domingo, 30 de abril de 2023

MERCADO, DÓLAR Y EMBATE




El Gobierno cerró abril con otra pérdida de reservas y una suba de $76 en el blue
Ayer, resignó US$67 millones, en la tercera jornada consecutiva de saldo negativo; el dólar informal aumentó otros $2, con un alza de casi 20% en solo 28 días
Melisa Reinhold
Pese a que todavía está vigente la tercera versión del dólar soja, que aportó ingresos por algo más de US$1620 millones en las tres semanas de abril en las que rigió, el Banco Central no logra recomprar reservas y se agrava el drenaje.
Quedó a la vista ayer, al cerrar con un déficit que rondó los US$67 millones por sus intervenciones sobre el mercado y marcar así la primera seguidilla de tres saldos negativos tras las ventas por US$49 millones y US$79 millones del miércoles y jueves, respectivamente.
Aunque el balance de intervenciones en el mes terminó favorable en unos US$33 millones, eso no oculta que se trata del peor registro para abril en tiempos del cepo, excluyendo el año de la cuarentena.
En tanto, en la última rueda de abril, el dólar blue se vendió a $469, con un avance de $2 frente al cierre previo. A lo largo del mes, sufrió un fuerte salto de $76 o un alza de 19,3% en solo 28 días.
Los dólares libres se despertaron en abril. Luego de dos meses de relativa calma cambiaria en la Argentina, el deterioro de la economía local terminó impactando en las principales cotizaciones de la divisa. La inflación se aceleró y encontró piso arriba del 7%, la falta de dólares sigue siendo una constante para el Banco Central (BCRA) pese a la entrada en vigencia del dólar agro, y las tensiones políticas se hicieron más presentes de cara a la carrera presidencial. Todo ese conjunto de factores hizo saltar los tipos de cambios paralelos más de un 10%.
En la última rueda de abril, el dólar blue se vendió a $469. Se trató un avance de $2 frente al cierre previo y acumuló un retroceso de $26 en las últimas dos ruedas (-5,5%), tras haber marcado un máximo nominal de $495 el martes pasado.
Sin embargo, a lo largo del mes, reflejó un avance de $76 o un alza de 19,3% en sólo 28 días. “Fue otra semana de turbulencia cambiaria, como no ocurría hace mucho tiempo. Sorprendió lo repentino de este acontecimiento, pero estuvo fundamentado por acontecimientos de la macroeconomía. A eso, se le sumó una falta de reacción de la gestión económica”, observó Fernando Marull, economista de FMYA. Recién el martes, tras diez ruedas consecutivas de alzas, el Ministerio de Economía anunció que tomaría medidas para frenar la corrida.
Mientras tanto, los tipos de cambio financieros registraron algunas bajas. Estas cotizaciones surgen de la compra-venta de bonos y otros activos financieros, donde el Gobierno venía desde el martes realizando intervenciones para detener la corrida cambiaria de las últimas dos semanas. Al momento, los analistas del mercado estiman que se destinaron a esta maniobra US$116 millones de las reservas netas.
Ayer, el dólar MEP cotizó a $436,05, un retroceso diario de $6,18 (-1,4%). En tanto, el dólar contado con liquidación (CCL) se negoció a $453,16, unos $4 menos (-0,9%). Aún así, finalizaron abril con alzas de $38,68 (9,7%) y $46,62 (11,5%), respectivamente.
“Estas nuevas intervenciones supondría la utilización de las escasas reservas del Banco Central, las cuales el Fondo Monetario Internacional (FMI) había prohibido expresamente utilizarlas para intervenir sobre los dólares financieros. Por lo que, sin dudas, será uno de los temas que se pondrán sobre la mesa en la próxima reunión que se llevará adelante con el organismo para rediscutir el programa”, señalaron desde Invertir en Bolsa.
El tipo de cambio oficial mayorista se vendió a $222,68, una suba diaria de $0,68 (+0,3%). Sin sorpresas, ya que esta cotización se mueve a cuentagotas por los controles y las restricciones a la demanda que mantiene vigente el Central, avanzó $13,67 a lo largo del mes (+6,5%). Esta cifra se encontraría por debajo de la inflación de abril, aunque, según observaron los economistas, en las últimas ruedas se aceleró el ritmo de devaluaciones diarias. “En la segunda mitad de abril aceleró el ritmo de devaluación del tipo de cambio oficial al 8% mensual”, señaló Martín Polo, de Cohen Investment.
Las acciones ganadoras
Las acciones argentinas atravesaron un mes de números en verde, lo que, para los analistas, podría significar el inicio del trade electoral. El S&P Merval operó en las 297.960 unidades, una suba diaria de apenas 0,4%. No obstante, en el mes, terminó un 21,3% arriba (+8,8% al ajustar por el dólar CCL)
En la Bolsa porteña, se destacaron en el mes las acciones de Transportadora de Gas del Norte (+40,2%), Ternium (+38,9%) y Aluar (37%). “Estas compañías demostraron fortaleza a pesar del ruido político y económico, ganándole a la suba del dólar CCL”, dijo Maximiliano Donzelli, de IOL invertironline.
En cambio, los bonos globales del último canje de deuda operaron en terreno negativo en todas las legislaciones y curvas de vencimiento. En el mes, el rojo acumulado llegó a ser de hasta un 20,7% (AL30D). En consecuencia, el riesgo país trepó 380 unidades en el último mes (+16,7%). Ayer cerró estable en los 2656 puntos básicos.

