jueves, 31 de agosto de 2023

TURISMO CON INCERTIDUMBRE


Verano en la costa: precios dolarizados y muchas dudas
Por la inflación, la mayoría evita por ahora cerrar operaciones; expectativa por un nuevo Previaje
Darío PalavecinoEn Cariló ya se reservan chalets en dólares por una quincena en enero próximo
MAR DEL PLATA.– “Hay que ser Mandrake”, dice el empresario hotelero cuando se lo consulta sobre cómo transcurrirán estos meses previos a la temporada y la necesaria alquimia que implicará determinar un valor conveniente para la variedad de alojamientos y servicios de verano en medio de la maquinaria inflacionaria que se acelera a medida que avanza el año.
A tres meses del punto de partida de la temporada que es el inicio de diciembre y a seis semanas del próximo fin de semana largo, los operadores están hundidos en un océano de incertidumbre frente a las primeras consultas y pedidos de reserva. “No hay precio”, reconocen en su gran mayoría.
Los costos están en alza constante y prima el temor a quedarse cortos. Citan algunos, consultados  el agregado reciente de una suma de $60.000 a los trabajadores que no estaba en los planes hasta anteayer.
Una prueba es intentar alquilar una carpa o sombrilla en los balnearios. Es un producto en el que predomina el cliente marplatense, que suele hacerlo por la temporada completa. Hace semanas que los concesionarios esquivan cerrar operaciones.
La habitual preventa de estos servicios, que se lanza al final de temporada, cambió en marzo pasado. El pago previo, con hasta entre seis y diez meses, se acortó a no más de tres cuotas. Por entonces, según la zona, se ofrecían carpas en Punta Mogotes y al sur del faro por entre $350.000 y $700.000, por la temporada. A esta fecha, esos valores se estarían casi duplicando.
Algo distinto se vive en el denominado circuito premium, donde la dolarización hace tiempo que llegó para quedarse. El segmento ABC 1 les escapa a los pesos y tanto anuncios como contratos se cierran en moneda estadounidense.
Lo volvió a poner en escena el intendente de Pinamar, Martín Yeza. “Nadie normal en este momento de la Argentina cerraría un acuerdo en pesos y que te vayan pagando a diciembre con un congelamiento del precio”.
Esto se vive en Cariló, uno de los preferidos de los bolsillos más holgados. Ya se reservan los generosos chalets que se ofrecen de US$2000 a más de US$30.000 la quincena en enero próximo. “Tenemos un nivel de reservas para el próximo verano en similares niveles que a la misma fecha del año pasado”, confirma la titular de la inmobiliaria Constructora del Bosque, Silvia Melgarejo. Ratifica que el portafolio de su inmobiliaria se maneja en dólares y que la sugerencia a los dueños ha sido mantener los valores de la última temporada. “Algunos prefirieron aumentar hasta un 10%, pero no mucho más”, explicó.
Es un panorama que se replica en unos pocos destinos de la zona que conviven con la exclusividad. Ocurre, por ejemplo, con Costa Esmeralda, muy cerca, pero ya en Partido de la Costa; algunos puntos selectos de Villa Gesell, y en buena parte de la oferta de Pinamar.
“Hasta las elecciones nos juegan muy mal con la fecha”, reconoce Jesús O sorno, presidente de la Asociación Empresaria Hotel era de Mar del Plata, que vive con preocupación estos tiempos en los que señala que es difícil proyectar el negocio ante “tanta incertidumbre”.
Admite que hay consultas, algunas por el fin de semana largo de octubre, otras para la temporada. “Es muy difícil establecer un precio a futuro porque las variables cambian mucho en muy pocos días”, dijo a sobre esta  preocupación que tiene el sector, una de, al menos, dos importantes que inquietan al sector a la fecha. ¿La otra? El Previaje 5. El Gobierno solo lo insinuó. Lo esperan con ansias, pero hay temor a que haya sido un artificio electoral. Recién esta semana el Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de Mar del Plata comenzó a hablar sobre el habitual anuncio de valores de alquileres de temporada. Esa referencia habitual, que suele llegar sobre fines de septiembre, todavía no tiene fecha. Esta vez les tocará hacer el anuncio con un acumulado de inflación de más de 120% en los últimos 12 meses.
Es un destino, además, que por la variedad de perfiles de visitantes, sobre todo muy popular, vive con incomodidad cualquier blanqueo de una oferta en moneda extranjera. “Si dolarizamos nos matan, no somos Punta del Este”, confió un hombre con muchos años en el ramo. Aunque reconoce que los valores de las habitaciones y de departamentos viajarán hacia fin de año al ritmo del dólar blue.
En pesos aparecen muy pocas propuestas en sitios web; son los primeros indicios. Por una quincena de enero en un departamento con un dormitorio y camas para una pareja y dos niños hay ofertas de poco más de $800.000 a casi tres millones de pesos, según el edificio y la zona que se elija, cerca o frente a la costa.

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