la ley 27.609, vigente desde 2021, en abril no correspondería un reajuste por movilidad. Con los haberes de este mes se aplicó, dado el resultado que arrojó la fórmula, un incremento de 27,18%, un porcentaje ubicado muy por debajo de la suba de los precios de bienes y servicios en general. Para el actual trimestre, las proyecciones indican que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registraría un avance de 55,6%, con lo cual la caída de la capacidad de compra sería superior al 18% tan solo en un trimestre. A partir de la confirmación de que habrá un DNU para cambiar desde abril la modalidad de las actualizaciones, no se sabe qué ocurrirá con la política de bonos, que ya lleva 18 meses.
intentó obtener información, pero no hubo respuesta de fuentes oficiales. El decreto oficializado ayer mismo hace referencia a los haberes de abril como si en ese mes siguiera vigente la ley actual; de hecho, menciona expresamente los montos de ingresos vigentes. Pero el DNU modificaría esas cifras, si se confirma que el reajuste por inflación será ya desde el mes próximo. De hecho, el haber bruto mínimo pasaría a una cifra de alrededor de $170.000.
Este mes (y también en abril), quienes cobran solo un haber mínimo reciben un ingreso, sumado el bono, de $204.445,30 en bruto, y de $200.412 en mano. El adicional de $70.000 no tiene descuentos, mientras que sobre el haber propiamente dicho se detrae un 3% para financiar al PAMI. De acuerdo con lo establecido, los jubilados con un ingreso mensual superior al mínimo, pero solo de hasta $204.445,30 (cifra que equivale a la prestación mínima más el bono) reciben un adicional de un monto tal que se complete esa cifra. Por ejemplo, con un ingreso de $180.500, la ayuda es de $23.945,30, y con un haber bruto de $200.000, el plus es de $4445,3. Eso ocurrió este mes y, según la normativa oficializada hoy, iba a ocurrir en abril.
La “ayuda económica previsional” (tal como la denomina el Gobierno) se paga exactamente con las mismas condiciones que las establecidas para los refuerzos que fueron abonados en los últimos meses por la gestión actual y por la anterior. Los pagos dispuestos para quienes tienen un haber que supere al mínimo en un monto no mayor al del refuerzo solo tienen el objetivo de que con un ingreso mayor en términos brutos no se termine percibiendo, en mano, un importe menor que el recibido por quienes tienen el ingreso básico del sistema.
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La oposición pedirá una compensación mayor
Quiere igualar el 20,6% de inflación de enero
El mismo día en que se conoció que se modificará por decreto la manera en que se reajustan las jubilaciones, el gobierno de Javier Milei publicó en el Boletín Oficial el decreto 268, que establece que los jubilados y pensionados que cobran el haber mínimo, de $134.445,30 desde este mes, y también los beneficiarios de prestaciones no contributivas con un ingreso de hasta la cifra mencionada, percibirán en abril un bono de $70.000. Se trata de la misma cifra que cobraron en marzo.
Así, mientras se debate el sistema de actualizaciones, se previó que la cifra correspondiente a la “ayuda económica previsional” sería igual a la cobrada este mes.
Ello, pese a la alta inflación, que en febrero fue de 13,2% y que para marzo sería de un porcentaje similar, según las estimaciones de varios economistas reflejadas en el Relevamiento de Expectativas de Mercado del Banco Central.
Así, de no disponerse otras medidas, en el cuarto mes del año se profundizaría la pérdida de poder adquisitivo para jubilados y pensionados, cobren o no cobren refuerzo. Con los cambios que se aprobarán ahora, no se conoce qué ocurrirá con el decreto del bono.
Mientras que el decreto del bono se publicó oficialmente en la medianoche, ayer fuentes de la Casa Rosada indicaron que finalmente un DNU determinará que las jubilaciones se actualizarán en abril según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de febrero, y que se agregará una compensación por la inflación pasada, que estaría entre el 12 y el 14%. Y desde mayo las jubilaciones se actualizarán por el IPC mensual; ese mes, por ejemplo, se aplicaría la inflación de marzo.