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&

El BCRA perdió reservas por tercer día seguido y terminó la semana con un déficit de US$49 millones
El mes finalizó con un exiguo saldo positivo de US$33 millones, el peor registro para abril en tiempos del cepo, excluyendo el año de la cuarentena
Javier Blanco
Los costosos esfuerzos que hizo el Gobierno desde el pasado martes para reducir en 15 puntos una brecha cambiaria que se encaminaba a marcar nuevos máximos no le sirvieron al Banco Central (BCRA) para volver a recomprar reservas, aun cuando está vigente la tercera versión del Programa de Incentivo Exportador (PIE), que aportó ingresos por algo más de US$1620 millones en las tres semanas del mes en las que rigió.
Esto quedó a la vista ayer, al cerrar con un saldo deficitario que rondó los US$67 millones por sus intervenciones sobre el mercado.
Es un resultado que determinó el primer balance en rojo para estas operaciones al cabo de una semana con dólar diferencial para atraer oferta (fue negativo en unos US$49 millones) y marcó además la primera seguidilla de tres saldos negativos, tras las ventas por US$49 millones y US$79 millones del miércoles y jueves, respectivamente.
Aunque desde el BCRA destacan que el balance de intervenciones en el mes terminó favorable en unos US$33 millones, eso no oculta que se trata del peor registro para un mes de abril en tiempos “normales” de cepo (solo hubo un saldo negativo algo superior a los US$500 millones en igual mes de 2020 en medio de las restricciones a la actividad que se dispusieron por la pandemia) y que el acumulado anual muestra un quebranto que vuelve a rozar los US$3100 millones. Son datos que preocupan a la conducción económica, dado que no desconoce que si el saldo de intervenciones no vuelve a mostrar en breve resultados positivos, muy posiblemente los fondos invertidos para tratar de administrar los precios libres de los dólares financieros (MEP o Bolsa y CCL) serán en vano.
Aunque el nivel de actividad del mercado se dinamiza en las últimas ruedas de cada mes, el objetivo oficial era cerrar abril con una captación de al menos US$400 o US$500 millones, por razones obvias.
Por lo pronto, el BCRA debió ceder en esta racha vendedora -que arrancó el miércoles- unos US$195 millones (ayer se operaron de contado US$448 millones), pese a que el dólar soja en ese lapso atrajo liquidaciones por US$191 millones.
“En las cinco ruedas de la semana las liquidaciones por dólar soja 3.0 sumaron casi US$360 millones, mientras que desde su inicio (13 ruedas en total) se liquidaron US$1621 millones, 11% menos que en el mismo lapso del dólar soja 2.0 (Us $1824 millones) y bien por debajo de lo sUS $5010 millones del dólar soja 1.0”, destacó el economista de Ecolatina Santiago Manoukian.
Las cifras muestran que el BCRA no logra equilibrar el mercado oficial pese a haber dispuesto a mitad de mes nuevas restricciones para pagos de fletes, deuda intraempresas e importaciones de servicios profesionales, sumado al beneficio de un tipo de cambio diferencial y 36% más alto que el que les paga al resto de los exportadores locales para sorgo, girasol y cebada, aunque con cupos.
Y aunque elevó en el mes del 6% al 6,54% la devaluación oficial del dólar mayorista (llega al 25,7% en el año) –que cerró a la venta a $222,68 por unidad tras avanzar $0,68 en la rueda del día y “$4,15 en la semana–, fue la corrección nominal semanal más alta desde agosto 2019”, hizo notar Gustavo Quintana, de PR Cambios.
Mientras tanto, además se confirma que las reservas sumaron en el último mes a sus drenajes “naturales” una nueva fuente de “fuga” por el impacto que el sostenido retiro de depósitos en dólares privados de los bancos tiene sobre los encajes que representan un 28% de su tenencia bruta total. Esto es porque esas salidas se dinamizaron entre fines de la semana pasada y comienzos de esta, llegando a ser de US$121 millones el pasado martes (ultimo dato disponible).
Así, la ola de retiros desde el 20 de marzo ya les quitó a los bancos unos US$875 millones, cifra que supone el 5,2% del stock que manejaban hasta entonces. “El acumulado en las últimas 5 jornadas fue el más alto desde diciembre 2021. Y la salida en esta ola es la tercera más alta en toda la gestión Fernández”, apuntó Salvador Vitelli, de Romano Group. Esa merma implicó una baja en los encajes que forman parte de las reservas de US$534 millones.

