viernes, 6 de octubre de 2017
EDUCACIÓN VIAL; UNA NECESIDAD
Educación vial, otra manera de enseñar matemática, geografía o historia
Especialistas del Súper TC 2000 tienen un programa itinerante con autos de carrera para que los chicos puedan aprender a través del juego
Aprendizaje interactivo con alumnos de Villa Madero.
¿Cuándo es necesario encender las luces del auto? ¿Qué medidas de seguridad debe usar un piloto de carreras? ¿Qué sucede si no usamos el cinturón de seguridad? Son algunos de los interrogantes que el ciclo educativo y de concientización vial Súper TC 2000 Va a la Escuela, de la mano de los periodistas Mauro Feito y Roberto Berasategui, llevó a alumnos de primario y secundario del Instituto San José Obrero y del Colegio Nuestra Señora de Lourdes de Villa Madero.
Esta iniciativa, que lleva más de 10 años, consiste en una serie de exposiciones en las que se refleja la importancia de la educación a través de una actividad deportiva, como es el automovilismo. Con dos pantallas simultáneas que alternan el contenido y un juego interactivo, el ciclo llegó a 300.000 alumnos, 321 jornadas y más de 191 ciudades de nuestro país. "Es una manera diferente de demostrarles a los niños que vale la pena estudiar. Lo vinculamos con una actividad deportiva recreativa y les demostramos que las materias pueden aplicarse a un montón de cosas, como por ejemplo una carrera de autos", dijo Berasategui.
Las pantallas se encienden y un auto rojo con tres pasajeros -un papá y sus dos hijos- comienza el viaje que los llevará por diferentes lugares de la ciudad, como la escuela y el museo, entre otros. Durante los 50 minutos que dura la charla, se genera un ida y vuelta entre alumnos y disertantes en el que los chicos deberán aplicar diferentes conocimientos para que el auto avance: desde matemáticas para calcular lo que gasta un auto de carreras en combustible, pasando por geografía para identificar los países a los que pertenecen las diferentes marcas de vehículos, hasta física para explicar cuál es el efecto de la inercia. A su vez, deberán ir adivinando qué señal de tránsito se corresponde con diferentes situaciones viales, como por ejemplo las vías de un tren, una curva pronunciada y un camino resbaladizo.
Se presentan videos, campañas internacionales, tips de seguridad vial, trajes y cascos que usan los pilotos en las carreras. "Aprendimos un montón de autos y para qué nos sirve cada materia", contó María Victoria Torres Meyer, de quinto grado del Instituto San José Obrero. Para Jerónimo Fernández Oroná, de sexto del mismo colegio: "Fue muy bueno cómo nos contaron las instrucciones y cuidados que hay que tener en las calles. Hoy aprendí que las luces del auto tienen que estar prendidas siempre".
Este ciclo educativo ha sido declarado de interés nacional por la Cámara de Diputados de la Nación y cuenta con la adhesión de la Secretaría de Deportes de la Nación.
"La charla es excelente. Los chicos interactúan muchísimo y para ellos es una dinámica diferente, mediante la cual aprenden jugando", comentó Melanie Domínguez, maestra de cuarto grado del colegio San José Obrero.
Entre los objetivos de este proyecto educativo se destaca que los chicos lleven parte de esos conocimientos adquiridos a sus propias casas.
Para Daniel Zawadzki, representante legal del colegio San José Obrero, "es formidable que los periodistas alienten a los chicos a que adviertan a sus padres sobre las consecuencias de no llevar el cinturón puesto o no tener los papeles al día. Hay muchas más probabilidades de que un adulto haga caso a lo que dice su propio hijo que a lo que exija un agente de tránsito".
C. C.
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