Según la ley 27.609, vigente desde 2021, en abril no correspondería un reajuste por movilidad. Con los haberes de este mes se aplicó, dado el resultado que arrojó la fórmula, un incremento de 27,18%, un porcentaje ubicado muy por debajo de la suba de los precios de bienes y servicios en general. Para el actual trimestre, las proyecciones indican que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registraría un avance de 55,6%, con lo cual la caída de la capacidad de compra sería superior al 18% tan solo en un trimestre. A partir de la confirmación de que habrá un DNU para cambiar desde abril la modalidad de las actualizaciones, no se sabe qué ocurrirá con la política de bonos, que ya lleva 18 meses.
intentó obtener información, pero no hubo respuesta de fuentes oficiales. El decreto oficializado ayer mismo hace referencia a los haberes de abril como si en ese mes siguiera vigente la ley actual; de hecho, menciona expresamente los montos de ingresos vigentes. Pero el DNU modificaría esas cifras, si se confirma que el reajuste por inflación será ya desde el mes próximo. De hecho, el haber bruto mínimo pasaría a una cifra de alrededor de $170.000.
Este mes (y también en abril), quienes cobran solo un haber mínimo reciben un ingreso, sumado el bono, de $204.445,30 en bruto, y de $200.412 en mano. El adicional de $70.000 no tiene descuentos, mientras que sobre el haber propiamente dicho se detrae un 3% para financiar al PAMI. De acuerdo con lo establecido, los jubilados con un ingreso mensual superior al mínimo, pero solo de hasta $204.445,30 (cifra que equivale a la prestación mínima más el bono) reciben un adicional de un monto tal que se complete esa cifra. Por ejemplo, con un ingreso de $180.500, la ayuda es de $23.945,30, y con un haber bruto de $200.000, el plus es de $4445,3. Eso ocurrió este mes y, según la normativa oficializada hoy, iba a ocurrir en abril.
La “ayuda económica previsional” (tal como la denomina el Gobierno) se paga exactamente con las mismas condiciones que las establecidas para los refuerzos que fueron abonados en los últimos meses por la gestión actual y por la anterior. Los pagos dispuestos para quienes tienen un haber que supere al mínimo en un monto no mayor al del refuerzo solo tienen el objetivo de que con un ingreso mayor en términos brutos no se termine percibiendo, en mano, un importe menor que el recibido por quienes tienen el ingreso básico del sistema.
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La oposición pedirá una compensación mayor
Quiere igualar el 20,6% de inflación de enero
Laura Serra
Precavidos, los diputados de la oposición dialoguista quieren esperar a conocer el detalle del decreto de necesidad y urgencia (DNU) con el que el Gobierno actualizará los haberes jubilatorios a partir de abril. Por lo pronto, anoche señalaban que la decisión de cambiar la fórmula de movilidad –que hoy combina la variación salarial con la recaudación de la Anses– es un avance, ya que frenaría la licuación que viene afectando a los ingresos de los jubilados y pensionados.
En la oposición creen que la compensación del 12 al 14% que estudia el Gobierno por la inflación de enero no es suficiente, ya que el índice de precios al consumidor de ese primer mes del año trepó al 20,6%. De hecho, los proyectos presentados apuntan a una compensación completa.
En la Comisión de Previsión y Seguridad Social de la Cámara baja, los bloques de la oposición iniciaron ayer al mediodía el debate de esos proyectos, en abierto desafío al Gobierno. Presionado, por la tarde el Poder Ejecutivo se adelantó con el anuncio del DNU.
“Evidentemente la presión que ejercimos alertando sobre la situación desesperada que atraviesan los jubilados y pensionados tuvo sus frutos”, celebró el diputado Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica. “El Gobierno ya no pudo hacerse el distraído. Este DNU es un avance porque cambia la fórmula de actualización de los haberes; ahora pelearemos desde la Comisión de Previsión por la compensación que falta”, sostuvo.
Desde el bloque de la UCR, Alejandro Cacace también consideró un avance el DNU, aunque indicó que en la Comisión de Previsión continuarán discutiendo la compensación que les corresponde a las jubilados por la inflación de enero. No descartó, por caso, que se avance en una ley que ratifique el decreto y se incorpore un artículo que contemple la compensación faltante.
Con el radicalismo como punta de lanza, ayer la oposición había fijado como plazo para un dictamen la tercera semana de abril. “Debemos dar una respuesta urgente porque la sociedad lo está exigiendo y los jubilados y pensionados así lo necesitan”, justificó la presidenta de la comisión, la radical Gabriela Brouwer de Koenig.