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&

Presionan a las empresas con multas y exigencias de la AFIP
Piden datos impositivos y aplican sanciones desde el área de Comercio
Francisco Jueguen Cristina Kirchner cuestionó anteayer a las empresas en su “clase magistral” en La Plata
En medio de la crisis con el dólar y del temor por el traslado a precios, el Gobierno aumentó ayer la presión sobre las empresas tras el discurso de Cristina Kirchner, en el que apuntó contra el sector privado. La AFIP reclamó información sobre los operadores de bolsa, mientras que Comercio multó a grandes empresas por la fijación de precios.
El dólar libre voló. En solo dos semanas subió casi $70. Cerca de cerrar abril, en el mercado descuentan una inflación de entre 7,2% y 9% en el mes. En la Fundación Libertad y Progreso estuvieron entre los “optimistas”. Estimaron ese piso. Si esa marca se materializara sería el mayor registro para un cuarto mes desde 2002, un año de crisis extrema.
Cristina Kirchner entiende lo que eso significa en un año de elecciones. También Sergio Massa,elministrode Economía que se había animado a vaticinar que este mes comenzaría con un tres adelante. La caza de brujas para calmar al electorado propio acaba de comenzar. “Massa nos pidió que apretemos juntos a los empresarios para que retrotraigan los precios”, anticipó Emilio Pérsico, secretario de Economía Social del Ministerio de Desarrollo Social, un día después de visitar el Palacio de Hacienda. En su “clase magistral”, la vicepresidenta desplegó un listado con varias empresas importantes y las acusó de las remarcaciones de precios.
La presión sobre el sector privado se materializó en las últimas horas. La AFIP pidió que las sociedades de bolsa informen el volumen de dólar contado con liquidación (CCL) operado entre el 1º de marzo y el 21 de abril. El encargado de recabar esa información es el cristinista Sebastián Negri, a cargo de la Comisión Nacional de Valores (CNV). Además, por lo bajo, la Secretaría de Comercio que conduce Matías Tombolini dejó trascender que, a través de la Subsecretaría de Acciones para la Defensa de los Consumidores, multó a Coca cola y Danone porque –indicaron– vendían determinados productos a comercios de cercanía con aumentos superiores al acordado en Precios Justos. Habrían mostrado, dijeron las fuentes oficiales, hasta un incremento de 32,8% mensual.
En la Secretaría de Comercio afirmaron que realizaron “operativos” de fiscalización, solicitaron facturas de compras de múltiples proveedores para “verificar si los precios de venta de esas empresas respetaban los aumentos de precios estipulados”. Luego de “comprobar” que las empresas aplicaban aumentos por fuera de la pauta del 3,2% acordada, se multó a Coca Cola con $40 millones y a Danone, con $45 millones. La notificación había llegado a una de esas firmas, pero aún no a la otra.
En esas empresas dicen que la multa no tiene fundamento legal, ya que el contrato de Precios Justos es para grandes superficies. Las empresas, para hacer frente a sus costos, suelen hacer “rentabilidad cruzada”. En los almacenes y pequeños establecimientos las cosas cuestan más caras que en los supermercados grandes. “Hasta abril, nuestros costos se movieron al 6% y el sendero oficial va al 3,2%. ¿Quién pone la diferencia? El objetivo de esta movida es disciplinar”, cuestionaron en una firma y agregaron que el 32,8% denunciado por Comercio está “inflado”. Algunos proveedores, contaron, les están pidiendo a las empresas “dolarizar” los pagos. O sea, si se paga a 90, que sea en pesos al valor del dólar en tres meses.
En Comercio afirmaron además que están “en proceso de investigación” Cervecería y maltería Quilmes, Aguas de Origen, Molinos Río de la Plata, Pepsico Argentina, Arcor y Mas tell o ne. son prácticamente todas las que estaban en el listado que Cristina Kirchner mostró públicamente. “Ahí tenemos las principales veinte empresas, esas veinte empresas que figuran ahí, porque hay que empezar a hablar con nombre y apellido, Unilever, Mastellone, Coca Cola, Sancor, Da non e, molinos, porque sino parece que los precios los remarcaran Cristina,nicolás …[ portrot ta] no, no. estas veinte empresas hacen el 74% de la facturación de lo que vos comprás en la góndola. Bueno, atomizado, lo que se dice atomizado, el mercado no estaría”, afirmó la vicepresidenta en su “clase magistral” de La Plata.
