CRISIS EDUCATIVA....LEGADO KKK

Las tomas de escuelas le cuestan a la Ciudad $6 millones diarios
Hasta anoche eran siete los colegios secundarios afectados; polémica por un instructivo
Ayer, estudiantes del Lengüitas mantenían la ocupación del edificio
Mientras crece la tensión con los estudiantes secundarios porteños que mantienen tomados siete colegios públicos, la Ciudad cuantificó ayer el costo laboral diario de cada uno de esos establecimientos, que se pierde al no poder abrirlos. En total son más de $6 millones y se los reclamarán a los padres o adultos responsables de los adolescentes que participan de las protestas.
Ayer se conoció una especie de instructivo o manual de ocupación de escuelas, que el Ministerio de Educación de la Ciudad adjudica al kirchnerismo porteño. Los estudiantes que participan de la medida de fuerza niegan vínculos políticos y dicen que fue redactado y votado por ellos mismos en asambleas para organizar la protesta.
El Ministerio de Educación de la Ciudad confirmó ayer que son ocho los colegios secundarios públicos que permanecen tomados y anunció que reclamará que los adultos responsables de los estudiantes –padres o tutores– paguen el costo diario de tener cerrada cada institución. La cifra total de ese reclamo asciende a $6.106.965,65, ya que cada una tiene un valor distinto.
En solidaridad con el reclamo de los estudiantes secundarios porteños, hoy los alumnos de la Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini, dependiente de la Universidad Nacional de Buenos Aires, también ocuparán sus instalaciones. Ayer, en sendas asambleas, los tres turnos votaron en favor de acompañar la medida.
En un comunicado oficial, la Ciudad informó que el costo laboral por día que implica tener cerrada, con valores de septiembre, la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas N° 2 Mariano Acosta, en Urquiza 277, es de $1.503.006,55. Aunque los alumnos decidieron ayer levantar la medida de protesta, la Ciudad buscará el resarcimiento económico por la vía legal de jornada de anteayer en las que no se dio clases.
Además, indicó el costo por día de las otras siete escuelas que están ocupadas: $1.309.718,96, las escuelas Normal Superior en Lenguas Vivas Sofía E. Broquen de Spangenberg –“Lengüitas”, en Juncal 3251–; $820.410,56, la Superior de Educación Artística en Arte Cerámico Nº1 –Bulnes 45–; $374.206,17, la Media Nº1 Federico García Lorca –Chorroarín 305–; $876.608,45, el Colegio Nº 3 Mariano Moreno –Rivadavia 3577–; $554.251,75, el Liceo Nº 5 Pascual Guaglianone –Carabobo 286–; $291.178,16 la de Educación Media Nº3 Osvaldo Pugliese –Padilla 1051–; $377.585,05, y la Media Nº 7 María Claudia Falcone –Malabia 2164–.
Pero además de estas escuelas tomadas, varias más están en conflicto. Según dijeron a la nacion los alumnos que forman parte de la ocupación del Lengüitas, en las escuelas Luis Pasteur –Navarro 4344–, Julio Cortázar –Bogotá 2759–, Normal Nº 8 –La Rioja 1042– y en el Instituto de Enseñanza Superior en Lenguas Vivas Juan Ramón Fernández –Carlos Pellegrini 1515–, grupos de estudiantes pernoctan en las instituciones, una instancia que, explican, es “anterior a la toma”.
Escuela Mariano Acosta en Balvanera había sido la primera en iniciar la medida de protesta. “Decidimos levantar la medida a las 7 para que los otros niveles puedan tener clases”, indicaron desde el centro de estudiantes. Como no fueron atendidos sus reclamos, dijeron, seguirán en estado de asamblea.
Educación de la Ciudad denunció ayer que este año, antes de la toma, estudiantes que asisten al Mariano Acosta habían vandalizado los baños con pintadas y leyendas. “Es una obra que hicimos en 2020, invertimos en la escuela porque los baños estaban destrozados por vandalismo, entonces se puso todo a nuevo y hoy [por ayer] los baños están nuevamente destrozados y vandalizados”, confirmó Soledad Acuña a LN+.
“Hoy los estudiantes están reclamando que arreglemos los baños que ellos mismos destruyen. En un año de presencialidad los baños están destrozados nuevamente. Por eso estamos diciendo que hay que empezar a poner límites y decir basta. No da todo lo mismo. Las acciones tienen consecuencias; como adultos –como madres y como padres– tenemos que empezar a marcar que la convivencia supone llegar hasta un punto donde empiezan los derechos del otro. Los impuestos de los porteños son los que financian las escuelas, los que hacen estos baños una y otra vez y que los propios chicos destruyen en el caso del Mariano Acosta”, sostuvo Acuña.