Los libertarios presentes en la comisión no reaccionaron frente a la avanzada opositora. A los pocos minutos se retiraron. Ni siquiera los diputados de Pro, sus aliados, pudieron justificar la actitud del presidente de la Comisión de Presupuesto, el flamante libertario José Luis Espert, quien, en línea con la estrategia de Economía de demorar la nueva norma, decidió no convocar a su comisión para discutir este tema de manera conjunta con la de Previsión. Al no hacerlo, retrasaba su tratamiento en el recinto.
Los opositores fustigaron a Espert. “A este ritmo recién en junio tendríamos aprobada la nueva fórmula”, advirtió el diputado Sergio Palazzo, de Unión por la Patria, quien no se privó de chicanear al oficialismo. “Dice que la casta tiene que trabajar: nosotros estamos aquí, Espert no, quizás ahora forma parte de la casta o estará muy ocupado en los canales de televisión proponiendo rebeliones fiscales”, ironizó. El anuncio del Gobierno convirtió en letra muerta los tiempos que proponía Espert
Precavidos, los diputados de la oposición dialoguista quieren esperar a conocer el detalle del decreto de necesidad y urgencia (DNU) con el que el Gobierno actualizará los haberes jubilatorios a partir de abril. Por lo pronto, anoche señalaban que la decisión de cambiar la fórmula de movilidad –que hoy combina la variación salarial con la recaudación de la Anses– es un avance, ya que frenaría la licuación que viene afectando a los ingresos de los jubilados y pensionados.
En la oposición creen que la compensación del 12 al 14% que estudia el Gobierno por la inflación de enero no es suficiente, ya que el índice de precios al consumidor de ese primer mes del año trepó al 20,6%. De hecho, los proyectos presentados apuntan a una compensación completa.
En la Comisión de Previsión y Seguridad Social de la Cámara baja, los bloques de la oposición iniciaron ayer al mediodía el debate de esos proyectos, en abierto desafío al Gobierno. Presionado, por la tarde el Poder Ejecutivo se adelantó con el anuncio del DNU.
“Evidentemente la presión que ejercimos alertando sobre la situación desesperada que atraviesan los jubilados y pensionados tuvo sus frutos”, celebró el diputado Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica. “El Gobierno ya no pudo hacerse el distraído. Este DNU es un avance porque cambia la fórmula de actualización de los haberes; ahora pelearemos desde la Comisión de Previsión por la compensación que falta”, sostuvo.
Desde el bloque de la UCR, Alejandro Cacace también consideró un avance el DNU, aunque indicó que en la Comisión de Previsión continuarán discutiendo la compensación que les corresponde a las jubilados por la inflación de enero. No descartó, por caso, que se avance en una ley que ratifique el decreto y se incorpore un artículo que contemple la compensación faltante.
Con el radicalismo como punta de lanza, ayer la oposición había fijado como plazo para un dictamen la tercera semana de abril. “Debemos dar una respuesta urgente porque la sociedad lo está exigiendo y los jubilados y pensionados así lo necesitan”, justificó la presidenta de la comisión, la radical Gabriela Brouwer de Koenig.
Los libertarios presentes en la comisión no reaccionaron frente a la avanzada opositora. A los pocos minutos se retiraron. Ni siquiera los diputados de Pro, sus aliados, pudieron justificar la actitud del presidente de la Comisión de Presupuesto, el flamante libertario José Luis Espert, quien, en línea con la estrategia de Economía de demorar la nueva norma, decidió no convocar a su comisión para discutir este tema de manera conjunta con la de Previsión. Al no hacerlo, retrasaba su tratamiento en el recinto.
Los opositores fustigaron a Espert. “A este ritmo recién en junio tendríamos aprobada la nueva fórmula”, advirtió el diputado Sergio Palazzo, de Unión por la Patria, quien no se privó de chicanear al oficialismo. “Dice que la casta tiene que trabajar: nosotros estamos aquí, Espert no, quizás ahora forma parte de la casta o estará muy ocupado en los canales de televisión proponiendo rebeliones fiscales”, ironizó. El anuncio del Gobierno convirtió en letra muerta los tiempos que proponía Espert
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