En el Ministerio de Economía, Massa cultivó buena sintonía con el sector privado, pero esta semana, la corrida cambiaria modificó su actitud. “Hay que tomar las medidas que hay que tomar”, arengó el ministro a su equipo, según contó Luego dijo que no le fueran con el “versito de la mirada market friendly, porque acá hay cuatro vivos que quieren hacerse ricos por la volatilidad política y la que se jode es la gente”.
Según contaron en el Palacio de Hacienda, la idea del ministro de Economía es trabajar ahora en “retrotraer los precios” que se remarcaron en medio de la corrida en el marco de un acuerdo con sindicatos y empresas por 90 días. Parece un homenaje a Antonio Aracre, que le propuso un congelamiento por el doble de tiempo al Presidente.
“No tiene ningún argumento el blue en los precios”, estimaron allí, pese a que el CCL y el MEP también subieron y mucho. “Hoy, los financieros volvieron a bajar. Y el blue también lo va a hacer por arbitraje”, confiaron cerca del ministro.
“No creo que Massa se haya expresado en esos términos”, dijo el presidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), Mario Grinman cuando escuchó las palabras de Pérsico. “Conoce muy bien al sector empresario y sabe que la Argentina necesita más empresas que creen fuentes de trabajo. Con esas adjetivaciones de los aprietes y de buscar culpables, no se llega a ningún lado”, agregó el directivo.
En la semana, la poderosa Asociación Empresaria Argentina (AEA) a través de su presidente, Jaime Campos, había pedido “respetar al máximo el ámbito privado de las empresas”, una sentencia que tiene detrás una crítica directa a los controles de precios. Pero en las empresas no solo critican los controles. Por ejemplo, las aerolíneas y agencias –que son agentes de percepción y recaudación del Impuesto Pais, entre otros– se volvieron a quejar en estos días porque terminan pagando impuestos sobre impuestos por débitos y créditos, y suman un extracosto de operaciones con los procesadores de tarjetas. Todo eso va al valor de los pasajes: desde 2019, la carga impositiva al sector se duplicó.
“La inflación promedio mensual se ubicó en torno al 8,1%, acelerando 1,3 puntos respecto a la semana anterior”, estimó LCG sobre la última semana de abril y el precio de los alimentos. Si solo se mira, el punta a punta (que tuvo un avance de 9,5%), se trata de la semana con aumentos más altos desde hace un año.
No son solo los empresarios. Para Cristina Kirchner, el acuerdo con el FMI también genera inflación, lo que a su vez, dijo la vice, no tiene nada que ver con el déficit fiscal. Habrá que ver si el FMI, para evitar una devaluación brusca y poder adelantarle fondos, no le pide a Massa un ajuste mayor. El ministro encarará esas negociaciones desde el jueves en Washington. El lunes se charlará con el Fondo vía Zoom, contaron. Mientras ya aceleraron la devaluación del oficial y subieron la tasa. Ortodoxia, pese a la mirada de Cristina.
Esta semana, Massa desobedeció el compromiso de no intervenir en el mercado cambiario. Quienes conocen la negociación con el Fondo dicen que esa prohibición no estaba en el acuerdo firmado por Martín Guzmán, sino que la incluyó la actual conducción en el punto 26 del memorándum de políticas económicas y financieras de la última revisión, la de marzo de 2023.
“Hoy es más importante generar incentivos para que el campo liquide los granos y aumentar la recaudación que replantear el acuerdo con el Fondo”,recomendó vía twitter el ex asesor presidencial,Antonio Aracre,con una velada crítica al lento avance del dólar soja a $300. Es que ya genera nerviosismo en el mercado al mirar la brecha cambiaria tras la corrida y ante el desierto del segundo semestre

http://indecquetrabajaiii.blogspot.com.ar/. INDECQUETRABAJA

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.