“Para pensar un proyecto de futuro hay que entender que tenemos una sociedad donde todos tenemos que convivir, donde hay derechos, pero también hay responsabilidades y obligaciones”, concluyó Acuña.
En el Lengüitas, ayer la jornada se percibió más radical que anteayer. Aparecieron carteles con las consignas “lxs alumnxs no somos mano de obra gratuita” y no a las ACAP [actividades de aproximación al mundo del trabajo y a los estudios superiores], ya que aquí el reclamo principal es por la mala organización en la implementación de las prácticas profesionalizantes que impulsó el gobierno de la ciudad.
“Genera un montón de indignación el tema. En principio estaba bueno, pero fuimos a un hotel a hacer la práctica y nos pusieron a lavar platos porque no nos esperaban. Nadie sabía quiénes éramos, había una redesorganización. Pensaban que éramos alumnos de la UADE [en alusión a una universidad privada]. Y encima lo que terminó siendo no era lo prometido”, argumentó Constanza De Carlo, alumna de 5º año.
Otro estudiante, Félix Kepel, agregó: “No me parece que esté mal que nos hagan hacer prácticas, pero que seas del bilingüe y te digan que vas a ir a hablar inglés a un hotel, pero termines lavando platos y juntando las mesas del desayuno, no era el plan original. Nos tratan como conejillos de Indias”. Según los estudiantes, ayer por la tarde iban a debatir entre ellos cómo seguir con la medida de fuerza iniciada anteayer.
Denuncia a los padres
Las tomas se dan tras los dichos de Acuña, en los que responsabilizó al kirchnerismo y a la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) por la acción de los jóvenes. “Los alumnos y las alumnas están siendo fogoneados a tomar estas medidas violentas”, había advertido.
Anteanoche, el ministerio confirmó que la Ciudad, a través de la
Procuración General, había denunciado a ocho adultos que consintieron la participación de sus hijos en la toma del Mariano Acosta.
La presentación judicial fue radicada en el fuero penal contravencional por infringir el artículo 58 del Código Contravencional porteño, que sanciona a quien ingrese o permanezca en un lugar público contra la voluntad del titular del derecho de admisión.
Acuña denunció la circulación de un manual [ver aparte] en el que, dijo, aparecen los discursos que los estudiantes repiten y las instrucciones sobre cómo tomar una escuela: “Estos manuales están siendo repartidos por el kirchnerismo a través de su sindicato UTE, y de distintos legisladores del Frente de Todos de la Legislatura porteña. Son ellos quienes están incitando a los chicos a tomar estas medidas violentas”.
En un comunicado, diputados del Frente de Todos de la ciudad de Buenos Aires negaron ayer que el kirchnerismo esté detrás de la movida: “Queremos desmentir estas afirmaciones absurdas. No existen dichos manuales ni ninguna acción de este bloque tendiente a ‘fogonear’ las tomas, tal como ella acusa”.
Y agregaron: “Queremos dejar en claro que consideramos muy beneficioso que las comunidades educativas se organicen: existen leyes que promueven la creación de centros de estudiantes y las autoridades educativas deben velar por el cumplimiento efectivo de la normativa y garantizar sus derechos”.
“Lamentablemente –añadieron–, en las últimas horas la ministra [Acuña] se ha encargado de denostar la participación estudiantil y sus órganos de representación, como también lo hizo numerosas veces con los órganos de representación de lxs trabajadorxs [sic]. Amenaza a padres y madres con acciones legales inconducentes y estigmatiza a les estudiantes, lo que alimenta expresiones de violencia contra elles en las redes sociales”.
Isabela Espátola, alumna del Mariano Acosta y coordinadora de turno de la toma, dijo anteayer que la medida tuvo como objetivo visibilizar cuatro reclamos: “Por un lado, el tema de las viandas, que no nos llegan en cantidad ni en calidad porque somos alrededor de 850 personas en el colegio y nos llegan solo 120, que son una vergüenza. El sándwich de jamón y queso es cada vez más chico y, a veces, ni quisiera trae jamón. Para muchos estudiantes esa vianda significa la comida que van a ingerir durante la jornada y nosotres [sic] entendemos que, con hambre, no se puede estudiar. Por otro lado, el tema de las reformas inconsultas. [Horacio Rodríguez] Larreta y Acuña planean proyectos por atrás sin consultar con la comunidad educativa y así es como hoy en día tenemos que ir a hacer pasantías a empresas privadas para terminar la secundaria o los docentes tienen que capacitarse los fines de semana. Por eso, en tercer lugar, queremos que el modelo educativo incluya a toda la comunidad educativa. Y por último, que termine la persecución política en los centros de estudiantes”

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