miércoles, 3 de enero de 2024

CLAVES AMERICANAS, INTELIGENCIA ARTIFICIAL, RECAUDACIÓN POR LAS RETENCIONES


Trump usó el lenguaje nazi
Andrés Oppenheimer
¿ Dónde está la indignación de los funcionarios electos republicanos por la afirmación racista del precandidato de su partido, Donald Trump, de que los inmigrantes de América Latina, África y Asia “están envenenando la sangre” de Estados Unidos? ¿Cómo se puede explicar su silencio ante semejante insulto?
Tal vez ignoren el hecho de que las palabras de Trump son casi iguales al lenguaje usado contra los judíos y otras minorías étnicas en la Alemania nazi. O tal vez no sepan que, a pesar de que Trump diga ahora que nunca leyó a Adolf Hitler, es muy difícil que no haya sabido que estaba usando términos hitlerianos. Trump había usado palabras semejantes en septiembre, y le habían llovido las críticas de los principales grupos de derechos civiles del país.
Los medios habían señalado que sus palabras parecían sacadas de Mein Kampf, el libro de Hitler donde afirmaba que los grupos étnicos minoritarios estaban envenenando la sangre de la raza aria. Nuevamente, Trump está apelando al racismo para energizar a los supremacistas blancos dentro de su base y, además, conseguir aparecer gratis en televisión.
Los inmigrantes indocumentados “están envenenando la sangre de nuestro país. Eso es lo que han hecho”, dijo Trump en su mitin de campaña el 16 de diciembre en Nueva Hampshire. “No solo en Sudamérica. No solo en los tres o cuatro países en los que pensamos. Están llegando a nuestro país de todas partes del mundo: de África, de Asia, de todo el mundo”. La campaña del presidente Joe Biden reaccionó diciendo que Trump había “repetido como un loro a Adolf Hitler” en su discurso.
La Liga Antidifamación (ADL) dijo en un comunicado que “envete nenar la sangre de nuestro país” son palabras usadas por los supremacistas blancos y los antisemitas. “Hemos visto este tipo de retórica tóxica inspirar violencia en el mundo”, agregó la ADL.
Además de parafrasear un eslogan nazi, Trump está volviendo a difundir –como ya lo había hecho en su campaña presidencial de 2016– la falsedad de que hay una “invasión” sin precedentes de inmigrantes. Fox News y otros medios de derecha están promoviendo alegremente esta leyenda porque las noticias alarmistas llaman la atención y aumentan los ratings. El problema es que el mito de una desastrosa “invasión” de extranjeros es solo eso, un mito.
En primer lugar, el número de inmigrantes como porcentaje de la población estadounidense no es un récord histórico. De hecho, el porcentaje actual está por debajo de lo que era en las décadas de 1890 y 1910, según el Pew Research Center. EE.UU. siempre ha sido un país de inmigrantes, y lo sigue siendo. En segundo lugar, contrariamena las afirmaciones engañosas de Trump, los indocumentados no están inundando EE.UU. con fentanilo, la droga más mortífera del momento. La mayor parte del fentanilo contrabandeado a EE.UU. está siendo traída por ciudadanos estadounidenses a través de puertos de entrada legales, según datos oficiales. En 2021, más del 86% de los narcotraficantes condenados por fentanilo eran estadounidenses, 10 veces más que el número de inmigrantes indocumentados condenados por tales delitos.
En tercer lugar, no es cierto que los inmigrantes indocumentados cometan más delitos que los ciudadanos estadounidenses. Por el contrario, la mayoría de los indocumentados quieren mantener un perfil bajo. Varios estudios muestran que el porcentaje de indocumentados arrestados es menor que el de ciudadanos estadounidenses. En cuarto lugar, no es cierto que la mayoría de los inmigrantes indocumentados les quitan empleos a los estadounidenses ni que no paguen impuestos. La tasa de desempleo de EE.UU. es del 3,7%, casi un mínimo histórico, y la mayoría de los inmigrantes indocumentados realizan trabajos que los estadounidenses no quieren hacer.
Lo que me trae de regreso a la pregunta de por qué los funcionarios electos de origen hispano, como el senador Marco Rubio, el senador Ted Cruz, los congresistas María Elvira Salazar y Mario Díaz-Balart, no tienen las agallas para criticar los insultos racistas de Trump. Ni siquiera han mencionado el hecho de que las madres de cuatro de los cinco hijos de Trump son inmigrantes. Todo esto no es un asunto trivial, como algunos quieren hacernos creer. Trump está normalizando el lenguaje racista, y una vez que se normaliza el lenguaje racista contra un grupo, se normaliza el comportamiento racista contra todos.

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&

La mediocridad conceptual
María Marta Preziosa Doctora en Filosofía por la Universidad de Navarra. Investigadora, FCE, Universidad Católica Argentina

La revista Time publicó hace unos días un ensayo titulado “AI and the Rise of Mediocrity” (https://time.com/6337835/ ai-mediocrity-essay/), que pone contra las cuerdas la creatividad de la inteligencia artificial (IA). Su autor es Ray Nayler, un novelista de ficción especulativa y profesor visitante de la George Washington University. Su tesis es que la IA es generativa, sí, pero de la disminución de nuestra capacidad para discernir la calidad y la originalidad. ¿Por qué? Porque, a pesar de su sofisticación, la IA todavía es un lenguaje alimentado por internet y su esencia es solo predecir. Y, por si esto fuera poco, el knock-out final de Nayler: la IA vomita lo común y corriente.
En la literatura hay quien suele decir que no existe la originalidad, o quien se anima a decir que Jorge Luis Borges “robaba” mucho. No lo sé. Pero sin dudas los textos de Borges no fueron predecibles; y eso es, justamente, lo que caracteriza el trabajo creativo según Nayler. Por eso, profetiza que la IA llenará el mundo de textos mediocres, aceptables, funcionales, pero desabridos.
Aunque probablemente estas afirmaciones no sean válidas para todos los órdenes del saber o las artes y las técnicas, estoy con Nayler. En mi experiencia con textos académicos he podido observar que la IA menciona conceptos, pero no los usa. ¿Cómo es eso? Por ejemplo, si digo: “Sócrates” tiene ocho letras, no estoy refiriéndome al filósofo que vivió en la Antigüedad, sino a un objeto lingüístico; estoy mencionando su nombre y por eso va entre comillas. En cambio, si digo: “Sócrates fue condenado a muerte”, uso su nombre y me refiero a un hecho histórico. Cuando el ChatGPT escribe un texto académico lo hace mencionando conceptos, no los usa. Por eso es repetitivo, aunque ordenado; insípido, aunque gramaticalmente correcto. No explica, no muestra ninguna realidad extralingüística, no hay intertexto; solo un lenguaje sordo y ciego que no denota ni connota
Volviendo a la tesis de Nayler, podríamos decir que es aristoté“es lica, aunque él no lo diga. Es decir, valora la IA en función de las cualidades que genera en quienes la usan. Y ahí es donde escribe mi párrafo preferido: “Usar estas herramientas para escribir una historia o hacer una imagen no convierte a quien las usa en escritor o artista, como tampoco el armar un mueble de IKEA me convierte en carpintero”.
Apuesto por una educación que genere cualidades y por una academia que no se conforme con producir textos aceptables, sino que intente recrear e integrar diversos lenguajes que nos permitan ver y escuchar la realidad extradiscursiva de modo renovado
Apuesto por una educación que genere cualidades y por una academia que no se conforme con producir textos aceptables

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&

Recaudarían US$1600 millones más por el alza de retenciones
Es lo que estimaron Equilibra y la Bolsa de Cereales
Dos informes privados coinciden en que el Gobierno podrá recaudar entre US$1500 millones y US$1600 millones más por la suba de los derechos de exportación durante 2024. Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, por el incremento al 15% a los granos y productos de algunas economías regionales, sumado a los dos puntos porcentuales extras de la harina y el aceite soja, que van a subir del 31% al 33%, el Estado pasará de un estimado de US$8509 millones en concepto de retenciones a US$10.071 millones en caso de que el proyecto de la ley ómnibus se apruebe en el Congreso. En tanto, la Consultora Equilibra estimó que estos números serán un 17% superiores a lo proyectado con las alícuotas hasta ahora vigentes en los diferentes productos.
La Bolsa de Cereales porteña sostuvo en un informe que el proyecto de ley presentado por el Poder Ejecutivo en el Congreso la semana pasada propone una modificación en las alícuotas de derechos de exportación para el complejo exportador de la Argentina. “Dentro del sector agroindustrial, la alícuota para la harina y el aceite de soja se incrementará al 33%, eliminando el diferencial arancelario entre el grano de soja y subproductos. Por otro lado, las alícuotas para otros complejos del sector se elevarían al 15%; esto incluye al maíz y al trigo, que actualmente registran una alícuota del 12%”, recordaron.
Reiteraron que otros complejos, como el olivícola, arrocero, cueros bovinos, lácteo, frutícola, hortícola, porotos, lentejas, arveja, papa, ajo, garbanzos, miel, azúcar, yerba mate, té, equinos y lana, mantendrán su derecho en 0%. “La modificación en los derechos de exportación (DEX) resultaría en un aumento de la recaudación, elevándose de US$8509 millones a US$10.071 millones. Esto representa un crecimiento de US$1562 millones, equivalente a un incremento porcentual del 18%”, mencionaron.
En el mismo parámetro, la consultora Equilibra señaló en un informe que las nuevas medidas del presidente Javier Milei, que impactarán en el sector agropecuario, van a representar una recaudación de los derechos de exportación en torno a los US$10.800 millones. Es decir, estas serán un 17% superiores a lo proyectado con las alícuotas previas para los diferentes productos.
Además, añadió que la devaluación del tipo de cambio oficial anunciada el 12 de diciembre y la modificación de las alícuotas de los derechos de exportación llevaron a un incremento del 57% en el tipo de cambio real efectivo agroexportador en la semana del 7 de y el 14 de diciembre pasado.
La modificación de derechos de exportación anunciada por el Gobierno incrementaría la recaudación en US$1600 millones, según el análisis privado. De esta forma, se explicó que por la soja, maíz, trigo, bovino y el resto de las economías en 2024 se alcanzarían US$10.800 millones con los nuevos tributos.

http://indecquetrabajaiii.blogspot.com.ar/. INDECQUETRABAJA

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.